Ao Haru Ride: la distancia entre nosotros

Capítulo 9

Kikuchi-kun ya se encuentra en el aula que quedamos para ir juntos al gimnasio, tal como lo esperaba. Estúpido Kou, me hizo llegar tarde. Por reflejo paso una mano por mi brazo y siento ese dolor de antes. "No me gusta ese tipo". Las palabras de Kou vuelven a mi mente, ¿A qué se refiere exactamente con eso? No es como si me importara, pero aun así...

Dejo de pensar en aquello en cuanto el pelirrojo se levanta de la silla para venir a mi encuentro. Como siempre, me recibe con una sonrisa. No parece molestarle el hecho de que lo hice esperar.

— Siento mucho haberte hecho esperar, se me hizo un poco tarde ─ me disculpo abruptamente mientras me rasco la cabeza, avergonzada.

Kikuchi ríe y menea la cabeza.

─ No te preocupes, ni siquiera he estado aquí cinco minutos ─ miente para tranquilizarme.

─ Mentiroso ─ murmuro y me rio yo también luego de darle un golpecito en el brazo.

Pone una cara de sorpresa, levanta las cejas y abre la boca como si estuviera dolido porque no le creí. Su expresión es tan tonta que no puedo contener la risa y suelto una carcajada. El chico se contagia de mi risa y rompe a reír también.

─ No puedes culparme por querer ver esa linda sonrisa en vez de verte deprimida por haber llegado tarde, ¿Verdad? ─ Dice entonces.

Lo miro anonada ante su comentario. Enseguida me sonrojo y bajo la vista a mis pies sin saber qué decir. No creí que se atreviera a decirme algo así. En realidad, siempre pensé en Kikuchi-kun como un amigo, ¿Es que acaso él me ve como algo más? ¿A esto se refería Kou? Aunque, de ser así no tendría por qué importarle, por lo tanto, tal vez me estoy imaginando cosas.

Escucho que Kikuchi se ríe al verme tan incómoda y salva la situación diciendo:

─ Ven, vamos al gimnasio ahora, así no es tan tarde cuando terminamos.

Asiento y lo sigo en silencio.

Ya llevamos más de media hora practicando, y para que se den una idea, no encesté el balón en el aro ni una sola vez. Aunque, estoy agradecida de estar haciendo esto con Kikuchi-kun. Realmente es una persona amable. Me está teniendo mucha paciencia considerando lo bueno que es en este deporte. Cuando le erro a la canasta, en vez de mirarme con desaprobación se ríe y me anima a hacerlo mejor. Y cuando logro hacer alguna otra cosa bien chocamos los cinco, por lo que me estoy divirtiendo. Estaba segura de que este tiempo de práctica sería una tortura, pero la verdad es que lo estoy disfrutando mucho.

De todas maneras, Kikuchi-kun es un gran profesor. Me ha enseñado ya todas las reglas del juego y me las sé a la perfección. Ahora se dispone a mostrarme por décima vez la técnica para encestar.

─ Mira mis manos, Yoshioka-san ─ me ordena él ─ ¿Ves la posición en la que están?

Observo atentamente cómo pone una mano debajo de la pelota separando sus dedos y lo mismo con la otra, solo que la coloca al costado. Trago saliva memorizando su disposición y asiento cuando lo hago.

─ Bien, ahora tendrás que empujar la muñeca para darle una trayectoria curvada ─ explica mientras él mismo hace el movimiento ─, y luego de lanzar el balón con fuerza, lo vas a ir soltando y dejarás caer la mano del costado. La que se queda deberá acompañarlo hasta soltarlo con las puntas de los dedos.

Finaliza de hablar y acto seguido hace exactamente lo que dijo, haciendo que la pelota entre en el aro. Me quedo mirando embobada por la facilidad con la que realiza la técnica, hasta que me doy cuenta de que dejé mi boca abierta. Me pregunto si Kou es tan bueno como él en este deporte.