Una pequeña mentira.

Capitulo 6.

Capitulo 6.

Abro mis ojos, lo primero que veo es una pared blanca, me giro para encontrarme con el soporte de una silla, me dormí en el suelo, adolorida me levanto y bostezo. Los recuerdos de ayer atacan en mi mente, un nudo se forma en mi estomago, miro donde Harry puso su mano, ahogue un grito de horror, estaba negro y a su alrededor tenia purpura. Con pasos lentos recorro el pasillo, cuando entro en el living veo todo ordenado, eso quiere decir que Harry está despierto y en cualquier momento me vera aquí. Entro en pánico, busco desesperada mis sandalias por el lugar, la encuentro cerca de la puerta, camino apresurada hasta ellas, me las pongo en cuestión de segundos, trato de ir por mi bolso pero me acuerdo que deje todo el club.

-¿Holly?- dice alguien saliendo de la cocina, su verdadera voz está de regreso, cuando lo miro tiene ojeras y sus ojos rojos; él camina rápido a mí cuando esta por tomar mi brazo abre mucho sus ojos- Soy un idiota- pasa una de sus grandes manos por cabello, miro como el color abandona su cara- Joder, perdóname- antes de hacer algo rodea mis hombros con sus brazos y me pega a su pecho, presiono mi cara contra el luchando con el nudo en mi garganta.

-Necesito irme, te recuerdo que tengo padres- me separo de él, su mirada se clava en el suelo y asiente.

-¿Te llevo?-.

-No, conseguiré un taxi- doy media vuelta, giro el pomo de la puerta y la abro- Harry, solo piensa muy bien lo que paso ayer, lo que viste, escuchaste y todo, luego podrás hablar conmigo- lo miro sobre mi hombro, él solo asiente- No hablare de esto con nadie y… sabes que te quiero, siempre lo hare- antes de escuchar respuesta salgo de su departamento, con mi respiración agitada y  camino el pasillo hasta llegar al ascensor, que me lleva hasta el vestíbulo del lugar. Afuera del edificio detengo un taxi, le doy la dirección y me lleva a casa.

Cuando entro a la casa no escucho ningún ruido, camino hasta la cocina, donde me encuentro con una nota de papá diciendo que salieron a un viaje de negocios, tiro el papel a la basura y camino hasta la habitación de Holly. Ahí me quito las sandalias y el enterizo, camino hasta el baño donde quito cualquier rastro de maquillaje; me volteo y miro sobre mi hombro. Mi espalda solo está un poco roja, me volteo de nuevo soltando un suspiro, abro la ducha y me doy un largo baño. Después la misma rutina de siempre, con el albornoz puesto camino hasta el armario, donde me pongo la ropa interior, un short de pijama morado, una blusa negra con un hombro caído y un “23” blanco en el centro, cubro mis pies con unas medias negras con bolitas de colores y amarro mi cabello con una coleta alta. Busco el diario de Holly, desde que lo descubrí no lo he vuelto a leer, muerdo mi labio mientras lo abro y camino hasta la cama.

 14 de febrero.

Hoy fue el día de San Valentín, Harry me ha llevado a mi restaurante favorito, después caminamos por un precioso parque, me dijo las más hermosas palabras y por ultimo me regalo un hermoso collar con una H de dije, yo igual. Por último me llevo a su departamento, donde estuvimos a punto de pasar a otro nivel pero eso no ocurrió, estoy segura que no era el momento para eso.

Holly xx.

Suspire de alivio, entre él y Holly no paso nada.

4 de marzo.

Estoy harta de fingir algo que no soy, estoy harta de aparentar ser una chica egocéntrica en el Instituto, estoy harta de comer menos solo porque tengo a miles de personas criticándome por Internet, estoy harta de que mamá solo hable de un futuro contrato con una compañía de modelaje, estoy harta de creerme más que otros, dios, todos somos iguales, ni más ni menos.

Por eso he decidido huir mañana, me iré lejos, al lugar donde siempre soñé ir, pero nunca me dejaron, por fin seré libre de tanta mierda, me iré con un gran dolor en mi corazón por dejar a papá, a mamá que debe entender que es mi vida y a mi novio, Harry.