Drew abrió los ojos lentamente, sorprendida por el esfuerzo que necesitaba hacer. El aire era helado a su alrededor, y le dolía la mandíbula. No reconoció el entorno. Estaba en un cuarto de una cabaña, acostada en el suelo. Movió los brazos y descubrió que ya no tenía las esposas que tenía antes.
Sombras pálidas de luz entraban por la ventana. Amanecía. Así que llevaba allí hay por lo menos dos horas.
Lágrimas escapaban de sus párpados. Joey. Nunca le había dicho que lo amaba. Y ahora ya no tendría la oportunidad de decirlo.
Un sonido la sorprendió y el dolor asaltó su cadera, cuando el raptor la pateo.
—Veo que está despierta. Bueno. Ahora levántate—
Lo miró cautelosamente. Fue la primero vez que lo hizo de verdad. Esperaba encarar un hombre vil y brutal, pero solo veía lo que parecía ser un hombre amable, de apacible altura y tamaño medio.
Sonrió como si leyendo sus pensamientos.
—No te dejes engañar por mi buen aspecto, mi querida. Ahora, te puedes levantar tú sola o puedo obligarte, y te aseguro, no será una experiencia agradable—
Quedó paralizada por el terror. Quiso vomitar. Puso las manos en el suelo y consiguió impulsarse para ponerse de pie. En cuanto se levantó, el hombre le agarró el brazo y la empujó en dirección a una silla.
—Toma asiento—
Se hundió en la silla situada tras un viejo escritorio. La silla estaba rota y crujió cuando coloco su peso en ella, por un momento, temió que se desmoronaría.
Puso su mano en el escritorio para equilibrarse. Estaba helada. Más helada que en cualquiera otro momento de su vida. No había ningún calor en la cabaña.
Ninguna protección contra el frío. Sentía los miembros congelándose. Temblaba incontrolablemente. Una vez que comenzó, no podía parar.
El hombre encendió un cigarrillo y perezosamente, sopló el humo. Apoyándose contra la mesa, la observó con ojos fríos.
—No tengo paciencia para rodeos. Voy a matarte—
El pánico la inundo. Su garganta se endureció, y por un momento no pudo respirar. No quería morir.
—Voy a ser civilizado al respecto—
Pareció asombrarse con su proclamación. Hasta emitió una risa seca.
—Voy a ofrecerte una elección. Una muerte rápida e indolora, o—pausó para hacer efecto—puede ser problemática, prolongada, y muy dolorosa. Tu elección—
Sintió que la boca se le secaba.
—Todo lo que tienes que hacer es decirme a quien más le contaste lo qué pasó en la noche de su boda. Muy simple. El Sr. Wood está muy ansioso para proteger sus intereses. Lo que sería difícil en una celda de prisión, estoy seguro que te puedes imaginar—
Sacó un grande y afilado cuchillo, a medida que hablaba. Acarició el metal frío y brilloso con las puntas de los dedos, moviéndolos de la extremidad hasta la punta.
La mente de Drew se desboco. Era un bastardo hablador. Claramente disfrutaba de la situación. Obviamente si hablaba, terminaría con el asunto en minutos. Miró el cuchillo, el terror recorriéndole todo el cuerpo.
Cerró los ojos e intentó encontrar valor. Recordó a Joey y se mordió el interior de la mejilla para alejar el llanto. No podía permitirse que aquel bastardo escapase después de lo que hizo.
—¿Entonces lo qué será, Sra. Wood? ¿Podemos tener una breve conversación antes de su intempestivo fallecimiento?—
Con las manos abiertas sobre escritorio, se quedó en pie.
—Vete al infierno—escupió.
Sus ojos se endurecieron. Cruzó el espacio entre ellos y sin advertencia, agarró su brazo y lo empujó hacia atrás. La giró hacia el escritorio. Gimió de dolor y él continuó a haciendo una presión enorme en su brazo.
Empujó más alto. Gritó en agonía y sintió un crujido.
¡Había quebrado su brazo!
Soltándola, dejó su brazo caer, oscilando a su lado. Sintió que la vista se le nublaba cada vez más, hasta se temió desmayarse por el dolor. Llevó la mano el escritorio, intentando mantenerse de pie. Las puntas de los dedos encontraron un lápiz y ella lo agarró.
Se sintió invadida por la ira, la adrenalina zumbando por sus venas, se giró, con el lápiz en la mano y lo hundió en el rostro de su torturador. Ahondó en su mejilla, y él se alejó con un aullido de dolor.
Ella no desaprovechó el tiempo. Ignorando el terrible dolor de su brazo, se arrojó hacia él, golpeándolo con la rodilla en la ingle.
Una vez, dos veces y una tercera hasta que él cayó al suelo.
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Enamorada de Tres Hermanos [NKOTB]
FanfictionEsta chica oculta algo, y estos tres chicos anhelan tenerla en su vida, como su mujer. {Drew Barrymore, Jordan Knight, Jonathan Knight, Joey Mcintyre} -Adap-