COPOS DE NIEVE, especial navidad

Capítulo 8

𝕮𝖔𝖓 𝖙𝖔𝖉𝖔 𝖘𝖚 𝕮𝖔𝖗𝖆𝖟𝖔𝖓

"Tardé un minuto en conocerte, pero me tomará toda una vida poder llegar a olvidarte"

─Señor Kann, Señor Chase, a mi oficina, ahora─ indicó con enfado la Señorita Carré, comenzando a caminar hacia allí.

Jeff, algo desanimado, ayudó a ponerse de pie a Dash, para ambos avanzar hacia la oficina. El de anteojos, antes de entrar, volteó su mirada hacia donde se encontraba Inés, quien solo negó con su cabeza, indicándole que esta vez se había pasado de la raya.

Bree y Kennedy comenzaron a recoger con tristeza todos los trozos de adornos esparcidos por todo el suelo; poco a poco, el resto de bailarines se empezaron a acercar para ayudarlas, y así, finalmente, lograr poner de pié el gran árbol, ahora con alguna que otra rama quebrada.

─¿Y ahora?─ preguntó Lena, abrazando por los hombros a Bree.

Todos observaban el pino ahora sin ningún color excepto por el verde neutro de sus hojas, en busca de alguna idea o respuesta para la rubia.

─¿Qué ustedes no habían ido al Garnier en busca de adornos?─ preguntó un chico de tercera división, dirigiéndose a Max, Inés y Clara.

─Además de que no los trajimos─ comenzó a hablar Inés.

─No alcanzarían como para llenar todo el árbol─ completó la ojiverde─ ni siquiera ocuparían la mitad─ añadió.

─¿Tienen velas?

Todos dirigieron su mirada hacia Arthur, quien se acercó al centro del lugar.

─Que yo sepa, no se cortó la luz─ comentó Thea con sarcasmo, sin prestarle mucha atención.

─No Lady Thea, no son para eso─ aclaró─ en mi hogar, decoramos nuestro árbol con velas y frutos─ explicó─ se que tal vez no quedará como lo era el vuestro, pero creo que podría funcionar.

Todos se miraron unos con otros, algo dudosos al respecto, y al ver que nadie decía nada, Clara se apresuró a hablar.

─Hagámoslo─ todos la observaron─ después de todo, no perdemos nada en intentarlo.

─Entonces no se diga más─ hablaron Issac y Lena a la vez.

─A buscar velas se ha dicho─ añadió Max, acercándose a su amiga, quien le regaló una pequeña sonrisa.

Y dicho y hecho, todos los alumnos de la Escuela de Ballet de la Ópera de París comenzaron a recorrer todo el edificio en busca de estas.

Muchos habían ido a la cocina y otros a sus cuartos y la habitación del conserje, por si las dudas; y luego de recibir una buena regañada por parte de la directora, Jeff y Dash también se sumaron a la búsqueda.

Diez minutos habían pasado, y ya tenían una gran cantidad de velas de distintos tamaños en una caja que había traído Kennedy. Velas pequeñas, grandes, de colores y aromáticas eran algunas de las tantas variedades que habían.

Cuidadosamente comenzaron a colocarlas en el árbol, para luego sumar algunos frutos que Arthur había traído de la cocina─ Aún sigue faltando algo─ comentó Issac, observando detenidamente el pino.

─Esto─ todos miraron a Bree sacar de una pequeña cajita una estrella dorada, decorada con brillos del mismo color─ ¿qué?, siempre hay que tener una de repuesto─ todos rieron ante lo dicho, para el moreno acercarse y ayudarla a alcanzar la punta del árbol, en la cual, colocó la estrella.

─Ahora si, está perfecto─ declaró el chico, cruzando sus brazos.

─Tienes razón─ Dash intentó acercarse a la planta, pero...

─¡No!

El de anteojos se sobresaltó ante el grito que pegaron la mayoría de personas allí─ está bien, está bien─ comentó alzando sus brazos en son de paz mientras que retrocedía─ no lo tocaré.

●

─Chicos─ Inés se acercó al grupo de amigos, quienes ayudaban a Jeff a terminar su tan anhelado muñeco de nieve─ deben ver esto.

Clara, Issac y Max se acomodaron a ambos lados de la de rizos, mientras que Jeff la observaba a la vez que seguía acomodando la sonrisa del muñeco.

─¿Qué es?─ Max preguntó algo confundido.

─Es un libro, ¿qué no es obvio?, presta más atención Max─ comentó el rubio, sin prestar mucha atención a lo que sucedía.

─Me tomé la libertad de buscar en la biblioteca un libro de los linajes reales de Francia─ comenzó a hablar Inés, ignorando el comentario de Jefrey.

─¿Y qué hay con eso?─ Issac aún no entendía.

─¿Me dejas terminar?─ el moreno solo asintió─ sigo, busqué sobre el reinado de la reina Amelie y sus caballeros, y no hay ninguna familia con el apellido de la Court que pertenezca a ese grupo.

─¿A qué quieres llegar con todo esto?

─¿Alguien más interrumpirá?─ volvió a preguntar ya algo molesta, mientras que todos miraban mal a Jeff, quien solo agachó su mirada, para dedicarse a colocarle la nariz a su hombre de nieve─ no satisfecha con la información, seguí buscando, y encontré esto─ quitó del bolsillo de su pantalón una pequeña hoja doblada, la cual desdobló para comenzar a leer.

"Belmont De la Court, fue muy reconocido por sus famosos pasteles; cocinero de la corte y un fiel sirviente de la reina Amelie.

Sus dos hijos, Chandler y Arthur de la Court. El primero estaba decidido en seguir los pasos de su padre, al contrario del último, quien deseaba con todo su corazón convertirse en un caballero.

Pero tristemente, desapareció a sus diecisiete años, y nunca más se supo nada de él."

─¿Desapareció?, ¿y cómo es que está aquí ahora?─ preguntó Jeff, dejando de lado a "Norberto" y acercarse a Inés.

─¿Eso significa que no se irá?─ preguntó con desagrado Max, ganándose un suave golpe en su hombro por parte de Clara.

─No, escribieron eso porque está aquí ahora; el tema de los viajes en el tiempo es muy delicado─ comenzó a explicar─ por ejemplo, si mañana regresara a su época, todo cambiaría, libros, documentales, información...¡¿no es increíble?!

─Inés, no es momento de que tu lado científico salga a la luz─ habló el rubio.

─Eso no importa ahora Jeff─ interrumpió el moreno─ Arthur nos estuvo mintiendo todo este tiempo.