Katawa Shoujo: Un Nuevo Desafio

Acto X. La meta

Es el día, nos encontramos en la pista donde se realizará la prueba, la emocion y los nervios son imposibles de medir.

Mirando a mi al rededor veo una gran cantidad de participantes, algunos ya han corrido, inclusive Aiko, la cual ahora mismo se acerca hacia nosotros.

—Ibarazaki.. ¿Es verdad entonces lo que decían?—

—Uhm Aiko.. bueno así parece, competiré..— Emi bajo su vista y noto un vendaje en uno de los tobillos de la joven de cabello rubio. —Aiko tu..—

—Oh? Ah eso.. no es nada, simplemente una torcedura. Por fortuna ocurrió una vez finalice la prueba y solo me queda esperar el tiempo..—

El rostro de Emi refleja un poco de preocupación, pues ver qué una de las competidoras haya tenido ese percance es llamativo.

—Emi..— Aiko se acerca a ella, al mismo tiempo que la llama por su nombre. —Si bien desde que te conocí fuiste mi rival... Se admitir cuando alguien tiene gran capacidad y potencial.—

Escuchar a una persona decir eso, después de que se mostrará soberbia y decidida a superar a Emi, es sinceramente increíble y demuestra muchos buenos valores, que a veces en la competencia pueden pasar desapercibidos.

—No importa lo que pase el día de hoy... Demuéstrale a todos los presentes un poco de tu fuerza y espíritu, enséñales a la Emi Ibarazaki que conocí en la academia, aquella que jamás se rendía—

Aiko estira su mano con intención de estrechar la mano de Emi, está última, sorprendida, acepta para después regalar una sonrisa en medio de ese apretón.

—Entiendo Aiko.. lo haré, muchas gracias..—

—Eso me agrada, pero promete algo Ibarazaki..—

—Claro ¿Que cosa?—

—No importa quien gane, quien pase o quién no pase, debes prometerme que participaras y vas a competir en los interuniversitarios del año que viene—

—Jaja, claro! Más vale que te prepares, pues verás lo mejor de mi!—

—Suenas segura Ibarazaki, pero puedo sorprenderte—

Ambas se regalan una sonrisa de desafío pero amigable al mismo tiempo.

—Muchas suerte..—

—De nuevo gracias Aiko—

La joven rubia se despide y se dirige con el resto de su grupo, mientras nosotros vamos rumbo a encontrarnos con el enfermero y la entrenadora.

—Oh ahí estan— Hitomi señala hacia donde se encontraban ambos.

—Bien Emi, ya estás anunciada y me pidieron que te entregué esto, es el número que usaras—

—Oh, que curioso, los número forman mi cumpleaños..—

Evidentemente así era pues en la identificación aparecía el número 143, siendo el 14 el día exacto de su cumpleaños y el 3 haciendo alusión al mes de marzo.

—Supongo que debe ser una señal de buena fortuna no te parece hija?—

—Jeje, espero que así sea—

Entre la multitud logro divisar una figura muy conocida, bueno a la par de ese cabello rojizo, es Rin.

—Oh hasta que los encontré al fin, si que hay gente aquí—

—Rin, me alegra mucho que pudieras venir—

—Y a mi! Acabe un trabajo antes para poder estar presente, esto me trae recuerdos—