2 meses después.
Estábamos en nuestro nuevo apartamento, hace un mes que nos movimos para alejarnos de todo lo que estaba pasando. Ahora estamos bien, tenemos una vida buena y aquí no nos estresamos por nada. Todos habíamos empezado a trabajar pero menos Jungkook porque tendría que trabajar con su Papá algo que el no quiere hacer.
Salí de la habitación para ir a la sala donde vi a mi bebé dormido, ayer había ido a buscar trabajo en algún lugar de aquí pero todavía no encontraba algo en lo que él sea bueno.
- Bebé, vamos a la cama — dije y el solo se movió en su lugar —
Vi como sus labios hicieron un leve puchero y sonreí. Fui a la habitación para sacar una cobija y ponérsela encima ya que el clima ahora estaba frío. Levante su cabecita y le puse una almohada para que estuviera mejor. Camine a la cocina y empecé a hacer algo mientras el se levantaba.
- Que debería de hacerle? — dije y miré un libro de cocina que siempre tenía aquí —
Busque algo en el libro y lo primero que encontré fue una pasta, a el le gusta mucho que le cocine aunque no sea tan buena en eso pero le gusta. Busque más recetas y lo más práctico que vi fue ramen pero más diferente a lo usualmente comemos.
(...)
Termine de cocinar y limpie todo el desastre que había echo. Dejé todo perfecto y fui a la sala para ver si mi bebé ya se había despertado. Lo miré sentado en la cama viendo una chancla cosa que me hizo reír.
- buenas tardes mi amor — dije y el me miro — Te sientes bien?
- Si, solo estoy cansado, vine a las 3 de la mañana y no encontré nada — dijo y yo acaricié su cabecita —
- Mi Amor, esta bien ya verás que encontrarás algo para ti — dije y bese su mejilla —
- Estoy enojado porque no puedo ser el hombre de esta casa, debería ser yo quien traiga la comida a la mesa — yo reí por lo tierno que es —
- Bebé, a mi no me molesta que puedas — lo levante del sofá — sabes que los dos estamos para apoyarnos aquí así que no te preocupes.
- Tengo hambre — dijo y lo lleve a la cocina — mmm, huele bien.
- Cocine yo — dije y me dio un beso corto —
- Grasias — dijo y le sonreí —
Empezamos a comer y mientras el me contaba a los lugares que había ido. Se le es muy difícil todo esto y se enoja por no poder ayudarme en la casa, a mi no me molesta nada de lo que está pasando, al contrario me gusta servirle a mi bebé.
Terminamos de comer y yo me encargué de lavar los platos mientras el solo me miraba atentamente lo que hacía. Se levantó de la silla y me abrazo por detrás poniendo su barbilla en mi hombro.
- que pasa? — pregunte confundida —
- Nada, solo que an pasado unos días que no te abrazo así — beso mi cuello —
- Lo se — dije — que te parece si salimos a distraernos?
- Ahorita, son las 4:00 de la tarde bebé — dijo —
- Eso que importa, podemos ir al centro o a un parque para caminar juntos — tome su mano — hablar de cosas importantes y eso.
- Si mi Bebe quiere ir, pues iremos — dijo y beso mis labios —
Caminamos a la habitación y los dos empezamos a buscar algo que nos mantendría calientitos por el frío que está haciendo ahora. Cuando terminamos, tome las llaves del apartamento y al salir nos subimos al elevador que nos llevaba al estacionamiento.
