Capitulo 38

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Después de observar como mi hermano se marcha, suspiro.
—Anna verás..carraspea y me mira .
Su mirada carece de alegría,sus ojos están sumidos en la tristeza más absoluta.
—Alan por favor ,sea lo que sea..no me ocultes nada .
Él me coge de las manos con dulzura,sus ojos automáticamente se llenan de lágrimas que amenazan con brotar.
—Anna ,mi hijo está demasiado mal..sus heridas no sanan y él no despierta.
El chamán dice que está luchando una batalla entre la vida y la muerte.
—No no ...a él no le va a pasar nada,lloro.
No puede pasarle nada malo.
Hablaré con el chamán ,mi vida por la suya,digo desesperada y envuelta en un mar de lágrimas.
—Eres muy buena Anna,pero no puedes hacer eso corazón.
El chamán dice que la marea negra ,le está ganando la batalla a la luz.
Dice que mi hijo está agarrandose a esa luz con esas fuertes garras que posee y que amenaza a la oscuridad con sus afilados colmillos,pero necesita algo más para luchar con más fuerza y ganar la batalla.
—¿Qué necesita Alan?yo misma me encargaré de traerselo.
Alan sonríe levemente.
—Solo te necesita a ti.
Ve con él pero en media hora tienes que prepararte,los chicos no deben de tardar en llegar y celebraremos la ceremonia de despedida de Ankara.
Después podrás estar con él todo el tiempo que quieras y mi hijo necesite.
—De acuerdo Alan,digo y me levanto rápidamente y corro como una loca hacia el cuarto donde está mi amor.

El pasillo se hace interminable hasta que por fin llego a la puerta que me separa de mi amor.Giro el pomo con las manos temblorosas y por fin le veo.
Los ojos automáticamente se me llenan de lágrimas,mi amor está ahí tumbado en la cama tapado con una sábana blanca dejando su torso al descubierto,me acerco despacio y me arrodillo junto a su cama.
Tiene las heridas aún abiertas ,sus gruesos labios se muestran tan blancos como la sábana que le cubre y sus ojos están cerrados.

—Hola amor,estoy aquí contigo.
Estoy en perfecto estado y voy a estar aquí contigo hasta que despiertes.
Tengo muchas cosas que contarte,ahora resulta que tengo un hermano.
Papá estaba vivo Adriel.

No puedo pensar en su estado ,no puedo transmitirle mi temor ,me recuerdo constantemente a mi misma.

Me acerco a él un poco más y acaricio su pelo con las llemas de mis dedos.
—No tardes en volver amor ,te necesito.
No puedes ni imaginar lo mucho que significas para mi,desde que te vi por primera vez,tus ojos me atravesaron el alma..

De pronto se abre la puerta.
—Anna tienes que prepararte para la despedida.
—De acuerdo,me giro y me dirijo a mi amor.
En un ratito vuelvo para no volverme a ir de aquí hasta que despiertes,te lo prometo.
Le doy un beso en la frente con dulzura y me marcho .
Suspiro para no derrumbarme ,ahora tengo que despedir a papá.

Que irónico que tenga que conocerte el día que voy a despedirte..

El guardiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora