Ya se había convertido para Haruka en una rutina, el nadar desde lo profundo del océano hacia la orilla de la playa, aun sabiendo que era peligroso si un humano lo veía, después de todo él era una criatura del mar, a la que consideraban sólo un mito, eso no le importaba siempre y cuando se le permitiese ver nuevamente a aquel muchacho de cálida sonrisa. Pd: Créditos de la portada a @Blackkely