―así que fantaseabas conmigo, ¿hum? ―tarareó el ojimiel trazando círculos sobre su espalda desnuda. ―¿y quién no? ustedes tres llevan protagonizando mis sueños húmedos desde que empecé a trabajar aquí. ―¿los tres? ¿no te basta con uno solo, jae? ―quiero el paquete completo.