CAPÍTULO 9

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-Adriana Santos Coy Rivera. Originaria de la ciudad de Puebla México, nació el 16 de noviembre de 1989. Su padre es el importante empresario dueño de una de las inmobiliarias más importantes del país "SC Desarrollos Inmobiliarios" Don Adrián Santos Coy junto con uno de sus hermanos, Don César fundaron la empresa líder en bienes raíces que ahora la coloca como la mejor del gremio en Puebla. Su esposa la señora Alicia Rivera y su hija menor Alejandra forman a la familia Santos Coy Rivera, siendo una de las familias más reconocidas no sólo por su poder adquisitivo, sino por su calidad moral y el servicio social que siempre han demostrado tener a diversas causas. Adriana, la hija mayor se caracteriza por ser una joven tranquila y enfocada en sus metas. Estudia Administración de Empresas en una reconocida universidad de la ciudad, práctica ballet clásico desde los seis años, no tiene algún tipo de vicio y su círculo de amistades es pequeño tomando en cuenta la gente que la rodea por la vida social de sus padres. No ha tenido más que una relación de noviazgo que duró dos años durante la Preparatoria. Es la mujer más hermosa del planeta, tiene unos ojos grandes de color verde que resaltan con un brillo único, cabello largo castaño oscuro y ligeramente ondulado. Es delgada aunque su cuerpo parece un poema de lo bello que es, te invita a querer tomarla de la cintura y acariciar su suave piel, sus piernas largas y marcadas por el ejercicio junto con su caminar enamorarían a cualquiera. Sus labios gruesos y su sonrisa recrean el cielo en la tierra... - leí a Daniel mientras sostenía un sobre.

-Lo último no lo dice, lo agregaste tú - dijo mi mejor amigo mientras encendía su cigarro.

-¿Y qué? Fue un gran cierre ¿no crees?

-Ernesto, ¿no se te hace extremo y de miedo eso de mandar un investigador privado para averiguar toda la vida de Adriana?

-Tiene casi dos semanas que no me busca para nada, ni yo a ella, de alguna manera tengo que saber su vida.

-Es acosador - dijo.

-No me importa, el hecho de que ella no me busque no quiere decir que la voy a dejar de ver con ojos de amor. Tengo que saber más de ella para poder conquistarla - dije convencido.

-No creo que quiera nada contigo. Es más, creo que te odia y mi teoría de que estaba enamorada de ti muy probablemente falló.

-Adriana Santos Coy Rivera se va a casar conmigo y cuando vayas a mi Boda me voy a reír de ti - dije recargándome en mi asiento del auto.

-Cuando no estabas enamorado caías mejor- dijo Daniel bajando del auto. - Te veo al rato, no me gusta estar cerca de gente cursi y melosa.

Daniel era un insensible, le corría aceite de cocina en lugar de sangre por las venas. Pensativo miré hacia la puerta de entrada de la universidad.

-Es extremo mandar a investigarte pero ahora que sé de dónde vienes y quién eres me atraes más. ¡Voy por ti Adrianita! - dije en voz alta al cerrar con llave mi auto.

*****

Casi dos semanas sin que Ernesto intentará acercase a mí. Acepto que era extraña esa reacción, no lo había visto más que una vez fuera del gimnasio hablando con un profesor y no me saludó ni a la distancia, no se inmutó por mi presencia cercana. Tal vez el muy patán ya tenía a otra chica en la mira y se había olvidado de mí al ver que descubrí su juego y que por nada del mundo iba a caer. Aunque a decir verdad si quería que me viera, así fuera de lejitos. Muy en el fondo deseaba hablarle pero lo mejor era alejarme de una vez por todas. Mich insistió que debería hacer algo para llamar su atención y luego ignorarlo, aguijonearlo por puro orgullo, sólo para vengarme de los rumores que había soltado sobre mí...Ese grupito de víboras hipócritas me habían definido como "una niña tonta, recatada a la que fácilmente se le podía ver la cara de estúpida". Odiaba que a mis 19, me dijeran "niña" y me molestaba por la intención de minimizar el valor de una mujer, era muy común en nuestra clase social llamar así a personas inmaduras que no estaban lo suficientemente listas para enfrentarse a la vida por sí solas. Deseaba venganza con el autor de esos rumores. Después de calmar mi furia me di cuenta que no era buena idea. Meterse con un hombre así traería problemas y más chismes.

Algo Contigo (en proceso de corrección)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora