veintitres

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Marco había despertado.

habían pasado cuatro días desde el accidente. jaeden y sofi fueron dados el mismo día de alta, pero Marco aún había tardado tres días en despertar.
Wyatt estaba, literalmente, en un vacío legal. todo dependía de lo que Marco decidiese: presentar cargos e ir a juicio, donde seguramente wyatt saldría muy mal parado, o llegar a un acuerdo extralegal.

los padres de wyatt, que volvieron del extranjero debido a la situación, decidieron esperar a la decisión de Marco antes de nada, aunque finn ya se había ofrecido a participar en el acuerdo. prefería hacerse pasar por su hijo antes de que Wyatt estuviese en un centro de menores (aunque ya le habían abierto un expediente).

Wyatt había recibido visitas de todos sus amigos, desde Caleb hasta Noah, pero sólo quería ver a una persona: jaeden.

y no se había presentado en ningún momento en comisaría.

a pesar de que la propia comisaría le envió muchísimos mensajes por petición de Wyatt.

Jack le había intentado explicar a wyatt que estaba raro. casi no comía y se dedicaba a estar ido todos los días. lo había intentado convencer de venir a verlo más de una vez, pero lo negaba de forma retunda.

no había salido de casa hasta hoy, para ir a la habitación de Marco al hospital, nada más saber que había despertado.

y ahí estaba, en la puerta, de forma inmóvil, viendo como Marco lo miraba desde la ventana con una sonrisa burlona. jaeden cerró la puerta detrás de ellos.

–¿que vienes? ¿a pegarme tu también?– rio.

–no presentes cargos– dijo de forma sería apretando el puño. Marco abrió los ojos al escuchar aquellas palabras, caminado hacia el.

–¿quién eres tú para decirme lo que debo de hacer?– puso sus manos en los bolsillos mientras caminaba.

tenía una tirita en la ceja, y el ojo morado. la mandíbula la tenía un poco desplazaba hacia la derecha, y se podía ver como cogeba. realmente wyatt lo había dejado en la mierda.

–tu novio, amigo, o lo que sea casi me mata– rio acercándose más, indimidando un poco jaeden –y ahora una zorra que se dedica a a estar en los callejones buscando dinero a cambio de una mamada viene a decirme ¿como reaccionar?– jaeden tragó saliva y Marco rio –que poca dignidad te queda.

se giró dándose la vuelta, pero jaeden lo agarró del brazo inpidiendole que siguiese caminando.

–hago lo que quieras– los ojos se le empezaron a aguar –pero por favor... no presentes cargos.

Marco lo miró por un momento con una mueca de desprecio. Le agarró de la mandíbula con fuerza dándole un golpe contra la pared, acorralandolo.

–¿ahora cambias del dinero a asuntos legales?– dijo entre dientes, apretandolo más fuerte, haciéndole daño mientras lloraba –creo que lo que me propones ya tendría que salir de ti en compensación por lo que me hizo ese hijo de puta.

le soltó apartándose de la pared, dejando a jaeden tirando en el suelo con un moratón en la mandíbula y destrozado.
Marco miró como en esa postura la falda se le levantaba un poco, dejando ver su ropa interior, y al ver su expresión de denigracion total, le produjo una erección.
se sentó en la camilla, viendo a jaeden, quien seguía llorando en la esquina, temblando.

–¿quieres que no presente cargos?– jaeden asintió en medio del llanto –ven aquí entonces.

jaeden se quedó inmóvil por un momento, mirándolo. Le daba asco, pero no quería que a Wyatt le pasase nada. comenzó a levantarse poco a poco.

child love ; fackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora