El Ángel de corazones de las llamas rojas

Capítulo 16: Dolores de cabeza

Apenas quedaban unos pocos días para la reunión de facciones con la semana recién empezada, e Issei ya llevaba una semana de locura, un comienzo de semana que no se la deseaba ni a su peor enemigo. Las clases en la Academia Kuoh iban de maravilla, su relación con Ophis, Serafall y Gabriel iba fortaleciéndose cada vez más....No, el problema que Issei tenía no era de ese estilo. La fuente de los dolores de cabeza que Issei y Ddraig llevaban experimentando durante toda la semana no era algo tan cotidiano.

Cada vez que alguien mencionaba al Arcángel Michael, aunque fuese de pasada, provocaba que Issei rompiese lo que estuviese sosteniendo en sus manos, y Ddraig empezaba a soltar su aura a través de la Boosted Gear. Cada vez que alguien mencionaba algo relacionado con espadas, o hablaba en un tono infantil, uno de los párpados del castaño empezaba a temblar, signo del desarrollo de un tic nervioso por parte del castaño.

Estaba claro que la situación en la que el castaño se encontraba le superaba completamente, pues no había tenido tiempo para acostumbrarse, a pesar de que sus padres estaban encantados con la nueva situación.

Seguramente se preguntarán ustedes, queridos lectores, cuál era el motivo por el cual Issei estaba tan irritable, cuál es esta situación en la que el castaño se encontraba en esos instantes. Esta pregunta que muchos de vosotros os debéis estar planteando ahora mismo es fácil de responder, pero para eso debemos remontarnos unos días atrás, más concretamente en el momento de la entrega de Ascalon a Issei por parte del Arcángel Michael.

Inicio de flashback:

-Esta espada es Ascalon, la matadragones, la única espada sagrada con un atributo dragon slayer -dijo Michael-. Ahora esta espada es tuya, Issei-kun.

Tras haber presentado la espada Ascalon al castaño, Michael le tendió la espada al castaño, en señal de que la espada era ahora del castaño y, por lo tanto, podía cogerla y quedársela.

Issei cogió la espada, admirando la forma de la espada y su balance. Era una espada sorprendentemente ligera, pues el tamaño que tenía indicaba en principio que la espada solamente sería ser capaz de ser blandida con dos manos, y en cambio Issei la estaba sosteniendo con facilidad con una mano. Dando unos mandobles al aire con al espada, vio que el equilibrio de la espada era de su agrado.

Issei no era muy aficionado al arte de la espada, y prefería tanto ataques mágicos o ataques puramente físicos antes que ataques con armas pero debía reconocer que el tener a Ascalon en su repertorio de ataques ya muy variado era algo sumamente conveniente.

-"Sí, este tipo de armas puede ser sumamente beneficiosos para combates contra cualquier dragón, y en especial contra el Blanco" -dijo Ddraig, confirmando los pensamientos de Issei.

Despegando por fin la mirada de la espada, Issei se fijó en Gabriel y Michael, los cuales estaban mirando fijamente la espada, como si esperasen que algo le pasara a la espada.

-Estooo...., ¿por qué están mirando la espada tan fijamente? -preguntó Issei al ver que seguían sin desviar la mirada de la espada-. ¿Acaso están esperando que la espada haga algo?

Ambos asintieron ante la última pregunta del castaño.

-Simplemente estamos esperando a que la espada te juzgue si eres digno o no de portarla -dijo Gabriel-. Ascalon es muy caprichosa y exquisita, así que puede pasar cualquier cosa.

Issei, al oír esto, miró la espada de nuevo, esperando que hiciese algo raro, como por ejemplo ponerse al rojo vivo, o cobrar vida y apuñalar al castaño. Esperando a que pasara algo, todos los presentes se quedaron quietos, claramente quedando en espera de que algo pasara.