Extra Sweet | LuWoo ↺ Omegaverse

《Capítulo 7》

No estaba para nada feliz y conforme de llegar al café en donde trabajaba, y sobre todo, por como se encontraba en términos respecto a YukHei, su jefe. Suspiró y se armó de coraje, el suficiente como para entrar al local y actuar muy indiferente, como si nada de lo que le dijo YukHei anteriormente le haya afectado.

─Oh JungWoo, que bueno que ya has llegado. ─recibe cordialmente el alfa, ofreciéndole su mano al omega con una rara e inexplicable dulzura. Este frunce el ceño y no acepta el gesto, yendo de largo hacía la parte de atrás del café en donde aguardaba su delantal de trabajo.

Primero le decía cosas feas y ahora estaba como si nada ofreciéndole un saludo.

Los alfas si que son idiotas, pensó JungWoo.

El joven hombre se muerde el labio inferior y pasa una mano sobre su cabeza varias veces. Realmente la situación con JungWoo era peor de lo que pensaba.

Se acerca cautelarmente hasta la parte trasera, en donde el omega acostumbraba a cambiarse y dejar sus cosas, al llegar ahí, pudo visualizar como el chico se retiraba la gran sudadera gris que llevó ese día y sólo quedaba en una camiseta violeta simple, que parecía quedarle ceñida a su cuerpo; una parte de dicha camiseta se levantó y dejó a la vista una pequeña porción de su liso y delicado torso.

Para ser un beta tenía proporciones y curvas muy bonitas, casi iguales a las de un omega. Pero eso no podía ser porque JungWoo era un beta ¿Verdad?

─¿Q-Qué tanto me estás mirando? ─pregunta nervioso y con las mejillas calientes. YukHei se sobresalta y se pone una mano en el pecho, pensando en qué iba a sufrir un jodido infarto a sus 27 años de edad.

─Lo siento JungWoo, yo sólo venía a hablar contigo, pero por lo que veo estabas ocupado. ─claro, finge demencia.

─Eso ya no importa. Me iré a trabajar. ─niega con una de sus manos y aparta a Zhang de su camino, pasando justo a su lado. Él no sabe cómo actuar e instintivamente toma con fuerza al omega con una de sus manos.

─No, tenemos que hablar aquí y ahora.

JungWoo no sabe por qué se siente tan intimidado por YukHei; su voz se volvió más gruesa y demandante que antes, y puede jurar que esa es la voz de mando de un genuino alfa. Podía reconocerla gracias a su padre y sus tantos arranques de celos cuando otro alfa se propasaba con su esposo.

─Y-YukHei... M-Me estás lastimando. ─murmura para sus adentros, aún así es escuchado a la perfección por el aludido, quien debilita su agarre en la muñeca contraria.

No sabía ni en qué momento YukHei le acorraló en una esquina contigua, encontrándose incómodamente uno muy cerca del otro.

─Lo siento JungWoo, lo siento por tu muñeca, por lastimarte, por lo que sucedió el otro día... Lo siento tanto, no me gustaría estar en malos términos contigo. Perdóname.

La brutalidad fue sustituida por unos cálidos y grandes brazos que rodearon su cuerpo, encajando perfectamente como las piezas de un confuso rompecabezas. JungWoo se sorprende y por mero instinto corresponde el gesto, apegándose al alfa para hundirse en su adictivo aroma a café.

─¿Sabes? Yo no suelo pedir disculpas, pero por alguna extraña razón, tú si las mereces, eres diferente.

Ok, las cosas se pusieron extrañamente incómodas.