capítulo 2

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El comienzo:
5 años antes :
Aunque la mañana era fría los rayos del sol se reflejaban tímidamente wn el río y lo que vio Nicolás lo dejó Ipnotizado, ally agachada con sus negros rizos sueltos le llegaban debajo de las caderas lavando distraída sin percatarse de su presencia., con su vestido azul a juego con sus ojos y piel tostada su belleza era incomparable, el relinchar de su caballo lo izó salir de su embelesamiento .
Bajo de un salto de su montura y ato las riendas a un árbol cercano, bajo despacio la pequeña colina situándose  a su espalda.
-No me gusta que te alejes tanto del campamento Rocío, es tierra extraña -le reprendió Nicolás muy serio.
-Menudo susto- reía Rocío a causa del sobresalto casi resbala para acabar empapada. - me has asustado Nicolás, no te escuche llegar- se excusaba la joven poniéndose en pie- no estoy haciendo nada malo, son sólo un par de metros del camino - lo intentó calmar pues su mirada reflejaba la preocupación y el miedo de Nicolás.
- Aun así, uno nunca sabe lo que puede pasar y una mujer sola....  Es peligroso, no todo el mundo tiene buenas intenciones - intentaba explicarle.
- tan sólo quería lavar el vestido rojo para acompañarte mañana a bailar, con un poco de suerte sacaré un par de monedas extras para la tela del vestido de novia - admitía la muchacha avergonzada por la reprimenda pues no era la primera vez que la encontraba sola en el río.
- Aun así, es peligroso, la próxima ves avisame y estaré encantado de acompañarte o avisa a cualquiera del clan  o a las mujeres pero nunca vuelvas sola porfavor, si algo malo te pasará....   No se que sería de mi. - Nicolás tubo que desviar la mirada para tratar de esconder el miedo en su rostro pero no lo consiguió Rocío lo conocía bien, le rodeo la cara con sus diminutas manos para así obligarlo a mirarla.
- Tienes razón  perdoname, tendré más cuidado la próxima vez. -le prometió- no te enfades - ¿enfadarse con ella? Eso era imposible, desde su niñez eran inseparables nadie pudo evitar que se robaran el corazón mutuamente, estaban echos el uno para el otro.
- te amo demasiado para eso y lo sabes. - Nicolás la abrazo por la cintura atrayendo la hacia el para depositar un tierno beso en su frente - Anda  acaba de lavar ese vestido para que mañana todo el mundo rabie de envidia, al ver que la mujer más hermosa de este mundo me pertenece.
Rocío no pudo evitar ruborizarse la contacto de Nicolás y sus comentarios. pues Nicolás era el hombre más apuesto que sus ojos hubieran visto jamás, sus rizos rubios recogidos en una cinta le llegaban ala altura de los hombros, con su 1'87 de estatura , sus fuertes músculos a causa del trabajo diario en el campamento al cuidado  y adiestramiento de los caballos, su piel Morena que todavía resaltaba más el verde Esmeralda de sus ojos y esa sonrisa traviesa que lo hacía único.
Ally sentado en una roca la observaba lavar  mientras tarareaba distraída y se veía a ellos mismos años atrás juguete ando  en los riachuelos, mientras las mujeres recogían el agua no pudo evitar sonreír tras aquellos recuerdos, enseñando a Rocío a pescar, rebotar piedras, cuando ella se  empeñaba en acompañarlo a por el mimbre para más tarde enseñarle a hacer canastas.
- ¿Que te hace tan feliz? - pregunto Rocío curiosa al verlo sonreír con la mirada fija en ella.
- tu - respondió Nicolás sin ningún tapujo- no puedo olvidar aquella noche de San Juan años atrás, cuando por fin te confese mis sentimientos e Intenciones sobre todo lo nerviosa que estaba por tu reacción - admitió Nicolás avergonzado.
- No podrías aver elegido un momento mejor, adoro la noche la san Juan, me parece mágica con las guitarras sonando, los cantes y bailes alrededor de las hogueras. También lo recuerdo Nicolás - le advertía Rocío con una sonrisa pícara en sus labios sentándose sobre las rodillas de este. - te prometí que a los 17 años me casaría con Tigo y ya ves solo dos semanas y seré tu esposa. - a Nicolás se le detuvo el corazón en ese mismo instante, al contemplarla ruborizarse con esa mirada tímida, " Dios como la amaba ".
- y yo seré el hombre más feliz de esta tierra.
Ala mañana siguiente Nicolás y su hermano José buscaban a Rocío desesperados por todo el campamento pues ya estaba bien entrada la mañana.
-¿Estas lista Rocío? Se nos va a hacer tarde - llamaba desde fuera de la carreta - sabes que el dueño de la taberna quiere contratar a  unos artistas para esta noche, si nos retrasamos más se nos adelantarán.
- hermano ¿y si nos adelantamos nosotros en lo que tu esperas a Rocío¿el pueblo queda a más de 30 minutos de aquí sabes lo bien que nos vendría el dinero, si alguien llega antes que nosotros.. - replicaba preocupado José.
- Lo sé José pero no puedo dejarla aquí y el tabernero quería verme tengo que ir con vosotros.
- Pos vamos entonces ya nos alcanzara más tarde, seguro que alguien va para el pueblo. - José tenía razón y Nicolás lo sabía, no podían perder mucho más tiempo, pero la idea de dejar ally a Rocío le partía el alma sabiendo la ilusión que a ella le hacía, no había hablado de otra cosa desde que llegaron del río la mañana anterior.
- Parece que nos tendremos que ir sin ella- reconocía Nicolás resignado- voy a avisar a su madre de que iremos haciendo camino, pero te aviso José - reía Nicolás mientras rodeaba la carreta - más tarde su enfado lo acabará pagando con Tigo , sabes de sobra el carácter endiablado que tiene.
- con todos menos contigo hermano - reía José al saber los reproches que más tarde le haría Rocío.
Esmeralda se encontraba preparando el estofado para la hora de comer,
- Perdone tía Esmeralda, pero ya está bien avanzada la mañana y a Rocío parece que se le está haciendo tarde. Tengo que ir Adelantando camino antes de que perdamos el trabajo- se explicaba Nicolás avergonzado ante su futura suegra, no le gustaba lo más mínimo dejar a Rocío hay pero, una de las muchas virtudes de Nicolás era la responsabilidad y sabía de sobra lo mucho que podría aportar al resto del clan con ese dinero que tanto necesitaban.
- tranquilo hijo, lo primero es lo primero ve, ve apurate no vallas a llegar tarde y menos por culpa de esa niña que no se donde tiene metida la cabeza, ha ido a ayudar a tu hermana María hace un rato no creo que se demore mucho pero ve, no te entretengas más yo le pediré a Felipe y Antón que la acompañen y te acerquen ala taberna, yo se lo explicaré.
- Gracias Esmeralda es usted un cielo no se que serían de mi sin usted, que tenga un buen día - se despidió Nicolás. Minutitos más tarde de despedirse de Esmeralda e informar al patriarca Andrés del trabajo que iban a realizar, así también como el motivo por el cual llegarían bien entrada la madrugada.
- tened mucho cuidado y que Dios os proteja - se despidió Andrés dándoles su bendición.
Los dos hermanos que bien podrían pasar por gemelos a causa de su magnífico parecido, Nicolás un año mayor y de construcción más robusta que José menos corpulento y bastante más Delgado. Emprendieron el viaje hacia el pueblo junto con Tomás y Samuel, dos miembros del clan e inseparables amigos de los hermanos los cuatro solían hacer los corrillos de las juergas. Tomás el bajo y Delgado de ellos con su cabello castaño oscuro al igual que su barba bien recortada y sus ojos negros, era la alergia de la fiesta no podía faltar sin querían ganar el máximo dinero posible, el arte lo tenía metido en las venas cuando Tomás se ponía a bailar la alergia y los sentimientos le rebosaban por los poros y todo aquel que lo viera se unía al baile era todo un espectáculo. Samuel era su complemento esos dos habían nacido para lo juerga y eso no se podía negar, cuando Samuel hacía sonar las cuerdas de su guitarra el cielo parecía abrirse y ally estaba con sus rizos negros recogidos con una cinta le llegaban ala cintura ,su piel Morena y esos ojos negros como la noche le daban un aire muy exótico .
Los cuatro iban cantando al compás de las palmas y el sonido de la guitarra de Samuel el camino se les pasó volando. En la entrada de el pueblo se encontraron con  una anciana vendiendo claveles en medio de la plaza, se acercaron a ella preguntando por la taberna recibiendo la dirección no les resultó difícil llegar a su destino.
- buenos días caballero, buscamos al tabernero de nombre Manuel- preguntaba Nicolás, a un hombre regordete situado detrás de la barra.
- soy yo¿a quien le interesa saberlo - preguntaba el hombre secando unas jarras con un paño de lino.
-Disculpe, mi nombre es Nicolás y me llegaron rumores de que usted estaba buscando gente para su espectáculo de esta tarde.
-¿Eres tú Nicolás el gitano?
-Yo que sepa si señor, aquí estoy para servirle.
- veras muchacho , tengo entendido que tienes la voz más bonita y potente que  a pasado por este pueblo en mucho tiempo 
- muchas gracias por el cumplido, señor me alaga - agradecía Nicolás avergonzado.
- pamplinas, muchacho dicen que tus espectáculos llenan las tabernas durante días, que la gente solamente vuelve para preguntar por ti y tus acompañantes, que sois los mejores y ahora mismo es lo que mi taberna necesita así que ¿si estas dispuesto ? El espectáculo comenzara en una hora asta bien entrada la madrugada.
- por supuesto  estamos más que dispuestos señor Manuel, gracias por su confianza espero no defraudar le  . - Nicolás todavía no se creía todos los cumplidos que ese buen hombre hacía sobre el y sus primos - en una hora empezamos.
-Menuda suerte primo, con la fama que nos están sacando podemos actuar todas las noches que pasemos acampados en este pueblo, sabe Dios la falta que nos hace -comentaba Tomás en la entrada de la taberna eufórico por la noticia ya que por desgracia para los gitanos el trabajo escaseaba .
-¿Que sucede Nicolás?  Deberías estar gozoso ¿a que viene esa cara primo? - preguntaba Tomás preocupado por que  de echará atrás con la actuación.
-¿Hermano estas bien? Nicolás tenia la mirada fija en el suelo.
- no es nada tranquilos, soy un gitano y me debo a mi palabra ,  aremos ese espectáculo es solo un estoy un poco preocupado  por Rocío, no me gusta dejarla en el campamento a ella encanta actuar con nosotros y se de sobra la ilusión que le hacia acompañarnos hoy- Nicolás no podía sacarse a su prometida de la cabeza, pensando en la desilusión que se abría llevado.
- Mejor así primo- esta vez fue Samuel quien intervino- si llega a escuchar
Todos esos halagos que te a echo ese buen hombre, Rocío se hubiera desmayado del orgullo- los cuatro estallaron en carcajadas pues Rocío lo idolatraba y se hubiera pasado años hablando de lo mismo una y otra vez.
- Anímate primo - reprochaba Tomás- despeja te la cabeza que hoy ay que darlo todo, yo voy a tomar algo antes de empezar solo Dios sabe cuando acabaremos con lo que nos gusta la juerga ¿ haber quien nos para luego? - reía Tomás-¿quien se apunta?
- yo - se sumaba Samuel.
- cinco minutos y os seguimos quiero hablar con mi hermano a solas- diciendo esto los dos primos entraron en la taberna dejándolos solos, José se colocó enfrente de su hermano y a Boca jarro le dijo.
- Nicolás lo tuyo no es normal hermano acaban de darnos el trabajo así por las buenas te han puesto por las nubes y mirate aquí afuera con esa cara se van  a pensar que estas enfermo su hermano anímate - intentaba José animarlo sin mucho éxito.
- Se que la oportunidad es buena hermano y no la voy  a echar s perder - lo tranquilizó Nicolás, tras unos minutos de silencio fue José quien lo rompió.
- Hermano nos conocemos ami no me engañas ¿que pasa por tu cabeza he? - José estaba realmente preocupado por su hermano pues de sobra lo conocía y sospechaba que algo más le sucedía.
-No se José es extraño tengo un mal presentimiento aquí en medio del pecho que apenas me deja respirar - confesaba Nicolás agobiado.
- trata de callarte, todo está bien vamos dentro come algo antes de empezar con la actuación ya veras nada más abrir la boca para cantar todo esto se te ira de la cabeza . La tía Esmeralda dará institución de que Antón y Felipe te traigan a tu preciosa Rocío- reía José tratando de animarle - y de paso a María esas dos muchas son inseparables y con ese arte que llevan en las venas triunfamos seguro.
Nicolás levanto su mirada y lo miro a los ojos - tienes razón hermano serán los nervios de no querer defraudar al buen señor tabernero, vamos s comer algo la noche será larga.
-¡Madre ,madre! -Gritaba Rocío cercando se apresuradamente  a la hoguera donde Esmeralda estaba acabando de preparar el estofado.
-¿Que sucede pequeña te encuentras bien? - preguntaba Esmeralda a su hija al verla tan acalorada y fatiga da que apenas podía respirar a causa de la carrera.
- Se trata de Nicolás, no lo encuentro por ningún lado ¿tu sabes donde esta? Madre ¿lo as visto, acaso padre le a encargado algo? - preguntaba Rocío desesperada, se le estaban acabando las ideas de donde encontrarle había registrado el campamento en varias ocasiones y ni rastro de Nicolás. Esmeralda la observaba con  detenimiento.
- Tranquila muchacha te va a dar algo, as el favor de callarte
- pero madre es que.. - Esmeralda la corto dejándola con la palabra en la boca.
- si lo vistió, si se donde esta y ay una exposición lógica para que  no lo encuentres - le reprochaba Esmeralda a su hija. - te a Estado esperando esperando hasta bien entrada la mañana el pobre chaborrillo ( niño) llegaba tarde si se demoraba más abrir perdido el trabajo, reza para que no allá sido así. El y José te buscaron y al no encontrarte se adelantaron al pueblo eso es todo.
- madre ¿como a podido suceder eso?  quería ver las telas para mi vestido- se quejaba Rocío apunto de arrancarse en llantos.
- tranquila tesoro he venido a explicarme sus motivos no te enfades, Nicolás es un buen hombre de palabra y sabes que cuando se trata del clan.. Yo lo anime a que se adelantará le prometí que más tarde Felipe y Antón te llevarían ala taberna a ti y a María, se que tu y tu prima no podéis estar la una sin la otra .
- ¿Enserio madre me está esperando? Voy a ponerme bonita, cuanto antes salga para el pueblo antes podre disculparme - Rocío pego un brinco del tronco en el que estaba sentada junto a su madre, para ir en busca de María para informarle de que ya sabía el paradero de Nicolás y que en breve saldrían para el pueblo.
- Rocío espera, no tan rápido puedo ver tus intenciones y ni en broma vais a ir solas al pueblo si Felipe y Antón están ocupados esperaras a que terminen ¿de acuerdo? -advertía Esmeralda a su hija que bien capaz la veía de ir sola en busca de Nicolás.
- de acuerdo madre - le prometió Rocío a su madre dándole un fuerte abrazo. Rocío corrió todo lo rápido que fue capaz hacía la carreta de su primo y futuro suegro Jop en busca de María.
- Hola tía Carmen mi madre me dijo que Nicolás esta esperando nos en la taberna que los muchachos nos llevarán a mi y María si usted y el tío Jop no se oponen - informaba Rocío a su futura suegra, que se encontraba doblando unas mantas a los pies de la cama allí de pie con su cabello Rubió recibido en un alto moño, su cuerpo esbelto al igual que María. Carmen la. Miro con sus ojos castaños claros llenos de ternura.
-Claro que podéis ir pero con mucho cuidado, pequeñas nunca solas ¿de acuerdo?
- por supuesto tía  no se preocupe, María yo voy a cambiarme  en dos minutos estaré lista - María sonreía con complicidad.
- de acuerdo enseguida paso a buscarte. - dicho esto Rocío salió a todos aprisa hacia si carreta, una vez dentro se puso su vestido rojo que tanto le gustaba era de media manga con escote en V , se le pegaba al cuerpo como un guante resaltando así su figura asta los tobillos, con una raja por encima de la rodilla de la cual se abrían paso un par de volantes, se colocó una toquilla de flecos negra con flores Rojas y sus zapatos de baile  a juego se acomodo un poco los rizos de su larga y negra melena le caía graciosamente asta debajo de las caderas por último se puso el collar en forma de lágrima al igual que los pendientes con una pequeña piedra Azul turquesa como sus ojos que le regaló Nicolás el día de su compromiso.
-¡prima! - se escuchaba desde afuera, era María.
-¿te  queda mucho nos están esperando en la carreta, tu padre se niega que vallamos a pie- aún no avia acabado la frase cuando la puerta se abrió de golpe - ay Dios prima estas preciosa- gritaba María-pobre de mi hermano no va a poder quitarte los ojos de encima vas a conseguir que le salgan gallos al cantar. - las dos rompieron en carcajadas, ya en la carreta Andrés daba instrucción a los dos jóvenes encargados de llevar a las primas con Nicolás.
- Antón, Felipe acercar las asta el mismo Nicolás en persona y os quiero de vuelta de inmediato me tenéis que ayudar con los Potros ¿de acuerdo? Nada de apuntados ala juerga que ay mucho trabajo - diciendo esto se despidió de su hija con un fuerte beso - te quiero mucho Rocío pasarlo bien las dos.
El camino se le izó eterno se morían de ganas de llegar una vez ally Felipe el mayor de los dos bajo de un salto y entró en busca de Nicolás dándole órdenes  a Antón de que no las perdiera de vista, pos sabía de sobra que podían escaparse en busca de telas o collares y no podían perder tiempo buscando las pues las órdenes del patriarca eran claras. Segundos después un ansioso Nicolás salia a toda prisa, Rocío al verlo de un salto se lanzó a sus brazos.
-¿pensabas que te ibas a librar de mi? - todos los presentes reía sonoramente  pues sabían que eso no era posible.
- lamento mucho haberte echo esperar estar mañana se me fue el Santo al cielo con María en el arroyo - se disculpó con la mirada triste.
- tranquila pequeña ya estas aquí y eso es lo que más me importa , vamos la juerga ya hace rato que empezó y aquí fuera la tarde esta fría -comentaba Nicolás embelesado a causa de la belleza de su prometida- hoy estas más precisa de lo normal si es que eso fuera posible - exclamaba olvidándose de todos los presentes que contemplaban la escena.
- hermano no es por interrumpir pero ahí fuera hace frío- reía poniéndose en pie con su vestido verde pálido con flores blancas a juego con su tequila y su cabello Rubió recibido en un moño  bajo, satisfecha con la felicidad de su hermano desprendía en la mirada.

amor gitanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora