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Todo con calma.


Los días pasaban y pasaban, en donde mi rutina paso de 'levantarme, desayunar, ir a trabajar y volver a casa' a  'levantarme, desayunar y preparar el desayuno de Hortensia, pasar a su trabajo ir a mi trabajo, regresar en mi receso, terminar de trabajar, volver a casa y llamarle para desearle las buenas noches.

Era una rutina más pesada? Para otros puede que si, pero sinceramente aquel cambio me mantenía mas vivo que nunca.
La veía más a seguido e interactuabamos más, íbamos a nuestro rollo, no había prisa, no había nadie que se interfiriera entre nosotros.

Los pequeños besos habían parado y los extrañaba tanto...

Pero parecía que ella también quería llevar todo con calma, y me parecía perfecto.
Llevábamos un tiempo sin salir con alguien y por eso queríamos asegurarnos de llevar todo bien para sentirnos cómodos y llegar a agrandar aún mas este sentimiento que compartíamos.

Nos habíamos contado secretos, nos habíamos contado cosas divertidas... e incluso hablamos de nuestro día a día. 
Era como estar en un sueño, uno en donde llegábamos al cielo y lo compartiamos juntos.
En donde se me permitía tomar tu pequeña mano para pasar horas así.

En donde nuestras miradas expresaban por si solos lo que ambos queríamos... lo que ambos deseabamos.
Y así pasaron dos meses, dos meses de conocernos y amarnos más y más.

Dos meses de apreciar al otro.

De sentirnos tan juntos pero tan lejos a la vez.

Sabíamos lo que necesitábamos, sabíamos las palabras que necesitábamos para confirmar nuestros sentimientos... pero ambos eramos inseguros... ambos seguíamos siendo unos niñatos con miedos.

Pero a pesar de eso... estábamos juntos en eso.

Yo te tenia a ti y tu me tenias a mi.

Era como si ambos estuviéramos tan juntos, sintiendo la respiración del otro, añorando un apasionante beso... pero que tardaba en  llegar.
.
.
.

No por mucho tiempo, pues llegó el día.

Una noche te propuse salir a otra cita, pero esta vez a la playa... durante la noche.
En donde no había nadie y las olas era la única música que se escucharía.
En donde podría estacionar mi auto y ver las bellas vistas.

En donde por fin daría el siguiente paso.
Llego aquel apreciado día y mi rutina empezo, con la diferencia en que volvía a estar más nervioso que nunca pero la emoción y felicidad era más grande.

Pasaban las horas y cada vez más mi corazón latía con fuerza.
Pasaban los minutos y mis ganas de verte aumentaban mucho más

La noche llego y esta vez pase a recogerte a tu casa, pues se trataba de un viernes en la noche y era el día que descansabas. 

Te espere fuera de tu puerta y en poco minutos saliste.. luciendo tan hermosa como siempre.
Con tu hermoso peinado, tu maquillaje simple pero llamativo. Y un lindo vestido rosa corto, con escote en forma de corazón, mangas bombachas y falda de fina tela transparente de abundaba en demasía, por ultimo y menos importante, llevabas contigo un pequeño bolso.

Te veías tan hermosa.
Sin perder el tiempo, partimos al destino de nuestra cita, y justo como había predicho... el lugar estaba completamente solo.
Era un escenario tan hermoso como el que imagine.

Era perfecto.
Estacione el auto en un muelle que había donde se usaba como parking para diferentes puestos y demás... pues desde ahí podíamos apreciar la playa y la hermosa luna que reflejaba su hermosa luz por toda el agua.
Desabrochamos nuestros cinturones y por fín empezamos a platicar de nuestro día... nuestra hermosa rutina del saber sobre el otro había comenzado.

♡LL Burguer's♡ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora