♡LL Burguer's♡

-15-

El tiempo en llegar a su trabajo fue corto. Llegue, la espere unos minutos en el parking del lugar, al vernos la bese y dimos camino a mi departamento.
De ultima hora nos decidimos en comprar algunas cosas, como golosinas, postres y pasamos por pizzas. Era jueves, por lo que Hortensia decidió dormir en mi departamento esa noche y pasar el viernes en mi casa.
Aquello no me molestaba, de ninguna manera. Ya habíamos adquirido esa costumbre, incluso unos de mis cajones en mi closet era exclusiva para su ropa y se podía apreciar algunas que otras cosas de ella por casa. Lo mismo era en su departamento con cosas mías.

Una vez terminamos de comer una de las cajas dd pizza, procedimos a servirnos nieve con galletas mientras mirábamos un programa de talentos.
Ambos seguíamos con la misma ropa del trabajo, pero estando cómodos.
Nuestra hambre fue primero que otras cosas.

-Oh! Viktor- se incorporó en el sillón, levantándose de la cómoda pose en la que nos encontrábamos. -Tengo algo que hablar contigo-
"Ya l-lo sabe, estoy nervioso joder"

-S-Si? Yo también amor- le dije para dejar mi plato com nieve sobre la pequeña mesa que había a mitad de la sala, acto que ella imitó.

-D-Dios estoy nerviosa jajaj- ante aquello note como se ponía mas y mas nerviosa, tomando su rostro con sus pequeñas manos. 

-Yo también... dilo tu primero- Metí disimuladamente mi mano en mi bolsillo para tomar la pequeña cajita. Estaba tan nervioso que no importaba que el ambiente no fuera del todo romántico, estábamos cómodos y aquello era suficiente para hacer la ocasión única. 

-Viktor, estoy tan feliz porque, ademas de Gustabo podre compartir este sueño contigo-

-Cómo?-

-Si! Gustabo y yo abriremos nuestra propia cafetería!, No es eso genial?! Dios!-

-S-Si! Hortensia, estoy tan feliz por los dos...-

-Viktor! Eres una amor- se lanzo a mi, abrazandome fuertemente ante la emoción de su noticia. Estaba anonadado... por lo que tarde unos
segundos en responder a su abrazo. Ella besaba mi rostro y seguía mencionando y expresando lo feliz que estaba.
Yo seguía sin creérmelo, pues juraba que ella había descubierto mi secreto.

Pero estaba feliz por ella y sus sueños, eso era lo primordial. Saque mi mano de mi bolsillo, soltando la cajita para abrazarla y acompañarla con su emoción.
Estaba tan feliz, pero de alguna u otra manera me sentía un poco mal. Lo que era tonto.
Ella seguía abrazandome y dando uno que otro salto, yo solo me disponía a escucharla y sonreir.

-Pasa algo Viktor? Te ves..Ah! Se te caído...-

Ante aquello, mire al piso rápidamente, notando que estaba por tomar la cajita. Al parecer se había salido de mi bolsillo entre tantos movimientos  y saltos.

-A-Ah! Mierd- No lo tomes!-

-Q-Qué es esto... Vik-Viktor?-

"¡Mierda!"

-Vik...tor...- No sabia que decir, estaba nervioso y estaba más que claro que era ahora o nunca. La tome de su cintura para acostarme por completo con ella encima mio sobre aquel sofá.
Ella seguía mirándome y con la pequeña caja en una de sus manos, esperando alguna respuesta de mi parte.
Tape mis ojos con una de mis manos, no podía verla, pues estaba seguro que si miraba aquellos hermosos ojos, seria difícil para mi buscar las palabras correctas.

-Перестань меня видеть ... Я схожу с ума.-

-Amor?... Qué p-pasa?-

-No... no quería comentarlo ahora, bueno a decir verdad si, pero preferí hacerlo otro momento, Sabes? No quería incomodarte menos aún después de una noticia tan importante y-

-Hey hey... relajate cariño...-

Tomo mi rostro con sus manos, y de alguna manera logro tranquilizarme pues empece a decir incoherencias.

-Todo esta bien... Viktor, ¿qué p-pasa?...-

Me quede en silencio unos minutos, unos minutos en donde me dedicaba a acariciar su cresta y su hermoso cuerpo. Una vez decidido, tome la cajita de su mano.

-Cariño... te amo muchísimo-

Suspire una vez mas y continúe con mis palabras ante su atenta mirada.

-Y todos estos meses han sido hermosos... desde la primera vez que te vi no has hecho más que volver mis días alegres. Todos estoy hermoso momentos junto a ti me han hecho pensar en algunas cosas...-

-Cosas...?-

-Si... verás, en pocos días se cumplirá un año... y en un año han pasado tantas cosas, nos conocimos y nos volvimos pareja...
Es por eso que...-

Mi corazón volvía a latir con fuerza, tome con cariño su cintura y con la otra mano tome con seguridad la cajita.

-Es por eso que ..Ah?, Qué?-

Al abrir la cajita note como esta estaba vacía. Había quedado como un tonto.
Ella me miraba expectante aun, a pesar de aquel estúpido fallo.

-...Mmm..? S-Se supone que debería de ver a-algo- pregunto seria pero ocultando una pequeña sonrisa.

Suspire con frustración y vergüenza. Juraba que mi rostro estaba rojo a más no poder.

-Joooder, que soy imbécil-

-Pe-Pero? Jajaja amor? Qué debería de ver?- me dijo con un nerviosismo bastante notorio.
"Ahora si que se imagina lo mismo que yo".

Solté el pequeño terciopelo azul  haciendo que este cayera al suelo, al fin de cuentas ya no importaba.
Volví a meter mi mano a mi bolsillo, agradeciendo que los pequeños objetos estuvieran en este.
Los tome y los puse frente a nuestras miradas.

-Es por eso que... amor, ¿te gustaría realizar una vida junto a mi?-

-Vol... Viktor- note como ella tomo mi playera con fuerza.

-Te gustaría vivir junto a mi? Te gustaria llevar contigo un anillo en muestra de nuestro compromiso y eterno amor... Hortensia?-

Al fin lo había dicho... y ahora mis nervios se debían a el que dirá.
Mi pulso empezó a fallar debido a esto, haciendo que mi mano temblaba un poco.

-Entiendo si no quieres, después de todo es muy pron-

-P-Pero que dices? Ton-Tonto!-

-Es que... no dices na...da-

-Claro que quiero! Dios... p-porque creerías que diría que no?-

-Yo que se?! E-entonces??! S-Si??-
"Un sueño, esto es un jodido sueño"

-Si! Claro que quiero Viktor, me encantaria!-

Antes de volver a decir alguna tontería más, ella se abalanzó a mi boca para empezar con un candente beso. Que sin duda yo respondería.
Los besos y caricias siguieron por un buen rato, hasta que ella se sentó sobre el sillón, permitiéndome hacer lo mismo. 

Tome su pequeña mano para colocar el simple anillo con tres pequeños diamantes sobre su dedo anular.
Bese su mano al terminar de colocarselo para sujetarla con fuerza después. Pues sin poderlo evitar, empecé a soltar algunas lagrimas.

-Te amo tanto-

-Viktor... me harás llorar, j-joder que ya estoy llo-rando-

La volví a besar, esta vez con mas calma... con mas sentimiento, para al final unir nuestras frentes.

Sin duda... estábamos destinados a estar juntos.