𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒂𝒅𝒂 𝒂 𝒗𝒐𝒍𝒗𝒆𝒓 𝒂 𝒕𝒊 - SOOSHU

Capítulo 19

- Guau. No te reconozco, Soojin. – dijo Minnie, completamente sorprendida, cuando vio a su amiga aparecer por el hall de su propia casa.

- ¿Te gusta? ¿No me he pasado mucho? – preguntó, algo insegura, la morena.

- Para nada, estás increíble. Jamás te habría imaginado con esta ropa, pero es que te sienta de maravilla.

Minnie se refería al vestido negro que la morena había elegido para aquella noche. Se trataba de un vestido ajustado a su cuerpo, acompañado de un cinturón que resaltaba aún más las curvas de su figura. Su amiga se había quedado estupefacta al verla, y no era para menos, ya que le sentaba de maravilla.

- En realidad no es mío. Mi madre es la que suele usar este tipo de ropa y me lo ha prestado para hoy.

- Bueno, en realidad no creo que tengas aún edad para llevarlo, pero he de reconocer que te queda bastante bien, tanto como a mí. – habló Hyuna, quien se encontraba en el salón junto a su marido.

- ¿De verdad tengo que ver a mi hija llevando este tipo de cosas? Soojin, por favor, que eres una niña aún. – se quejaba Hyo Jong, intentando taparse los ojos con la mano.

- ¡Papá! – se quejó la morena, lo que hizo estallar las risas de la rubia.

- Ni caso a tu padre, es un anticuado. – se rio la mayor. – En fin, disfrutad esta noche, pero control, por favor. Y os quiero a una hora prudente en casa, por favor. No me hagas tener que echarte la primera bronca de tu vida, porque lo haré. – amenazó, lo que puso los pelos de punta a Soojin.

- No te preocupes, mamá. Estaremos pronto en casa. Si hay algún cambio de planes, te escribiré un mensaje, ¿de acuerdo? – Hyuna asintió y miró a Minnie.

- Vigila a mi hija, que no le pase nada, por favor.

- No se preocupe, señora Seo. No ocurrirá.

- ¡No quiero a ningún chico acercándose a mi hija! – gritó Hyo Jong, quien se había ido hacia la cocina. Las chicas rieron. "Bastante poco probable", pensó Soojin.

- En fin, nos vamos, mamá. – se despidió la morena, agarrando a su amiga por el brazo, quien se despidió como pudo de Hyuna, y ambas salieron por la puerta de la casa.

- Me encantan tus padres. Son muy graciosos. - Soojin se llevó las manos a la cara, bufando. Minnie simplemente se rio. - De verdad lo digo, son muy divertidos. Tiene que ser muy guay vivir con ellos. Yo echo de menos a mis padres.

- Tiene que ser difícil vivir en un país extranjero alejada de tus padres a los 17 años. Yo no me lo puedo ni llegar a imaginar. – intentó apoyarla, abrazándola más fuerte del brazo.

- No te preocupes, nos vemos todos los días por videollamada, así que se hace más llevadero. No es lo único que dejé en Tailandia cuando me mudé, de todas maneras. – Minnie hizo una mueca triste, a lo que Soojin iba a contestar, cuando escucharon de lejos a Sorn, quien se uniría a ellas de camino al bar. Así que prefirió dejarlo estar y buscar otro momento donde preguntarle a la tailandesa.

No mucho más tarde, llegaron al bar donde habían estado la semana anterior. Gracias a Sorn, no tuvieron ningún problema en pasar como si fueran mayores de edad. La rubia también les consiguió las primeras bebidas de la noche, pero, poco tiempo después, se marchó con una amiga suya, dejando a Soojin y Minnie de nuevo solas.

- Me juego lo que quieras a que Sorn no vuelve esta noche a casa. Me ha hablado de Sunghee y quiere tirarle los trastos desde hace tiempo, así que no va a perder su oportunidad esta noche. – se rio la rubia, mientras tomaba un trago de su copa. Sin embargo, no escuchó respuesta por parte de su amiga, quien se había quedado pensativa. – Tierra llamando a Soojin. ¿Dónde estás? – preguntó, mientras pasaba la mano por delante de la morena. Esta parpadeó un par de veces, pero siguió con la mirada fija en un punto cualquiera del bar.