Lo que el corazón quiere

Capitulo 23

-Oye...creo que ya es suficiente ¿no?- pregunto divertido el castaño.

-Mm un poco más...- le respondió el peli azul sin querer soltarlo.

-Bien- cedió fácilmente mientras sonreía- Eres un niño, actúas tal cual...

-Mira quien habla, el adolescente con cara de bebe- se burló el otro.

-¿Que dijiste?

-Exactamente lo que oíste pequeño nene de mami- reafirmo el peli azul, esta vez riendo -lo siento... teníamos tanto tiempo de no vernos, que ahora no quiero dejarte ir...

Al decir eso lo abrazo aún más fuerte que antes, el menor se sentía como si lo estuviese estrujando una especie de pulpo.

-Realmente se ha sentido como que ha pasado mucho, aunque en realidad ha sido poco más de una semana ¿no?- intentaba respirar con dificultad mientras que el mayor se negaba a soltarle.

Se encontraban sentados en el pasto en ese momento, tratando de relajarse y pasar el tiempo juntos, aunque para el menor era difícil ya que desde hace rato el peli azul lo apretujaba sin indicios de querer soltarlo.

-Okey, ya debería volver, ¿Cuánto tiempo ha pasado?

-No el suficiente...- susurraba en su oído sin separarse ni un centímetro.

-¿Qué hora es?- pregunto.

Hizo que el mayor a regañadientes sacara su móvil para revisar.

-¡¿Tan tarde es?! - Se sorprendió al ver la hora- Debería estar en clases justo ahora...- dijo levantándose.

-Espera- lo detuvo- ¿Por qué no te quedas un poco más?

Aunque era tentador no podía hacerlo, no podía darse el lujo de atrasarse más con sus clases.

-Lo siento...no puedo- se había disculpado pero el mayor seguía insistiendo.

Sabía que estaba siendo egoísta, pero no podía evitarlo quería estar con el castaño todo el tiempo que fuera posible y el que no también.

Finalmente lo dejo ir con la promesa de que el siguiente día también se encontrarían, no entendía ese deseo de querer monopolizar al menor ¿era esto lo que significaba estar enamorado?

-Que miedo...- comento para sí estando ya solo.

Viendo que ya no tenía nada más que hacer en ese lugar se fue, ansiando que pronto llegara el día de mañana para verlo de nuevo.

...

¿Dónde estabas Seiya?

El castaño apenas y pudo llegar a tiempo para su siguiente clase.

-Estaba...con, Ikki...- respondió apenas, estaba agotado por la carrera titánica que tuvo que echar desde donde estaba hasta el aula.

-¿En serio? Precisamente te estaba buscando hace un rato para...

La pelirroja de detuvo, volteo la mirada prácticamente escondiéndose detrás del castaño. Esto lo extraño.

Iban camino a clases caminado por el pasillo, para mala suerte de la chica Milo y varios de los que siempre lo acompañaban iban pasando por ahí también.

Después del encuentro que habían tenido mas temprano tenia miedo de encontrarse con este.

-¿Ocurre algo Shoko?...

-N...no, no pasa nada- respondió un poco nerviosa.

Seiya no se percató de esto y siguió preguntando, pero ella logro cambiar de tema haciendo que el castaño lo olvidara.