Lo que el corazón quiere

Capitulo 24

¿De verdad en algún momento tendremos que hacerlo?

Mientras más lo pensaba más obvio se hacía, lo que había dicho su amiga era cierto, en algún momento tendría que tener sexo, ¿después de todo es algo que hacen las parejas no?

Aunque no se imaginaba en una situación así con Ikki, nunca lo había pensado bien en realidad pero era algo normal ¿no? 

Hasta hace algún tiempo ni siquiera sabía que le gustaban los chicos, es más aún se preguntaba cuál era realmente su orientación sexual, y aunque hasta ahora no se había enamorado de ninguna chica eso no significaba que fuera gay, al menos así lo veía él. Y el hecho de haberse enamorado de Ikki no es porque se sintiera especialmente atraído por los hombre, simplemente él era alguien especial, la verdad todo era muy confuso si se ponía a pensarlo.

El punto era que hasta ahora no se había imaginado teniendo relaciones con nadie, ¿Cómo se supone que debería hacerlo? Claro que no era un santo, no es como si nunca en su vida hubiese visto porto o tenido un sueño húmedo, pero entre eso y querer hacerlo con alguien había mucha diferencia.

...

Pasaban los días y poco a poco las ideas en su cabeza cada vez lo carcomían más y más, no dejaba de pensar en ese asunto no podía evitarlo. Lo peor es que no podía hablar de esto con nadie, era demasiado vergonzoso para compartirlo con cualquier persona, después de todo era su vida íntima.

La preocupación se reflejaba en su rostro, fue fácil para su amiga darse cuenta y no pudo aguantar más la curiosidad y le pregunto.

-¿Qué te sucede?- articulo finalmente después de ver a su amigo callado y perdido en sus pensamientos por más de dos horas.

-¿Qué? Nada... ¿Por qué preguntas?- respondió en un intento inútil por ocultar sus pensamientos.

-No trates de engañarme, desde hace días que estas raro, ¿Qué te pasa?

-Nada en serio, estoy bien...

No importaba que dijera, la expresión de su amiga dejaba claro que no le creía.

-Es que...- no sabía si contárselo o no, aunque pensándolo bien era su culpa que tuviera esta crisis existencial. No se podía hacer nada, si no era Shoko ¿con quién más podía hablar?- tu...hace tiempo dijiste que, en algún momento iba a tener sex... esa cosa ¿no?

-¿Ah?...- exclamo confundida, luego cayó en cuenta de que se trataba- ah te refieres al sexo.

"¿Cómo puede esta chica ser tan descarada? ¿En serio en japonesa? Bueno quizás soy yo que soy demasiado cerrado" pensó.

-Sí, bueno eso....lo pensé y creo que tenías razón, no es como si planeara ser virgen toda mi vida después de todo- le costaba hablar, esta conversación no podía ser más incómoda- pero mientras lo pensaba me di cuenta de...en realidad ya se me había pasado por la cabeza antes pero hasta ahora no lo había pensado seriamente...

-Ya escúpelo ¿de qué te diste cuenta?- dijo con tono desinteresado.

-Bueno...pensaba que a pesar de haberme enamorado de un chico, y estar casado con un hombre yo... no sé cómo...lo hacen- su voz era cada vez más baja conforme hablaba.

-¿Eh?- la pelirroja no lo había entendido.

-¡Que no sé cómo los hombres tienen sexo!- grito avergonzado sin poder contenerse lo dijo.

La chica tardo unos segundos en reaccionar- ahhh ya entendí, vaya ¿en serio? ¿Cómo es eso posible? Te casas con un hombre sin siquiera saber lo que harán más adelante? Eres peor que un niño Seiya...