6

1.1K 111 12
                                    


Iba caminando por el pasillo solo, ya que Mirio se había adelantado para pasar primero al baño antes de ir a la presentación que tendríamos con la clase 1 A.

Llevaba la cabeza baja, no me gusta tener contacto con otras personas, de todas formas, quién se fijaría en mí, no tengo nada especial, suerte tengo de tener a Mirio y Nejire como mis amigos.

Iba tan perdido en mis pensamientos que no me fijé por donde iba caminando, hasta que sentí un cuerpo delgado chocar conmigo, simplemente alcancé a pasar mis manos por debajo de sus brazos para evitar que cayera. Al levantar la mirada para ver quién era, me encontré con una chica, con la cara tapada por la gorra de una sudadera negra, mmm olor a fresas, al parecer este delicioso olor venía de su cabello del cual solo salía de su sudadera un largo mechón negro casi azul.

Me sentí extremadamente incómodo por la situación, quisiera ir a apoyar mi cabeza en una pared, pero por alguna extraña razón sentía agradable el contacto con esta misteriosa chica.

Alcancé a disculparme, o al menos intenté hacerlo, ya que mi voz sonó temblorosa. Tamaki relájate, ni siquiera te está volteando a ver. Eh, quien quisiera verte.

Mis pensamientos estaban yendo cada vez más a lo deprimente hasta que su voz me desconcertó

-No te preocupes, fue mi culpa-Dijo con una voz tan fría pero a la vez dulce

Creo, creo que me voy a desmayar.

Antes de que eso sucediera la chica salió de mi agarre, maldición, no la había soltado después de evitar que se cayera.

Comencé a caminar con la cabeza baja como siempre, sintiendo que iba a morir, no estaba acostumbrado a relacionarme con personas desconocidas y aun con las conocidas era una tortura para mí. Me dirigí a buscar a Mirio.

-Tamaki, ¿por qué estás sonrojado? - Dijo mi amigo

- Sonro-jado, eh, no, no lo e-stoy-

- ¿Por qué estás nervioso? -Dijo confundido

-*Suspiro* En s-erio, no es nad-a- Dije. Realmente no sabía que pasaba conmigo, estaba avergonzado por lo que pasó pero a la vez no me molestó la sensación de tener a esa chica entre mis brazos.


Desde que era pequeño siempre fui muy callado, muy tímido, todos se burlaban de mí por parecer débil. Todo, hasta que me hice amigo de Mirio, o más bien, el me adoptó como su amigo. El se convirtió en mi ejemplo a seguir, el era tan seguro de si mismo, muchas chicas se interesaban en él, a mí, nadie se acercaba a mí, quien querría estar con alguien que no puede ni voltear a ver a una persona a los ojos.


Ya en el salón de la clase 1 A Aizawa sensei nos pidió que nos presentáramos, realmente yo no quería hablar, eran demasiados estudiantes y sentía pánico, cuando entré llevaba la mirada en el suelo y no la levanté en ningún momento.

Cuando llegó mi turno de presentarme perdí el control y me apoyé en la pared más cercana a mí, esto me daba tranquilidad y me sentía seguro al no tener las miradas sobre mí.

Intenté presentarme, aunque mi voz temblaba por el miedo, hasta que Aizawa sensei me interrumpió.

-T/N quítate de una vez por todas esa sudadera-

-Lo siento Aizawa sensei-Dijo una chica con una voz hermosa...espera, esa voz

espera, esa voz

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Shadow Demon (Todoroki)||Tamaki y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora