🍁соняшник🌻

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POV Narrador:

Acomodo varias cosas que se encontraban tiradas y regadas por toda la habitación, papeles, papeles y más papeles de diversos temas, alguno que otro lápiz tirado por el suelo como varios objetos; se sentó un momento en una de las sillas que estaban ahí para descansar y pensar como arreglar ese sitio antes de que se hiciera de noche, pudo escuchar el sonido de su celular recibiendo una llamada. Comenzó a buscarlo por todos lados evitando hacer más desorden del que ya había, cuando por fin lo encontró respondido lo mas rápido que pudo sin ver quien le llamaba.

-Hola?-en su rostro se dibujo una hermosa sonrisa acompañada de un pequeño sonrojo al oír la voz del otro country.-Canadá...

-Ucrania, ¿como estas pequeño?-dijo la otra voz al otro lado de la llamada, haciendo sonreír aun mas al otro.

-Estoy perfectamente bien hojita, ¿tú estas bien? ¿Ya has regresado? ¿Ya comiste algo? ¿No tienes frio?-dijo un poco rápido esperando la respuesta del otro, hace 2 días que no lo veía ya que el canadiense tuvo que salir de imprevisto a una reunión en una ciudad un poco lejos de donde estaban, dentro del territorio canadiense.

-Si, si tranquilo, estoy en excelentes condiciones...de hecho, te espero en una hora en el parque que esta cerca de casa ¿si? Quiero darte una sorpresa...

-Si claro, claro, te veo ahí, adiós te quiero...-se despidió al igual que el otro y corto la llamada; dio un suspiro lleno de amor y felicidad, dio una vista a la habitación donde estaba...un verdadero desastre. 

Recogió lo mas rápido que pudo los papeles y los acomodo en una pequeña pila sobre el escritorio que estaba ahí, salió de la habitación y cerro la puerta con seguro para que nada entrara ni saliera de ella; camino hacia la habitación donde dormía, al entrar en esta tomo un cambio de ropa y fue al baño para darse una ducha, quería estar presentable para cuando se encontrara con su pareja. Si bien el canadiense había salido a una reunión dentro de su territorio y el ucraniano pudo acompañarlo decidieron que no era necesario, además solo serian dos días y volverían a estar juntos.

Salió de la regadera y seco su cuerpo con una toalla, coloco la ropa que había tomado anteriormente y continuo arreglándose, al pasar unos 15 minutos salió de la casa con todo lo que necesitaba, dinero, un abrigo para el frio y su celular, pasaría a comprar algún obsequio para su novio, algo simple. Al pasar ya unos minutos de caminar se detuvo frente a una pequeña tienda de dulces, tal vez no eran el mejor regalo para dar al canadiense pero según recordaba los dulces de ese sitio le gustan, más los que tenían una especie de caramelo dentro. Entro a la tienda y después de 5 minutos volvió a salir con una pequeña cajita en las manos; continuo su camino hacía el parque.

Dio una vuelta antes de llegar al parque, le quedaban máximo unos 10 minutos antes de que pasara la hora que había dicho su pareja, llegar puntual o incluso un poco antes era algo que hacia seguido cuando lo citaban a alguna reunión o quedaba con alguien, pudo distinguir la silueta de Canadá a lo lejos.

-¡Canadá!-alzo la mano mientras lo llamaba para que se diera cuenta, estaba un poco lejos para percatarse al instante de su presencia pero ya que no había mucha gente gracias al clima frio lo podría escuchar por mas lejos que estuviera.

Unos cuantos gritos, varias personas en shock y una pequeña cajita tirada en el frio pavimento cubierto con nieve mientras que esta se cubría con un color carmesí mientras avanzaban los segundos.

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La habitación estaba fría y el sonido de la maquina que marca los latidos del corazón era lo único que podría hacer alguna especie de ruido dentro de esta, el ucraniano se encontraba recostado en una especie de cama, una mascarilla le brindaba el oxigeno que necesitaban sus pulmones, algunas vendas estaban cubriendo parte de su cuerpo así como también unas pequeñas banditas en algunos raspones y pequeñas cortadas en su cara y manos. La puerta de la habitación se abrió dejando ver al de origen canadiense, estaba con la ropa un poco desordenada al igual que su cabello, había corrido desde el parque cuando lo llamaron del hospital, las lagrimas no se hicieron esperar y comenzaron a salir, ver al otro en ese estado no le gustaba para nada, hace unas 2 horas atrás había hablado con él y estaba bien; se arrodillo a un lado de la cama y tomo su mano con delicadeza para no lastimarle, deposito un corto beso en ella y lloro un poco más.

-Lo siento pequeño...l-lo siento...-las lagrimas caían sin parar, sentía un gran sentimiento de culpa ya que no pudo evitar que eso pasara.-No voy a alejarme de tu lado...

El lugar quedo en silencio, se podía escuchar el llanto en silencio del mas alto y el sonido de la maquina que marca los latidos del corazón, no importaba cuanto tiempo pasara, el canadiense no abandonaría ni un solo momento aquel lugar, quería cuidar al otro sin importar que.