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Pov narrador

Día más normal que han tenido hasta ahora, la gran Organización de las Naciones Unidas, ONU, había organizado una de las tantas juntas que a tantos les parecían aburridas y a otros simplemente les daba igual. Podemos ver cómo el ucraniano miraba al canadiense desde su lugar, le parecía tan malditamente lindo que era imposible para él no distraerse viéndolo; da un suspiro enamorado llamando la atención de su hermana.

-Si yo fuera tu, dejaría de estar viendo embobado a un country como ese Ucrania- dijo la bielorrusa, pellizcando una parte del brazo del ucraniano-, comportate y presta atención, deja de ser tan tonto como para estar mirando a Canadá.

El ucraniano se voltea a ver a su hermana con una cara de molestia y sería, no le agradaba que  ella dijera eso y pensara esas cosas de su pareja.

-Bielorrusia te pido de la manera más educada que puedo, que dejes de meterte en mis asuntos, gracias- se gira está vez a ver a la organización la cuál seguía hablando de distintos temas, la chica solo frunce el seño molesta por la respuesta del otro y voltea a otro lado.

La junta sigue de manera normal, con algunas interrupciones y descontentos que son solucionados lo mejor posible.
Todos salían del lugar caminando tranquilamente y algunos apresurados para seguir con sus propios asuntos y cosas como esas, el ucraniano buscaba con la mirada al de tierras canadienses, era un día especial para ellos y pensaba en pasar un día juntos; cuando por fin lo encuentra se acerca a él, el cual estaba junto a otros county's despidiéndose, parecía que estaba apresurado.

-Hey hojita!-llama su atención para que esté no se valla, llegando a su lado-, pensé que habías abandonado las instalaciones ya.

-Oh, hola Ucrania- se gira a verlo, estaba apresurado- ¿necesitas algo? Estoy un poco apurado.

-Am bueno, solo quería saber si más tarde estarías ocupado-sonríe un poco, aunque en cierto modo le había causado algo de tristeza el saber que el otro estaba ocupado en esos instantes-. Para dar un paseo pasar un día solo nosotros dos.

-Lo siento pequeño pero estos días estaré ocupado-se acerca un poco al otro y deja un pequeño beso en su frente-, ¿te veré después si? Luego podemos salir, otra cita más-deja otro beso en su frente-, nos vemos luego amor.

Y sin decir nada más le da la espalda al otro y se marcha, dejando al ucraniano aún con las palabras en la boca; siente como un nudo se forma en su garganta, se gira en otro dirección, no quería que nadie se interpusiera en su camino o algo así, ahora mismo quería estar solo.

[•••]

Después de un largo viaje en avión, desde la cede de la ONU en New York, Estados Unidos; por fin había llegado a su casa, en territorio ucraniano. Abre la puerta de su casa, entra y la cierra tras de si con seguro, era de noche asi el día había terminado por lo menos en su hogar.

Camina hasta su habitación lentamente, no tenía ni energías ni fuerzas. Se deja caer resbalando se contra la pared, había estado aguantando las ganas de llorar desde que estaba en la cede de ONU, ese día no había sido otro cualquiera era especial, ese día se habían cumplido dos años desde que el canadiense le había pedido ser su pareja.

-No es la gran cosa...- dijo cubriendo su cara con ambas manos, las lágrimas salían sin querer detenerse-, fue solo un día tan común y sin importancia como otro...

Sigue llorando en silencio y oscuridad de su casa, al fin de cuentas, que tan importante era aquel día, solo era...miserable y patetico, tan patetico como él...

🍁соняшник🌻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora