𝗨𝗻𝗮 𝗽𝗿𝗶𝗺𝗲𝗿𝗮 𝘃𝗲𝘇

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Varios días después...

Ya había pasado bastante tiempo, y este día, le tocaba ser festejada a la que entonces sería la mejor celebración del año, Navidad.
Gilbert, Bash y los Hargreeves habían estado decorando la casa varios días antes en espera de tan hermoso festejo. Pero en esta familia, como en muchas otras, había una persona muy aguafiestas. five.
El castaño le había estado suplicando que cenara con ellos esta noche tan divina, pero como siempre el azabache se negaba. Así que Blythe tuvo que tomar varias medidas drásticas.

Preparó café, pastel de café, y llevó algunos dulces de café.

Era lo único que se le ocurría para que así, el chico de calcetas tuviera la tentación de cenar.

Ahora, five estaba recostado mirando un periódico y gilbert estaba sentado frente a él.

-¿Cenarás con nosotros?

Preguntó tranquilamente, mirándolo fijamente para esperar yujm mirada contraria.

-Ya te había dicho que no, Gil.

Esta vez, el pequeño Ve parecía bastante calmado, pues en su voz se escuchaba aquella tranquilidad, y su mirada parecía la de una persona amistosa.

-¿Por qué no?, yo quiero que cenes conmigo.-carraspea- Con nosotros.

El ojiverde soltó algunas risillas burlescas por lo que su contrario acababa de decir, pero aún así negó con la cabeza.

-Anda five.

Volvió a negar con la cabeza.

-Habrá pastel de café, dulces de café y...café.

-No me importa.

Ahora, volvía aquel tono agresivo y amenazante con el que normalmente hablaba el azabache, y por supuesto que esto no le causaba temor a Gilbert en lo absoluto. Y si se preguntan, sí, este era el propósito de five, causar temor en el castaño.

-Sabes que con hablar así no vas a conseguir deshacerte de mí.

Sonrió con prepotencia mientras pronunciaba aquellas palabras, causando que su contrario rodara los ojos.

-Ya te dije que no voy a ir, y no harás nada que me cambie de opinión, así que deja de ser tan insistente.

Gilbert se levantó de la cómoda en la que se encontraban y se quedó mirándolo fijamente por algunos segundos.

-¿Qué me ves?

Esta vez el azabache lo miró molesto, y al preguntar aquello bajo un poco el periódico que portaba en las manos.
Gilbert se lanzó encima de él logrando obtener un quejido de el pelinegro, le arrebató el pedazo de papel de las manos y lo lanzó por ahí.

five no entendía absolutamente nada de lo que acababa de hacer, así que solamente intentó safarse.
El castaño le sonrió coqueto y luego comenzó a besarlo de maneras no religiosas. (xd)
Pero.. Ve dejó su estúpido intento por safarse y le siguió el beso de la misma manera, y al ver que duraría más de lo que pensaba, rodeó la cintura de su contrario con sus piernitas y su cuello con sus brazos.

Gilbert re cargaba sus brazos en la comóda mientras que el resto de su cuerpo lo dejaba descansar en el cuerpo ajeno.

Su beso era cálido, húmedo, y aún siendo brusco, podían sentir todo el amor que se tenían.
Y ya lo habían descubierto, lo que sentían desde que se miraron en el bosque, lo que tuvieron desde que comenzaron a hablarse bien, y el como sólo ellos se entendían.

Después de muchos segundos besándose, se separaron para tomar aire, y el castaño iba a levantarse, pero la manita del pelinegro jaló de su camisa, acercándolo más al menor.

🥀𝐋𝐢𝐩𝐬 𝐥𝐢𝐤𝐞 𝐜𝐨𝐟𝐟𝐞𝐞🥀 𝒻𝒾𝓋ℯ 𝓍 ℊ𝒾𝓁𝒷ℯ𝓇𝓉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora