🥀𝐋𝐢𝐩𝐬 𝐥𝐢𝐤𝐞 𝐜𝐨𝐟𝐟𝐞𝐞🥀 𝒻𝒾𝓋ℯ 𝓍 ℊ𝒾𝓁𝒷ℯ𝓇𝓉

𝗘𝘅𝘁𝗿𝗮𝗻̃𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗰𝗶𝗲𝗴𝗮𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲

Las piernitas del azabache estaban temblando por todo el placer que sentía, su cuerpo se movía con desesperación y desde su boquita entreabierta se podían escuchar con claridad los jadeos que pedían a gritos una buena follada.

Gilbert estaba sobre él besando su cuello con desesperación, mientras que con sus brazos se recargaba en la cama para no echar todo su peso en el cuerpecito de su novio.

Five tenía su cabeza al lado de la del castaño, pegadas. Esto provocaba que el de ojos mieles escuchase con claridad los jadeos del menor, ocasionándole que su piel se erizara.

Ambos estaban bastante excitados en ese momento y lo único que les interesaba era poder sentir al otro sin ninguna interrupción.

-Joder Gilbert, no me hagas esperar más.-habló desesperado, aún moviendo las caderas con desesperación.

Gilbert solamente emitía 'hm' en respuesta, parecía que podía quedarse el día entero besando el cuellito de su pequeño, y nadie podría detenerlo.

Segundos después despegó su boca de ahí, y le miró para luego encontrar a su five mirándole con deseo, con las pupilas totalmente dilatadas y sus mejillas rojas.

-Puedes quitarme la camiseta.-sonrió engreído, y en respuesta el azabache le dio un golpe.

Obediente a lo dicho, el azabache retiró la camiseta del más grande, y al ver su pecho descubierto, lamió sus labios. Gilbert, al verlo, comenzó a reír.

-Deja de reírte, quítate el pantalón y fóllame.-habló ya serio, mirándolo a los ojos.

-Como desees mi amor.

Retiró su pantalón con rapidez, como si le estuvieran apuntando con un arma en la cabeza, o como si eso dependiera de su vida.

Luego se recostó en la cama y estiró sus manos para darle una señal a five de que se acercase, y claro, sin demorar el azabache obedeció.

Sin decir ni una sola palabra, o sin preguntar, tomó el miembro de su novio y lo metió a su boca con brusquedad, causando que Gilbert gimiera.

Five rio y comenzó a embestirlo con su boca rápidamente, viendo con atención a su novio, el cual se encontraba con los ojos cerrados y con la cabeza recargada sobre sus brazos.

Sonrió al sentir la mano de Gilbert en su cabeza, incitándolo a acelerar sus movimientos, y sin quejarse, obedeció encantado.

Gilbert gemía como loco, con deseos de más y más, sentía aquellas ''mariposas'' en su estomago, y ni hablar de aquella sensación de satisfacción en su abdomen bajo que le erizaba la piel, se sentía en el paraíso, y no quería irse de ahí.

Five soltó una risilla cuando escuchó a Gilbert decir ''ah, que delicia'', le parecía graciosa la carita de satisfacción que el mayor tenía en ese momento, así que decidió molestarlo un poco.

Iba a retirarse de ahí, y justo cuando iba a hacerlo, el castaño tiró de su cabello gimiendo ''ahí viene'', y obviamente el azabache sabía de qué estaba hablando.

-Más rápido, mi amor.

Five sonrió y saco aquel pedazo de carne de su boca, causándole confusión al castaño, el cual abrió los ojos con rapidez.

-¿Five?

Levantó la cabeza para poder mirar a su novio, el cual estaba mirándole con cierta sonrisa burlona. Gilbert no entendió nada al principio, pero después supo el juego sucio que su pequeño estaba tramando.

No le causaba gracia, ni mucho menos alegría, le había dejado deseando tener aquel orgasmo que no iba a tardar en salir, e incluso le había arruinado aquella oportunidad de ver la boquita del contrario llena de aquel liquido blanco.