Extra 2

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Bella se encontraba en su habitación esperando que Edward viniera a buscarla.

Habían acordado tener una cita por el bosque, pero este se estaba atrasando.

Bella sin querer esperar más, se levantó, pero cuando estaba por empezar a caminar todo el lugar quedo en una completa oscuridad.

Bella entro en pánico, odiaba la oscuridad y más porque le recordaba a esa reina.

- algún día te mataré te lo prometo.

Su voz contenía un completo desprecio y odio.

- Lástima que nunca llegará ese momento.

Escucho a lo lejos esa voz que odiaba.

- ¡donde estas?!

- eso no es de tu incumbencia, además sólo te venía a dejar un regalo, si lo entiendes o no es cosa tuya.

Bella miraba para todos lados buscándola, pero lo que llegó a ver es como una gran esfera de agua se formaba poco a poco.

Se acercó lentamente y cuando está esfera se completó, miro justo en el medio donde algo parecía moverse.

- esto es un bebé?

Un repentino dolor a su pecho la dejo sin aire, y sin fuerzas cayó al piso.

No tardo mucho tiempo antes de que Edward llegará por su amada. Pero se asustó al verla tirada en el piso casi sin poder respirar.

- te llevaré con Carlisle.

- ¡no! - Dijo bella como pudo.

- debemos ir, estas muy mal.

- no quiero ir, ya me estoy sintiendo mejor - su respiración volvió a la normalidad y con un poco de insistencia logró que Edward no la llevará.

- que sucedió para que estés así?

- no lo se, pero antes de eso todo estaba oscuro y con una esfera de agua en el medio.

Edward fruncio el ceño con fuerza, se estaba molestando - y dentro de ella un bebé verdad - añadió.

- si, como lo supiste?

Edward noto la curiosidad de su novia por lo que empezó a contar que era algo que Aria hizo, eso no era ni una sorpresa para bella, pero al enterarce que se trataba de que Rosalie estaba embarazada eso la enfureció.

[...]

Los meses pasaban y Bella quería estar más y más con Rosalie. Al principio no entendía el porque, pero con el tiempo lo supo, sabía porque estaba molesta, porque le dolía, ese bebé debía pertenecerle a ella.

- es mia y eso nadie lo puedo negar.

[...]

El día que Mary Cullen nació, bella se encontraba en Blood crystal, no sabe cómo llegó, pero no le importó.

Estaba decidida a una cosa, llevarce a su hija.

[...]

- Alteza ella ya llegó - informó Luna mirando a Aria que se encontraba mirando por la ventana a algún lugar en específico.

- como ya saben, ni uno la ataque. - respondió fríamente.

- entendido Alteza. La bebe está protegida por nuestros mejores guardias, no habrá problema incluso si la encuentra.

- lo sé, aunque estoy esperando que lo haga.

[...]

Bella corrió durante horas para llegar al castillo, estaba agotada pero aún no se rendiria. Le faltaba poco, eso le gritaban sus instintos. Y también siguiendo a estos encontró la habitación donde se encontraba la bebe durmiendo junto a sus padres.

El agotamiento después del parto de un vampiro era completamente agotador, y este cansancio era compartido con su pareja. Igual no había peligro alguno de que los bebés recién nacidos se queden durmiendo en sus cunas, después de todo Aria protegía a cada niño en ese tiempo, no hacía falta que este personalmente, aunque la mayoría si estaba, y sólo porque le encantaba jugar con los cachetes de los bebés.

Bella se acercó sigilosamente a la bebe, la cual se encontraba despierta. Sus bellos ojos rojos se posaron en la mujer extraña que tenía frente suyo. Bella físicamente no la reconocía, la beba tenía unos ojos rojos, y su pelo era de un hermoso color rubio igual que Rosalie, pero internamente sabía que era su hija.

Cuando bella quiso agarrar a la niña, sintió una mirada fija en ella, por lo que volteó y se encontró a la fija mirada de Aria.

- Hola de nuevo.

Bella estaba asustada quería salir rápidamente del lugar con la bebe, por lo que volteó para agarrarla, pero esta ya no se encontraba en la cuna.

- no deberías desear algo que no es tuyo - decía Aria mientras sostenía a Mary, la bebe se encontraba feliz jugando con los mechones largos que caían cerca de su cara.

- sabes que es mia.

- no no no, ella no le pertenece a nadie no es un objeto.

- se que es mi hija.

- estas equivocada, tu sólo serias madre del cuerpo que crearian tu y Edward, pero su alma es lo que habita el cuerpo. Y justamente está bella alma - Aria pellizcaba suavemente los cachetes de la bebe, la cuales le hacía pucheros por sólo querer jugar con su pelo, no quería que alguien venga y la pellizque - fue creada por mi hermano. Sabes las almas no deciden en que cuerpo habitar, pero si intervengo puedo hacer que vallan donde quiero, y eso es lo que hice ahora, un ser tan hermoso debía ir con alguien quien deseaba con su alma poder tener un hijo. - miro hacia Rosalie - ella era perfecta.

- ¡mientes!

- porque lo aria? No tengo un motivo para mentirte, sólo te iba a contar la verdad, además sabes Edward se encuentra viniendo hasta acá, pero lastima será tarde.

Bella retrocedió unos pasos pero estos fueron interrumpidos con la ola de guardias que sostenían sus espadas contra ella.

- nunca pensé en dejarte vivir sabes, pero primero quería que sufras un poco más y sólo por eso seguías con vida. Puedo perdonar a mis hijos - se refiere a sus creaciónes - pero nunca a un alma que está tan corrompida por el mundo. Háganlo - dijo fríamente.

[...]

Edward llegó tarde, frente al castillo se encontraba sin vida el cuerpo de bella, si pudiera llorar lo haría, pero sólo podía tomarla en brazos y rogar de que esto sea una mentira o una pesadilla.

Tu sufrimiento es más bien deseo de mi gente. Pero eres el alma que yo misma cree una vez, por eso te daré una segunda oportunidad, aún así siempre serás un mocoso molesto ante mi vista.

[...]

- sólo borraste la existencia de bella ante todo el mundo - hablo Alendis.

- sería mucho problema tener que cambiar recuerdos uno por uno a cada persona no crees.

- para ti todo es problema.

- ya es suficiente que tengo trabajo extra, algo menos es mejor.

- ahora que are con esto - Alendis en su mano tenía una esfera completamente negra, si esto era el alma perteneciente a Bella.

- yo hice lo que quise, ahora es tu turno, as lo que quieras con ella.

- son tan fáciles de corromper las almas - suspiro.

Crepusculo (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora