## un amor tan tóxico ;; jenkai (COMPLETA)

## 017

Lo agarré cómo pude, no estaba cooperando ya que estaba medio dormido, tambaleando llegamos a un tronco y lo tiré delicadamente ahí.

—Explícame ahora mismo porqué estás en este estado.—exigí

—¿Jennie? ¿Eres tú?

—Sí.—dije seca

—Aquí.—señaló su pecho— duele...

—¿Qué, estás bien?

—Extraño a alguien.—soltó con una lágrima— ¿Que puedo hacer para recuperarla?

Me quedé sorprendida, acaso... ¿Kai gustaba de otra mujer saliendo con Rosé? Quiero decir, a pesar de que sea la peor persona que haya conocido, aparte de Soobin, no estaba correcto.

—Kai, no entiendo mucho, ¿que quieres decir?

—Enserio... ¿como pude confiar en Rosé? Creo que ni siquiera yo pude sentir amor. Me sentía solo y me obligue a salir con ella.

No pude decir nada, mi mente estaba en blanco, aún no lograba entender que sucedía, pero al rato, luego de cerrar por unos segundos sus ojos, comenzó a hablar devuelta.

—No entiendo cómo, cómo me hizo creer tantas mentiras. No entiendo cómo soy tan tonto que me dejé manipular de esa manera...—hizo una pausa— Jennie. —me miró— Realmente extraño a esa persona.

—¿Quién...es esa persona?—decidí soltar con miedo

—¿Quieres saber? ¿En serio quieres saber?

—Sí.—respondí con una voz entrecortada

—Jennie...—sostuvo mis manos, ¿por qué estaba siendo tan dramático?—Tú. Y por si te preguntas: no, no cambié de opinión así de rápido, solo me quedé pensando, y pude abrir los ojos. Pude sentir que nada iba bien, que nada encajaba en mi cabeza, que había perdido miles de amistades, que era el único que confiaba en Rosé.

—¿Qué...?

—Le había dicho que no volvería por un día, ya qué me sentía tan incómodo con su presencia de un día a otro de repente. Pues todo normal, pero a la noche decidí volver, lo había pensado todo, y en mi mente ya tenía la respuesta: romper con Rosé.
Cuando llegué, abrí la puerta, y me encontré con ella, pero... No estaba sola. A su lado estaba un chico. —hizo otra pausa

Maldita, sabía, no confiaba en sus palabras, le advertí que cuidará a Kai, pero no me escucho, sabía que no lo haría. A ese punto Kai comenzó a sollozar, nunca lo había visto llorar tan sincero en frente de mi.

—Estaba tan seguro—sollozó— ¿Sabés que es lo que más duele? Que me manipuló, me mintió, que me di cuenta tarde. Demasiado tarde.—sus manos cubrieron su rostro

No pude evitar ir a abrazarlo, estaba sin palabras, lo único que pude hacer era ir a abrazarlo y dejar que llorara lo que quisiera, no tenía porqué actuar fuerte en mis ojos.

—Tranquilo, Kai. Sientete libre de llorar.—apoyé su cabeza en mi hombro, y lo acompañé llorando.

Por un lado estaba tan felíz, que por fin se había dado cuenta, se dió cuenta por si mismo y no por alguien más, me dió muchísima más felicidad que se pusiera a pensar las cosas. Y, lo más importante, que decidió terminar con ello, que sabía que nada estaba yendo cómo él esperaba.