Una vida después de la muerte.

Parte 30-

Bellatrix se despertó en casa de sus padres sintiendo un fuerte dolor en el pecho. Se apartó un poco la camiseta y vio cómo la herida iba cicatrizando hasta no ser más que una marca en su pecho. Se incorporó de la cama y bajó a la sala donde Isabelle y Michael estaban sentados. 

-¿Que son buenos días o buenas noches?-sus padres se giraron al escucharla. 

-Hija mía.-su padre corrió a abrazarla, después vino su madre y los tres se fundieron en un abrazo. 

Bellatrix comió un poco y bebió algo. Nadie comentó lo ocurrido, hicieron como si Bellatrix solamente hubiera estado durmiendo. Dos noches después alguien llamó a la puerta mientras la familia cenaba. Bellatrix se levantó y fue a abrir. Abrió la puerta y se encontró con una mujer con una capucha. No necesito mirarla a la cara para saber quien era. 

-Anna.-ella se quitó la capucha dejando ver así su rostro. 

-Bellatrix.-ambas chicas se abrazaron-Pensaba que te había perdido para siempre.-Anna lloró en los brazos de su amada. 

-Jamás me separaré de ti.-ambas chicas sonrieron. Anna entró en la casa y se unió a la familia. Bellatrix jamás le preguntó si sabia lo que era realmente. 

Un mes después la familia se mudo ya que Aura, quien había ayudado a Anna a llegar hasta la casa de Bellatrix, las había avisado de que Alexander las estaba buscando para acabar con ellas. Ambas chicas, vampiresa e híbrida, fueron felices.

Pero dos años después, Anna enfermó. Fue una mañana de invierno más fría de lo normal y Anna empezó a sentirse más débil de lo normal. No podía ni mantenerse de pie. 

Meses después Anna murió.

Dos años después, Bellatrix se encontraba en el lugar donde el cuerpo de Anna descansaba. Después de la muerte de su amada, Bellatrix se fue de casa. Era como un fantasma errante, iba de aquí para allí sin pararse en ningún sitio. Se había estado preparando.

-Pienso vengarte.-dijo, mirando al cielo. Después miro hacia delante, le quedaba mucho camino por delante, así que empezó a andar. Dejando toda una vida atrás. Sabía a que había cambiado, sabia que ya no era la misma. Daba igual. Cuando volvió a nacer en aquel mundo no había sido la misma que cuando era Beatriz, ahora no era la misma Bellatrix que había nacido para cuidar a Anna. 

(Fin?) Si has llegado hasta aquí, primero, agradecerte haberle dado una oportunidad a mi historia. Además, decirte que, si quieres leer más acerca de la vida de Bellatrix, entra en mi perfil y lee "Guerra entre razas", la continuación de esta historia. Un beso, Bea. ❤️🐺