Le gustaba Bill.
Era innegable, y ya no podía seguir ignorando a su omega.
Luego del beso de hace dos semanas, Dipper quiso hacer como si nada hubiera pasado. Bill pareció entender eso y le siguió la corriente, pero el castaño ya no sentía las cosas igual. Cada vez que el alfa pasaba un brazo por sus hombros o simplemente le sonreía él perdía los estribos y eso no tenía que pasarle.
Así que empezó a tomar distancia.
Bill, por otra parte, al captar que Dipper no quería hablar del tema desistió de darle los cristales, aunque siempre llevaba uno en el bolsillo por si se daba la ocasión. Sin embargo, su omega estaba cada vez más distante y él no entendía por qué, ni sabía como remediarlo.
Y en vez de preguntar como cualquier persona normal haría, decidió hacerle caso a su alfa e indagar de forma disimulada.
-Dipper... ¿a ti te gusta alguien?- preguntó mientras estaban acostados en el césped.
-¿Qué?- Dipper se hizo el tonto, sonrojándose involuntariamente.
-Que si ya has encontrado a tu alfa- fue un poco más claro.
Dipper se quedó en silencio unos segundos... ¿qué se suponía que debía decirle? Su omega interno le gritaba que él era su alfa, pero estaba convencido de que Bill estaba enamorado de alguien más.
Suspiró.
-N-no...- murmuró.
El alfa de Bill gruñó. El rubio creyó que ambos habían sentido esa conexión extraña, pero al parecer solo fue él.
-... lo sé- terminó de decir el omega.
Ambos se quedaron callados.
Dipper perdido en sus pensamientos tratando de entender por qué Bill hacía preguntas extrañas. Y también quería entender por qué estaba tan nervioso.
Ah sí, porque sus tíos le habían dado permiso de quedarse a dormir con Bill esa noche.
Al parecer ambos alfas quedaron muy satisfechos con la madurez del rubio (y de su determinación para protegerlo), y le permitieron pasar la noche con él. Así que ahí estaban, acampando a la luz de la luna.
Por otro lado, Bill estaba pensando en sus dos opciones: o Dipper no sabe como sentirse al encontrar a su alfa... o no sabe que lo encontró porque no está seguro de si le corresponde...
De cualquier forma, Dipper está confundido y era su deber que deje de estarlo.
A la mierda la conexión que sintió en su interior.
Iba a conquistar a su omega como Dios manda.
○●○●
-¡Tu no tienes permitido estar con nuestra hija!- Mabel se encongió al escuchar al hombre gritar.
-¡Papá! ¡Es mi vida! ¡Ella mi omega! ¡La amo! ¡Y voy a casarme con ella!- la rubia intercedió poniéndose frente a ella.
-¡No tienes permitido casarte con una omega de clase baja! ¡Mucho menos con una mujer!
-¡No puedes impedírmelo!
-¡Si te casas con ella, olvídate de ser una Noroeste!- gritó Preston.
-¡Bien! ¡Desheredame! ¡De todas forma no quiero estar en tu estúpida familia!- sentenció Pacífica, tomó la mano de Mabel y la sacó de la mansión.
Bien... conocer a sus suegros no fue muy agradable.
Pacífica quería intentar por las buenas impedir su matrimonio arreglado. Le propuso a Mabel presentarse como pareja y pedírles a sus padres su bendición, como se hacía en la antigüedad. Creyó que al seguir las tradiciones sus padres serían un poco más comprensivos.
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Destinados (BillDip) [Omegaverse]
FanfictionDipper nunca creyó en esa leyenda de los destinados. No cree posible que dos personas se enamoren solo porque el destino lo dice. A sus 17 años todavía no se ha presentado, y todo el mundo le dice que será omega, pero él quiere ser beta. Porque sabe...