-Esto es una pérdida de tiempo- dijo mirando por la ventana.
-Oh vamos, Dipper- se tiró sobre él abrazándolo por el cuello- serán tres meses divertidos.
-¿En un lugar sin internet? Lo dudo- rodó los ojos y volteó a mirarla- ¿qué pasará si me presento entre estos meses?
-Cuidaremos de ti- le sonrió.
Dipper la miró no muy convencido pero no dijo nada, solo suspiró y volvió a ver los árboles por la ventana. Ya casi llegaban, habían pasado el cartel de "Bienvenidos a Gravity Falls" hace unos minutos.
Seguía sintiéndose raro. No quería estar ahí, él hubiera preferido mil veces estar en su casa con sus libros e internet. Pero algo dentro de él no le dejaba resistirse lo suficiente. Se pudo haber inventado cualquier cosa para no ir, ganas no le faltaban, pero algo se lo impedía... algo le decía que tenía que estar en ese viaje.
Cuando el autobús se detuvo ambos soltaron un suspiro, querían bajar de ahí lo más pronto posible. Bajaron sus cosas y esperaron a alguno de sus tíos para que los lleve a la cabaña.
-¿Crees que hagamos amigos?- le preguntó a su hermano con una sonrisa.
-¿Tu? Seguro- respondió sin mirarla, prestando más atención a la calle a ver si aparecía un auto- en cuanto a mi, lo dudo- volteó a mirarla- me quedaré con mis libros, lejos de la naturaleza y...- miró el pueblo, el cual notó, estaba descuidado- ... y de este pueblo fantasma.
-Aburrido- rodó los ojos e imitó a su hermano buscando el auto de sus tíos. Lo miró una vez más, estaba preocupada.
Dipper no tenía muchos amigos y lo que tenía solo eran compañeros del club de ciencias, nada muy cercano. No le molestaba que su hermano fuera un nerd, le molestaba la falta de socialización e interés por las cosas nuevas. Ella no estaría por siempre a su lado, algún día cada uno haría su vida pero... ¿Dipper estaría bien solo?
-Oh, ahí están- su hermano tomó su maleta y la de él caminando hacia el auto que había parado enfrente de ellos. Lo siguió cruzando la calle.
-¡Niños! Que alegría verlos- un señor bajó del auto y abrió el maletero- la última vez que los vi usaban pañales- agregó con una sonrisa mientras guardaba el equipaje de los gemelos.
-¿Tío Stan?- preguntó Dipper.
-Ajá- afirmó el viejo.
-Hola tío Stan- saludó la omega.
Los tres subieron al auto y se encaminaron a la cabaña. Stan les mencionó que dividió el ático para que ambos tuvieran privacidad y los gemelos agradecieron eso, ya que hace mucho que no dormían en la misma habitación. También les informó de su hermano:
-Es un poco raro, y sus investigaciones algo peligrosas así que no se involucren mucho- los miró por el retrovisor y los castaños asintieron, aunque el menor sin prestar mucha atención.
Se quedó pensando... ¿investigaciones? ¿Qué clase de investigaciones?
Llegaron a la cabaña y los ayudó a instalarse. Los gemelos se despidieron y empezaron a desempacar. Cuando terminaron, ambos coincidieron en que tenían hambre así que bajaron a buscar algo de comer, encontrándose con su otro tío en la cocina.
-¡Niños! No sabía que ya habían llegado- les sonrió.
-Hola... tío Ford, ¿cierto?- preguntó la castaña acercándose para saludar.
-Así es, y tu debes ser Mabel- olió un poco- una hermosa omega con aroma a durazno- le sonrió.
-Soy una chica dulce- dijo con orgullo.
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Destinados (BillDip) [Omegaverse]
FanfictionDipper nunca creyó en esa leyenda de los destinados. No cree posible que dos personas se enamoren solo porque el destino lo dice. A sus 17 años todavía no se ha presentado, y todo el mundo le dice que será omega, pero él quiere ser beta. Porque sabe...