No podía dejar de mirar al chico detrás del mostrador. Era guapo, alto, de cabello castallo oscuro y con una hermosa sonrisa. Trataba de ponerle atención a lo que decía mi Prima Mavis acerca de la falda que había encontrado, pero no podía apartar mi mirada de él.
-Creo que la comprare...-le entendí a Mavis. Miré al suelo cuando crucé la mirada con el chico, sentí que me sonrojaba de a poco. Mi prima notó ese detalle y buscó con la mirada el punto que había estado mirando, cuando encontró al chico hizo una mueca y me golpeó en la cabeza con la falda.
-No puedes, Elizabeth. Estás comprometida ahora, ¿qué pensaría Jackson si te viera en estos momentos?
Si...¿Qué pensaría él? ¿Me dejaría libre?
-No lo sé...tampoco es para tanto, sólo lo estaba mirando. Estoy comprometida,no ciega-le respondí. Mavis negó con la cabeza y siguió sacando ropa de los colgadores de la tienda.
Levanté la vista una milésima de segundo y sentí la mirada del chico.
No podía hacer nada, él me gustaba pero no de la misma forma que Jack.No,no era justo para Frost, así que me reprimí e hice como que él no estaba en el mismo establecimiento que yo.
Sin embargo, no funcionó. Mavis me regañaba cada 5 minutos por mirar "descaradamente" a otro hombre que no fuera mi futuro esposo, pero al parecer ella no comprendía que yo aún tenía 17 años y que era una chica como todas la demás.
-Elsa, ya basta. Llamaré a Jackson- me dijo enojada mientras sacaba el celular de su bolso.
-Tú no harás nada. No he hecho nada malo, no lo he engañado.-Protesté. Y era verdad, admitía que el chico me atraía y que no dejaba de lanzarle miradas, pero no había hablado con él. Seguía siendo un desconocido.
Pero como siempre, las cosas iban en mi contra. Cuando mi prima fue a pagar la ropa que había elegido, nos atendió nada más y nada menos que el chico.
-Hola chicas, en qué puedo ayudarlas- nos dijo con una agradable sonrisa. Mavis bufó y me fulminó con la mirada con la clara advertencia de "No hagas nada o le diré a Jack"
-Quiero pagar esto- le dijo ella, sin dejar de amenazarme.
Cuando él le entregó el recibo y las bolsas con ropa, Mavis se apresuró en salir tirándome del brazo. Afuera de la tienda, sentado en una banca para descarsar dentro del centro comercial, Jackson bebía un cafe.
-Recuérdenme no volver a acompañarlas cuando digan la palabra "Compras" -nos dijo poniéndose de pie y acercándose a nosotras. Pasó su brazo por mi cintura y comenzamos a caminar hacia la tienda de música, Mavis quería aprender a tocar guitarra y para empezar necesitaba una.
-Al final, ¿Qué compraron?- nos preguntó Frost mientras subíamos por la escalera eléctrica.
-Yo un vestido para cuando llegue la primavera, un abrigo, una falda, un par de zapatos y un chaleco-enumeró Mavis.
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Cásate Conmigo -Jelsa-
Roman d'amourMi abuela sentía una debilidad por Jackson, siempre le consentía y le regalaba dulces a escondidas de mi madre. Incluso mis padres querían más a Jack que a mí. Era un niño demasiado consentido para ser el hijo de la niñera. El día de su cumpleaños...