🍫 XXX: Desde cero

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[31 de Enero]

[Munich, Alemania]

El vehículo negro se detuvo, delante de una casa color café de dos plantas con enorme jardín. El chofer bajó y abrió la puerta de atrás, para que la joven y su novio bajasen; tras ello, se encargó de bajar las maletas de ambos.

– ¿Esta es la casa de tu madre?

– Eso...creo.

Tn tomó aire y tomó la mano de su novio, apretando con nervios.

– No te preocupes...podemos irnos cuando quieras.

– Sí...Me reconforta tenerte aquí.

Ambos tomaron sus cosas y se acercaron a la puerta. Aquella se abrió, dejando ver a aquella mujer, pálida y rubia, vestida con un estilo vintage que la hacía ver como si saliera de los años 40's.

– ¿Minna...? –murmuró.

– G-Guten abend, mutter.

– ¡M-Minna!

Nicole se abalanzó sobre su hija, abrazándola con fuerza. La joven jadeó con sorpresa y correspondió. Se separaron poco después, mirándose.

– Ah...Él es mi novio –miró al chico.– Ella es mi madre.

– Nicole Färbaer, mucho gusto –extendió la mano a él.

– M-Mihael Keeh –estrechó su mano.– Es un gusto.

– Pasen, por favor. Prepararé algo de té.

Ambos entraron a la residencia. La maid se acercó, saludando.

– Anna, por favor, lleva las cosas de mi hija y su novio al cuarto de huéspedes.

– Ja.

– Iré a preparar algo de té, dile a Luca que baje.

– Ja, frau. (Sí, señora)

La maid tomó las cosas y subió las escaleras. La mujer indicó a su hija y el chico dónde estaba la sala y se dirigió a la cocina.

La joven pareja tomó asiento en el sofá alargado y esperó.

– Te pareces mucho a tu madre.

– Eso creo. Aunque ella parezca salida de una película ambientada en la Segunda Guerra –rió.

Tras unos minutos, la mujer regresó con una bandeja en sus manos, y sirvió las tazas de té.

– ¡Mama! –gritó una voz infantil.

Todos miraron a aquel pequeño, rubio y de ojos azules, vestido con una camisa blanca y unos azules pantalones cortos a las rodillas con tirantes, junto a un par de calcetines azules y zapatos negros.

– ¿Ah?

– Ven aquí, hijo.

El niño asintió y se acercó a su madre, mirando a los otros dos con cierto recelo, pues el aspecto de ambos no inspiraba mucha confianza, él vestido con cuero negro y con una gran cicatriz en su cara y ella vistiendo estilo urbano que la hacía ver como una gangster de película yankee.

– Hijo, ¿Recuerdas que te dije que yo buscaba a tu hermana? A quien se llevaron cuando era niña.

El pequeño asintió.

– Bueno...esta joven es...Minna, mi hija –la miró.– Minna, él es mi hijo, Luca.

El menor miró hacia aquella joven, y ella lo miró a él.

Atelophobia 🍫 Mihael "Mello" KeehlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora