Benjamín.

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Cuando Isaac estaba esperando a Benjamín, su primer pensamiento fue el aborto, después dar en adopción al bebé... Pero no se dio cuenta en qué momento se enamoró tanto de su bebé y darlo a luz solo fue la confirmación de que lo iba a amar para siempre, que lo iba a proteger con su último aliento si era preciso.

Estaba en el hospital y le hicieron su primera ecografía, pudo ver ese pequeño punto en la pantalla, no entendía del todo, pero lo único que sabía es que tenía que ocultarse. No podía confiar en nadie, entonces movía como gato entre las sombras, nunca tuvo un médico fijo, solo visitas ocasionales con un doctor para que le digiera que, si estaban bien, pero debes de sentirse feliz, se sentía tan presionado, triste, en pánico y tanto miedo... Tanto miedo que sentía que solo quería convertirse en rata y meterse a la alcantarilla. ¿Qué iba a pasar si Cole se enteraba de su embarazo? ¿Qué pasaba si el alfa lo encontraba? ¿A quién podía recurrir? ¿Qué iba hacer cuando tuviera al niño, lo iba a dejar en una iglesia y ya?

Apenas podía comer, se mareaba constantemente y vomitaba por la mínima cosa, no podía dormir bien y cada vez estaba más cansado... Pero en una de las visitas al doctor, ya su gestación era cada vez más avanzada y no tenía un control estricto como le habían recomendado, era un omega recesivo, necesitaba más cuidados, pero sabiendo que su vida estaba en peligro nunca pudo cuidarse realmente. La doctora puse el gel frío en su vientre y paso la máquina para poder hacer el ultrasonido. Cuando vio la imagen de su bebé su corazón empezó a latir con fuerza y al escuchar su corazón empezaron las lágrimas a salir por sus ojos.

Doctora: Esta muy sano, pero tienes que tener cuidado, ¿si estas tomando vitaminas y ácido fólico señor Tayson?

Isaac: Si, lo estoy haciendo.

Doctora: Le recomiendo que en este momento tenga un cese a sus actividades, no puede estresarse o le puede causar un parto prematuro, ¿está bien?

Isaac: Claro, muchas gracias.

¿No vivir bajo presión? Era una burla a su situación actual y muy cruel. Claro que le encantaría poder no estar en esa estúpida situación, perseguido, con miedo y abrumado solo por el hecho de respirar... Ni siquiera podía ir al supermercado a hacer una compra normal, porque sabía que era un blanco fácil en su estado actual.

Isaac: *acariciando su vientre* perdóname... pero prometo que vas a tener una familia que te ame, no es que yo no quiera hacerlo, pero... en verdad perdóname.

El pelinegro empezó a llorar, no había pasado más de un día que escucho el corazón del bebé que llevaba en su vientre y le dolía de sobremanera de tener que despedirse de ese pequeño ser, aunque ni siquiera estaba en sus brazos. Necesitaba ayuda... ¿A quién iba a recurrir si no podía confiar en nadie? Tenía tanto pánico y miedo, pero recordó al mejor amigo de su padre... Steve, ¿lo ayudaría en verdad? Entonces decidió buscar a ese hombre, sabía que tenía mucho que perder... Pero para su sorpresa, el hombre accedió a ayudarlo, le sorprendió mucho encontrarlo en ese estado "Chiquito y panzoncito"

El hombre nunca le pregunto detalles, solo le dio su ayuda, lo escondió y le ayudo a saber dónde estaba su mamá...Extrañamente tenía tantas ganas de verla, que lo abrazara, que lo consolara como cuando era un niño pequeño y ahora estaba en la calle, con ropa oscura, una bufanda cubriéndole el rostro y una gran chamarra, para que nadie sospechara, estaban en invierno ¿quién iba a pensar que ese hombre alto estaba en cinta?

Caminando por las calles, encontró una venta de garage, lo que le llamo la atención de ahí, fue una manta color rosa y un pequeño mameluco color amarillo. Sonrió al verlos, entonces tomo las cosas, la abuela que atendía le sonrió y le dijo que eran muy bonitos, que debería de llevarse también un oso de peluche, de seguro su esposa iba estar feliz con esos regalos... Pero Isaac solamente negó y se llevó las cosas.

Estaba escondido en un pequeño departamento, lavo muy bien las cosas, las seco y las veía con ternura... ¿Le estaba dando emoción?... Pero tenía que dejarlo, no podía hacerse ilusiones con... con su bebé. Al recordar eso, empezó a llorar de nuevo y se abrazó así mismo, se sentía tan solo y tan desconsolado, que sentía que todo era negro a su alrededor. Pasaron los días y había hecho una mochila de emergencia para salir corriendo de ese lugar, se dio cuenta que alguien lo estaba siguiendo, era momento de escapar, pero las cosas no salieron como él planeaba.

Era de madrugada y empezó a tener mucho dolor en su vientre y entro en pánico, Steve estaba en una misión y no podía alertar a nadie de lo que estaba pasando, necesitaba ayuda médica, pero ¿cómo carajos iban llegar al hospital? Las personas normales tienen quien los ayude, él estaba solo y no podía recurrir a nadie. Entonces tomo la mochila, respiro profundo, casi se arrastró por la calle y consiguió un taxi. Cuando llego al hospital, casi se desmaya en los brazos de una enfermera...

Los médicos se alertaron de inmediato y corrieron ayudarlo y en esa noche tuvo a su pequeño sol, el trabajo de parto fue complicado, pero pudo lograrlo, pero antes de que le preguntaron si quería cargarlo, una enfermera ya se lo había puesto en los brazos mientras este lloraba

Enfermera: Es un niño muy bello, muchas felicidades, es prematuro, pero va estar bien, fueron muy fuertes los dos.

Isaac entro en shock momentáneo cuando tuvo ese pequeño bulto en sus brazos, tenía ese pequeño mechón rubio en la cabeza y lloraba, entonces el pelinegro empezó a llorar con su bebé y lo estrecho contra su pecho.

Isaac: Te amo tanto...Tanto mi amor *viendo como el niño se calmaba*

Enfermera: ¿cuál va ser el nombre de este hermoso bebé?

Isaac: Benjamín, ese va ser su nombre...

No pudo no evitar en pensar en su padre, siempre estuvo ahí para hacerle fuerte y también lo amaba tanto, pero ya no estaba a su lado, y ya no podía volver con Steve, entonces solo se limpió los ojos, en su ser emergió una fuerza que ni él conocía, tener ese sol en sus brazos, le dio un poder que nunca había sentido antes a pesar de sentirse tan solo.

Los doctores querían hospitalizarlo, estaba bien, pero querían evitar infecciones, pero no fue así, Isaac vio la forma de escapar y lo hizo, fue por su mochila, tomo a su bebé en brazos y huyo del hospital antes de que cualquier persona diera con él o con su pequeño sol. No podía moverse bien, pero aun así se las ingenió para tomar un autobús con su recién nacido y llegar hasta donde estaba su madre. El bebé se portaba muy bien, lo había cambiado y puesto ese mameluco amarillo y lo envolvió en la manta rosa, ahora le daba de comer con una mamila, era tan hermoso que le salieron las lágrimas.

Cuando llego a donde estaba su mamá, tenía tanto miedo, no se sentía bien, pero ahora sabía mejor que nunca que tenía que proteger a su razón de vida, su regalo, su Benjamín... Entonces abrió toco la puerta y vio a su madre y ambos se miraron.

Pina: Isaac...

Isaac: Mamá necesito tu ayuda...
FIN

CORTOS  BASADOS EN LA NOVELA DE DEAR BENJAMÍN Y7 LOVE BENJAMÍNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora