13-) Eres tú y nadie más

34.2K 4.7K 9.8K
                                    


—Capitulo trece—

—Capitulo trece—

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



AURORA GARTI

— Ten— le entregue una bolsa fría que contenía hielos— Mantenlo en tu nariz para bajar la inflación

Habíamos subido a mi habitación hace unos minutos. Él por su parte no me a dirigido ni la mirada, estaba sentando en la orilla de mi cama con su vista baja, acepto la bolsa y al ponérsela en la nariz soltó un quejido de dolor por lo bajo

— ¿Qué haces aquí Zach?

— ¿Te molesta que haya interrumpido tu momento íntimo con ese bastardo?— murmura con molestia

— No— me cruce de brazos— Me molesta que hayas viajado dos horas hasta aquí cuando se supone que deberías estar en tu universidad, acostado en tu cama estudiando y no aquí conmigo, con una nariz casi rota.

Finalmente subió su mirada hacia a mi— No tuviera que haber venido hasta acá, si respondieras aunque sea mis llamadas— contraataco— Pero ya veo que has estado muy ocupada con otro— dijo entre dientes—  Me quedo muy en claro cuando él fue quien contesto la última vez que te llame

Se puso de pie y tiro la bolsa de hielo en mi cama con molestia, para apartarme y dirigirse hacia la puerta para irse, pero antes de que se fuera me interpuse deteniéndolo

— ¿Zach que sucede contigo?— fruncí mi ceño— Tu no eres así, nunca has sido así de posesivo, inseguro, celoso y mucho menos agresivo ni violento, ese chico que vi ahí abajo no eres tú ¿qué te ocurre?

Apretó su mandíbula desviando su mirada de mi y le escuché decir una maldición por lo bajo, hasta que soltó un largo suspiro cerrando sus ojos, descanso su frente con la mía unos segundos para luego abrazarme fuertemente, como si no quisiera dejarme ir

— Lo lamentó— susurró en mi oído— Tienes razón, yo no soy así, de verdad lo siento..— por su tono, sé que está arrepentido

— Está bien— acaricie su espalda— Sé que no fue tu intención

Se apartó de mi y ahora sí veía aquel chico dulce y amable el cual adoro, en sus ojos podía ver claramente la culpabilidad y tomó la muñeca por la cual me había sujetado, subió la manga de la sudadera y se veían de manera muy leve sus dedos marcados en mi blanca piel

Y su mirada de culpabilidad aumento— Mierda, lo siento, en serio, no quise lastimarte— hablaba rápidamente con preocupación— Perdón, yo..

— Hey— al verme se veía tan arrepentido, que solo pude sonreírle a boca cerrada para tranquilizarlo— Estoy bien, no fue nada.. pero por favor no lo vuelvas hacer

En el final del arcoíris © [ ✓ ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora