En el final del arcoíris © [ ✓ ]

1-) El día de la tienda

—Capítulo uno—

AURORA GARTI

— Hey.. ¿no responderás?— insistió— ¿Nos conocemos? Hace un rato me llamaste

Quería llorar al tenerlo tan cerca de mi, gritar, saltar de la alegría y a la vez golpearlo con molestia.. por aparecer de esta manera en mi vida cuando se suponía que era pasado

Un año desde que me desperté de mi coma.. un año desde la última vez que vi su rostro en mis sueños y ahora está aquí, frente a mi como si nada..

Una presión en el pecho y un nudo en mi garganta se formaban con rapidez y por unos segundos no supe que responderle, ni que hacer

Solo.. respira Aurora.. y actúa normal, no pierdas la cabeza aún más

Aquella voz.. hace tanto que no estaba tan presente, comencé a sentirme abrumada por tantas cosas sucediendo a la vez que sentí mi respiración acelerarse al punto que pensé que me ahogaría

— Mierda..— fue lo primero que se me escapó de los labios

— ¿Mierda? ¿Ese es tu nombre?— me observaba divertido

— ¡No!— aclare de inmediato y cerré mis ojos tratando de controlarme— Yo.. tú— los nervios me atraparon logrando que balbuceara y maldecí por eso— Te confundí con otra persona, perdona..

Trate de sonar segura y no como una lunática nerviosa, pero creo que salió todo lo contrario porque mi voz está temblorosa y siento que en cualquier momento mis piernas fallaran

Él sonrió ladino, mirándome fijamente con detalle, una mirada que me causaba miles de sensaciones  aún ¿cómo es posible que él todavía tenga ese poder en mi?

— Entiendo— mantuvo su escasa sonrisa deteniendo sus profundos ojos azules en mi— Pensé que si nos conocíamos, tu..— dudo un poco en decirlo y entrecerró sus ojos viéndome con cierta confusión— Te me haces algo familiar

Abrí mis ojos tanto como pude ante sus palabras— ¿M-Me conoces?— de verdad intentaba controlar mi voz, pero esto era algo difícil de digerir

Callo unos segundos hasta que ladeó su cabeza en negación— Créeme que si te conociera lo sabría, no serías alguien a quien me gustaría olvidar— me sonrió a boca cerrada y fue inevitable no sentir esa punzada en mi vientre

Solo juega contigo niña estúpida, como lo hacen todos, no te dejes engañar. Ese chico, ya no es tú Axel

Maldita voz