En el final del arcoíris © [ ✓ ]

37-) Ocean Eyes

— Capítulo treinta y siete—

Capítulo dedicado a las chicas (y a Manuel xd) del grupo de WhatsApp, ustedes simplemente son maravillosos y les agradezco todo su apoyo y las sonrisas que me han sacado estos últimos días, los quiero y amo muchísimo mis dementes <3

AXEL DAKER

¿Alguna vez has perdido a alguien?

Al principio.. no sabes como sentirte, sentimientos como el odio, frustración, tristeza. Sientes esa presión tan fuerte en el pecho y aquel nudo en tu garganta que te asfixia, entras en una pequeña etapa de negación en donde no es posible que esa persona haya partido

Y así es como me siento yo, cuando él me dijo aquellas palabras

— Lo sentimos..— murmura con pena el doctor enfrente de mi— Hicimos lo que pudimos, pero ya había perdido demasiada sangre y la bala perforó un órgano importante— siento mi respiración detenerse— Lamentamos su pérdida— es lo último que dice antes de darse media vuelta y marcharse

Lamentamos su pérdida..

La había perdido, a ella y a mi hijo, los había perdido.. como a mi madre, como a todo lo que me rodea y tampoco pude protegerlos, les fallé, volví a fallar

Entre en un pequeño estado de shock y es cuando escucho el sollozo de Ruby a mi lado que regreso a la realidad

La observo por unos segundos, lagrimas gruesas se deslizan por sus mejillas a la vez que toca su pecho con su mano al sentir tanto dolor dentro, su llanto es lo único que se escucha en el solitario pasillo de la clínica y yo.. no puedo llorar

— No, no, otra vez no— repite la morena entre sollozos— Ella no..

Con dudas, me acerco hacia ella y tomó su mano, Ruby me mira con sus grandes ojos marrones, ahora rojos al igual que la punta de su nariz y con las mejillas empapadas, le doy un pequeño jalón hacia a mi y la abrazo, sin poner objeción siento sus brazos rodear mi torso correspondiéndome y hunde su rostro en mi pecho mientras moja mi camisa con sus lagrimas

Y yo.. no puedo llorar

Miro fijamente la pared blanca enfrente de mi mientras intento consolarla, ambos estamos solos aquí desde hace una hora, es la única que me ha hecho compañía. La abrazo con fuerzas y cierro mis ojos cuando el dolor comienza a extenderse por mi cuerpo

Esto no es verdad, no es real, es un sueño

Joder Axel, ya despierta