Dama de los Elementos (Steve Rogers)

Cap. 11 - Matarle o no matarle, esa es la cuestión

Miraba fijamente al director Fury hasta que él sintió mis ojos puestos en él y me miró de vuelta.

–¿Me va a permitir hacerlo? – Le pregunté a la espera de una respuesta afirmativa, cruzándome de brazos.

–¿Está segura de querer hacerlo? – Me preguntó de vuelta, consiguiendo que todas las miradas cayeran sobre nosotros.

–Voy a hacerlo sí o sí, pero prefiero que usted me dé permiso. – Le respondí a Parches con indiferencia. – Es lo único que puedo hacer, por ahora.

–¿Aún con la posibilidad de que intente manipularle? – Me preguntó intentando ocultar la sorpresa ante mi decisión.

–No estará pensando en que hable con Loki, ¿verdad? – Preguntó Natasha al director, sorprendida al entender lo que estábamos hablando.

–No se esperará que me envíen a mí a hablar con él. – Le expliqué a la pelirroja, encogiéndome de hombros. – Es una buena táctica para tomarle por sorpresa y conseguir información.

–Déjala hablar con el cuernitos, Fury. – Intervino Stark sonriendo un poco, pero a la vez con una mirada de intriga. – Lo mejor que puede pasar es que él la provoque y ella utilice sus habilidades e intente matarle. – Rodé los ojos ante sus palabras, pero tenía un poco de razón. – ¿Jugamos, doctor? – Le preguntó Stark a Banner para marcharse de allí.

–Por aquí, señor. – Le respondió Banner indicando el camino.

Cuando ambos hombres salieron del puente, miré de nuevo a Fury, esta vez poniendo mi carita de niña buena, puede que funcionara con el espía. Fury negó la cabeza, pero sonrió.

–De acuerdo. – Me dijo el director. – Pero primero descansa un poco para, como ha indicado Stark, no intentes matar a Loki.

–Menuda confianza me depositáis... – Murmuré por lo bajo mientras me iba también del puente.

–Deja de murmurar y vayamos a la cafetería. – Nat se situó a mi lado. – Me apuesto lo que quieras a que no comes nada desde que Fury te informó.

–No me vendría mal comer algo... – Le comenté sin darle la razón, aunque la tuviera.

....

Natasha y yo cenamos en la cafetería mientras ella me contaba lo ocurrido con Thor cuando venían de Alemania. También me había dado un par de consejos para cuando estuviera hablando con Loki no me dejara manipular. “No caigas en sus provocaciones.” esa era la clave.

Ahora estaba en mi habitación, acababa de terminar de darme una ducha rápida para refrescarme y quitarme el sueño de encima. Miré el reloj y me sobresalté al ver que me quedaban pocos minutos del tiempo que me había indicado Fury por el intercomunicador, lo último que quería era que terminara cambiando de opinión.

Me vestí con rapidez con unos leggins negros y la camiseta de S.H.I.E.L.D que me regaló Natasha, dependiendo de cómo terminara la cosa puede que necesitara subir a cubierta a relajarme. Puede que tuviera cierta confianza en mi decisión, pero eso no quitaba la capacidad de manipulación del hermano de Thor.

Cuando estaba casi lista para salir de ahí, alguien llamó a la puerta.

–No deberías hablar con Loki. – Me soltó Steve Rogers cuando abrí.

–Me alegro de verle, capitán. – Le dije con falsa amabilidad, ignorando su comentario. – ¿A qué debo su visita?

Salí de la habitación tras agarrar la tarjeta de acceso y empecé a caminar por el pasillo. Escuché las pisadas del Capi siguiéndome y no pude evitar sonreír encantada por ello. Me había sorprendido un poco que aún fuera con su traje de combate, pero no me quejaba, estaba perfecto con él.