Capítulo II

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Pasaron dos semanas desde que tomé mi nuevo puesto, las chicas que me encargaron eran muy tranquilas, con Raquel podía conversar de mil cosas sin aburrirme era muy divertida, aveces sí tenía sus episodios de bipolaridad, los controlabamos rápidamente, mientras que la otra chica, me comentaron que le dicen Rizos, pasa sola no quiere hablar y solamente ve hacia la cuidad y susurra yo no estoy loca, ella me encerró aquí, lastimosamente tiene prohibidas las visitas al parecer ha intentado matar a todo ser querido que viene a verla. Estaba terminando de llevar unos papeles, me fijé en la hora, era tiempo de las pastillas de Raquel, que estaba en el patio viendo hacia un lugar alejado del edificio.

A: Raquel es hora de tus medicamentos.

Ra: sssshhhhhh- Puse mi mano en toda la boca de Andrés-Hoy es el día, hoy vienen a visitar a mi niña naranja, ella se pone feliz cuando la vienen a ver, está allá-señalé, era donde me había perdido hace dos semanas, era el almacén.

A: Vale, me alegro por tu niña naranja ahora tomate esto por favor-Raquel tomó sus pastillas y se puso a llorar-Que pasa?

Ra: que mi niña naranja se siente sola, quiero ayudarla pero no puedo, hace mucho tiempo no la veo.

A: Ya tranquila, hablaré con Sandoval para que la ayude bien?

Ra: En serio? La vas a ayudar? - asintió-lo abracé fuerte-Gracias, gracias, gracias.-comencé a saltar.

A: Entré de nuevo al edificio, fui por las pastillas de Rizos, que estaba en la habitación, note que eran diferentes a las de siempre-Emmm Julia creo que hay un error, estas no son las pastillas correctas.

J: Si lo son, cada dos meses le tocan estas, ahora anda, el jefe esta muy atareado hoy y quiere que todo esté en orden.

A: Fui a la habitación, Rizos estaba en la ventana-Rizos sus medicinas-la chica volteó tomó el vaso y se iba a tomar las pastillas, pero se quedó observándolas unos segundos.

Ri: Que mes estamos?

A: Marzo- Respondí, la chica me volteó a ver y me agarró la mano.-Sueltame Rizos no quiero tener que darte un calmante.

Ri: Hoy vienen, tienes que ayudarme a escapar de aquí tengo que contar la verdad por favor, por eso me medican diferente hoy, quieren que duerma todo el día y no intente nada, ayudame, AYUDAME-En ese momento entraron dos enfermeros más que obligaron a la chica a tomar sus pastillas, cayo dormido en segundos.

A: Quedé sorprendido con la reacción de Rizos, quienes venían hoy? Quién era la niña naranja? Por qué todo en el edificio hoy era distinto?, salí de la habitación por el salón iba pasando Sandoval con unos documentos en sus manos, iba leyéndolos mientras caminaba con prisa, corrí para alcanzarlo-Oiga jefe disculpe, quien es la niña naranja? - El hombre frenó de golpe su caminata haciendo que sus zapatos rechinaran contra en piso.

San: Que sabes? Quien habló de la niña naranja? —Estaba levemente alterado.

A: No lo sé, Raquel me comentó que hoy vienen a visitar a la niña naranja y Rizos dijo algo sobre que hoy venían y tenía que ayudarla.

San: Veía a Andrés a los ojos, comencé a reir-Hijo creo que tengo que recordarte que estas es un lugar donde las personas piensan que una piedra tiene vida y otros piensan que son animales, la niña naranja es una amiguita que Raquel se inventó en su cabeza cuando entró aquí, en cuanto a Rizos culpa a alguien por meterla aquí, pero no comprende que es por su bien, alguna otra pregunta Andrés?

A: No jefe.

San: Bien, hoy tengo una tarde ocupada así que si pasa algo comunicaselo a Julia-seguí mi camino.
...........

Z: Aaah, aaah aaah, que te pasa por qué paras?

H: Sabes que día en hoy?

Z: Emm martes.

H: Zulema hablo enserio, hoy se cumplen 20 años desde...

Z: No quiero hablar quiero follar-Lo tomé del cuello uní nuestros labios, pero Hierro se separó nuevamente-Bien-lo empujé y bajé de la mesa, acomodé mi falda y salí de la oficina, caminé hacia el escritorio de Saray mientras acomodaba mi cabello.

Sar: Pero como que no puedo ir a ver a mi esposa, que va ya un año coño, tengo el derecho de verla!, pos si deme el número del director quiero hablar con el-En ese momento Zulema colgó la llamada- Que te pasa mora?

Z: Que te pasa a ti, estas trabajando Saray, tus gritos se escuchan por toda la empresa, con quien hablabas?

Sar: Estaba tratando a ver si podia ir a ver a Rizos.

Z: Al manicomio?-Dije mientras comía unas papas que estaban en el escritorio.

Sar: Comadre, no lo llames así suena feo, psiquiatrico mejor.

Z: Vale, casa de locos-reí y la gitana volteó los ojos

Sar: Y como te sientes hoy? Ya son 20 años.

Z: Sacudí el condimento que quedó en mis manos, trague y hable-Duele mucho-dije sarcasticamemte.

Sar: Joder Zule, no eres la misma, eres más seca, menos humana puedo decir.

Z: No exageres Saray-En ese momento Hierro apareció.

H: Todo listo, vamos cariño.

Sar: Ole, ole, ole donde van los tortolitos?

Z: Ya lo sabes cada dos meses papá va a visitar a su hermano, lo llevaremos, hasta mañana gitana.

Sar: Adiós-Tomé el teléfono nuevamente para intentar visitar a Rizos
.......

El día transcurrió normal, Rizos aún dormía, Raquel gritaba "Hoy vienen a verte" a la pequeña estructura, cuando era momento de entrar, fui por Raquel.

A: Es hora de comer vamos Raquel- Esta se arrodilló en el piso y me hizo señales para hacer los mismo.

Ra: Mira mira friend, van llegando.

Una camioneta negra con vidrios polarisados y sin placas se estacionó a la par de la estructura, como estábamos arrodillados no nos podían ver, el chofer se bajó y corrió a abrir la puerta de atrás, tenía un uniforme, algo normal, la gente que viene a visitar a sus familiares la mayoría tienen chóferes y coches de ese tipo pero entran por la entrada principal no por ahí, de primera se bajó una mujer de cabello negro, le llegaba un poco más abajo de los hombros, traía una gabartina roja, unos leggins negro, unas botas largas y de tacón negras, además traía lentes de sol, algo raro porque ya el sol se había ocultado, después bajo un hombre como de mi edad con traje entero y un maletín en su mano, lentes de sol también, por último el chófer ayudó a un anciano a bajar de la camioneta, usaba bastón y le costaba un poco caminar, el hombre de traje tomó la mano de la mujer y entraron al "almacén" raro nadie puede entrar ahí, el anciano a su paso también entro.

Ra: Se va a poner contenta-comencé a reir a los dos segundos estaba seria-Vamos tengo hambre-me levante y fui al comedor.

A: Quede solo observando la camioneta, era algo realmente extraño, pero supuse que era una familia que no pudo llegar a las horas de visita y como Sandoval es un hombre comprensivo les permitió venir a esta hora no le di más importancia y fui al comedor.

Z: Entramos en aquel lugar asqueroso, olia asqueroso, todo era asqueroso, Sandoval nos estaba esperando en una pequeña oficina, entramos y tomamos asiento-Ya sabes a lo que vinimos, llevame con mi hermana.

Todo Por TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora