Hinata Hyuga se mudará al distrito Uchiha cuándo su padre y su hermana mueren en un ataque al clan Hyuga, mientras el misterio del ataque es resuelto, su padrino Fugaku Uchiha se hará cargo y la protegerá dentro de su clan.
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Se encontraba batiendo un pastel a lado de Kushina, la última semana la había pasado en la casa del Hokage y su familia ya que Mikoto y la pelirroja habían decidido que era lo mejor para ella, aunque sea por un tiempo. —¿Cuando regresa Naruto Kun de su misión?— Preguntó la peliazul con un notorio carmesí en sus mejillas.
Kushina la miró con una sonrisa en su rostro, pues sabía lo mucho que ama esa chica a su hijo, —El regresará mañana, eso me dijo Minato— Hinata asintió y siguió batiendo, —Mi niña tengo que ir a la tienda a comprar algunas cosas para decorar el pastel, ¿me acompañas o me esperas?—
Hinata asintió y se ofreció a ir ella misma, dijo que volvería enseguida y tras recibir una lista con los ingredientes por fin se marchó rápidamente, "Todo hubiera sido mejor si mis padrinos hubiesen sido Minato Sama y Kushina sama", —No tendría que vivir con ellos— dijo en voz baja refiriéndose a los Uchiha. Aunque Mikoto le caía muy bien no podía decir lo mismo de su familia.
—Mira nada más a quien tenemos aquí— dijo una voz tras de ella cuando regresaba a casa luego de hacer las compras, —¿Porque nos abandonaste Hyuga?— era Shisui , uno de los Uchiha.
Hinata trató de ignorarlo y seguir su camino pero este la hizo detenerse cuando la tomó por el brazo, —Sueltame— se liberó con brusquedad del apretado agarre, —No tengo tiempo para tus tonterías—
—Escuche a mi tía Mikoto y a mi tío decir que pronto volverás al distrito Uchiha— aunque Hinata siguió su caminó el tomó lugar a su lado para ir juntos y molestarla un rato, —¿Nos extrañas?—
Ella mantenía su mirada al frente mientras escuchaba las tonterías del Uchiha, —Si extraño a una persona, solo a una y creeme que no eres tu—
Shisui frunció el ceño y luego sonrió con burla, —Hoy estas muy altanera Hyuga— la tomó por el brazo y la jaló hacia otra dirección desviandola de su rumbo, —Te voy a mostrar algo—
La ojiperla se resistía pero era demasiado fuerte y rápido, cuando menos pensó ya se encontraba en las afueras de Konoha, —No quiero ir contigo—
—Ya llegamos Hyuga— se detuvieron en lo alto de una cascada, ella retrocedió un par de pasos pero aún así no dejaba de ser un paisaje hermoso coloreado por agua, plantas y algunos animales, sin duda la naturaleza es hermosa, —¿Verdad que es hermoso?— ella asintió y el se sentó sobre el suelo mirando hacia enfrente donde caía el agua.
—¿Porque me trajiste aquí?— Preguntó con curiosidad, ella aún cargaba las bolsas, —Debo irme, estamos preparando un pastel para Naruto Kun cuando llegue de su misión—
