Inseparables.

Capítulo 14

llevaba toda la noche sintiendo aquel dolor insorpotable, no hubiera sido por Stefan, Elena se hubiera retorcido de dolor sin nada de ayuda. Le pasó las manos por el pelo, adorando como dormía. Quería meterse en su sueño aunque estuviera mal. Stefan era una persona honrada, no era típico de él, pero desde que volvió, ella se volvió algo impulsiva sobre la relación entre Cassidy y Damon, si a aquello podía llamarsele relación. Cerró los ojos con profundidad, suspiró profundamente, poco a poco se iba centrando en ella.

Estaba en casa de los Salvatore, su propía casa, Elena estaba en la chimenea, notaba como su presencia no se sentía, como estaba solo de observación. No podía hacer nada. Miró que la puerta se abrió, viendo como Cassidy entraba con Damon. Se levantó de una, mientras Stefan se alejaba a un lado contemplado la escena. Elena la miró como si el diablo la hubiera poseído. 

- Vaya, llegaís pronto.- le dijo sin mucho ánimo.

- Sí, la cena se ha echo corta. Los Lewis eran muy símpaticos. - le miro sonriendo, como siempre lo hacía. - ¿y Stefan? - le preguntó dejando el abrigo a una lado. Llevaba colgado del cuello un colgante que le era muy similar a Stefan.

- Con que le se lo vas regalando a todas, ¿No?- se puso las manos en la caderas, estaba enfadada. Tenía cara de asesina. 

- Elena, si con todas te refieres a mi madre, si todas.

¿Su madre? ¿En que universo alternativo estaba viviedo? 

Stefan rodeaba aquella escena, era de locos ver a Elena de esa manera. Cassidy no se inmutaba, no decía nada solo se sentó ymiró como discutían, estaba muda. Damon y Elena empezaron a decirse las peores palabras que existan, incluso le tiro un vaso cerca de cabeza. En aquel momento, Cassidy se levantó, poniendose delante un Damon algo dañado. En un segundo, Elena estaba con una estaca clavada en el corazón, muriendose por dentro. ¿Pero qué? A eso era a lo que le tenía tanto miedo: a la muerte y más si provenía de ella. Unos gritos lo desvelaron de aquel sitio. Elena estaba sudorosa, revolviendose de dolor. La lenvantó moviendola de un lado para otro. 

-Eh, eh, Elena. Tranquilizate.

La arrimó contra pecho mientras ella rodeaba su cintura con sus brazos. Estaba con los nervios a flor de piel, aquel sueño cada noche la mataba y nunca mejor dicho. No quería irse de aquel lugar, de aquella vida sin no haber arrancado a Damon de su propia prima. Estaba con Stefan por el mero echo de que le hacía sentir bien pero no lo amaba como a él. Ahora era el momento de alejarla de él, sería un camino dificil pero ella lo conocía más.

Al terminar de arreglarse y ver que todo estaba bien, Stefan decidió volver a casa.

- Espera, te acompaño. 

- Mirate, necesitas reposo.- le dijo preocupado.

- Necesito respirar.

Conocía a Elena demasiado cabezota como para ahora le decirle que no. Decidió usar su coche, en medio del camino le dio por pensar. ¿Qué había sido de Cassidy? Tenía que volver a casa, estar con Jeremy, dentro de poco necesitaría su ayuda para la celebración de los años 80 en el instituto. Cuando llegaron, Elena se bajó del coche la primera, todo le olía mal para ella. 

xx

Se revovió en la cama con la luz del día, tapó sus ojos como los brazos le dejaban. MIró a todos lados reocordando aquella noche, no sabía ni donde se situaba hasta mirar al otro lado de la cama. Y ahí estaba durmiendo, como si en su vida hubiera roto un plaot peor era de los de vajilla entera. Dormía placidamente y ella solo pordía miarlo, cada respiración, cada movimiento, aquel pelo revuelto que había acariado aquella noche. Todos los recuerdos eran un calambre en cada parte de su cuerpo. 

- Esta mal espiar a las personas mientras duermen.

De una sola, el color de sus mejillas eran demasiado rojo, ¿Cómo?¿Qué? Se tapó la cara con las sábanas de la cama, estaba que se moría aunque hasta lo que le tapaba producía su olor. Oyó sus risas desde fuera, poco a poco fue destapandose hasta quedarse el lo que a visión la dejaba. Estaba apoyado sobre sus codos, mirandola fijamente, ¿Qué prentedía, intimidarla? Por que lo estaba consiguiendo. Damon la miraba o, más bien, la admiraba. Sus ojos profundos estaba en constante sucesión con los suyos. No sabía como actuaría con ella pero los dos tenían ganas de los mismo. En decimas de segundo, Cassidy estaba sobre él, besandose sin freno alguno. Sus brazos pasaron por su cintura, atreyandola de nuevo hacía él. Los besos de la chica pasaron por su cuello mientras acariciaba con sus manos cada parte de su cuerpo. Entre toda aquella excitación, se oyeron los ruidos en el piso de abajo.

- Cash.- le dijo separandola un poco. Ella apoyó su frente en la suya. Agarró su cara con sus manos.- Creo que tenemos visita.

La chica se hundió en su cuello, no quería irse de aquella cama, no quería irse de su lado. Al final se dieron por vencidos, ninguno quería tenían que hacerlo. Al bajar, vieron a Elena sentada en uno de los sofás mientras Stefan se servía un vaso. Elena se levantó sobresaltada, alterada y cabreada; Stefan notaba todo aquello de ella. Miró como los dos bajaban a la vez. Se miraron a los ojos de nuevo.

- Cassidy, ¿ Dónde estabas?Jeremy te necesita. - le dijo acercandose a ella.- No se por que te pregunto eso, es algo obvio.

Ahora sí que se estaba cabreando, Elena era una persona muy directa, que las lanzaba todas como caían. Quería estrujarle el cerebro en aquel mismo momento pero no era plan de ser la mala. Se decidió por hacerle caso. Salieron de la casa, viendo como los Salvatore salían detrás de ellas. Antes de subir, Cassidy renia un plan B. Su pirma sabía joder, pero a ella se le daba mejor.

- Elena, espera un momento. 

Antes de abrir la puerta alguna delas dos, Elena se apoyó en el coche mirando el porque de que se le olvidaran las cosas. En momento, Elena estaba con la cara echa una furia. Cassidy estaba besandose con Damon delante de ellos. Le dabá igual todo pero su orgullo era igual que el de una Petrova. Cuando se separaron con las respiraciones alteradas, Damon sonrió así mismo viendo las escena. Cassidy volvió a alejarse hasta el coche, antes de subir, Damon le guiñó el ojo. Ninguna pensaba perder aquella batalla. 

xx

- Venimos por mi prima.

- Dana esta metida en aquella tumba, donde debía estar.

Bonnie llevaba todo el día con aquel anillo, haciendo lo imposible por entenderlo.

- Yo puedo ayudarte con eso,

Elijah entró por la puerta mientras Katherine lo miraba andar. 

No podía ser, acaba de entender como miraba el anillo.

- Tu quieres la vuelta de los tuyos. Yo la de los mios. Hagamos un acuerdo.

Se sentía como sin saber que responder. ¿Le decía que si?¿O no? Tenía miedo de las repercusiones. 

-¿ De que trato hablamos?

- Quiero a mi madre de vuelta.