UNTITLED - woosan

IRA

Choi San

Abrió los ojos como un perro rabioso en cuanto visualizó a su oponente.

Yo tardé un poco más en verlo y reaccionar, más que nada porque esto era el pan de cada día, pero al oír la exclamación del público y el estado iracundo de Sungwoon, no pude hacer otra cosa que mirar qué tenía de especial su oponente.
La rompedora canción inundó mis oídos de pronto, y mis rodillas me habrían fallado de no ser porque me sujeté con disimulo al brazo de Jisung.

Era tan imposible como cierto.

Lo único que podía pensar era en una palabra: "no". Un "no" rotundo daba vueltas en mi cabeza. Mi pecho se movía violento al compás de mi acelerada respiración. Jung Wooyoung se encontraba frente a Sungwoon dentro del círculo, provocándome un estado de exaltación e ira tan extraño que no supe clasificarlo.
Mis pupilas danzaron entre las personas, como esperando que alguien viniese y me diese una torta para despertarme de este mal sueño.

Pero eso nunca sucedió, y para cuando quise darme cuenta, el cuerpo de Sungwoon se había abalanzado contra el del pelinegro antes de que el réferi pudiera dar la señal.

-¡¿No es ese Jung Wooyoung?! -gritó Jimin, eufórico- ¡Mátalo!

Le miré horrorizado, como si hubiera dicho el pecado más terrible que mis oídos habían escuchado nunca. ¿Por qué mis amigos le conocían?

-¡Ese hijo de puta...! -exclamó Jungkook a mi lado. Hasta él, quien solía ser tranquilo, había estallado.

Joder. Joder. Joder.

-No va a salir de aquí con vida. Al muy cobarde le ha costado dar la cara -masculló alguien.

No entendí nada. Mis pupilas viajaron nerviosas entre las personas, quienes parecían dispuestas a dejarse la voz en animar la pelea y forcejeo que estaba teniendo lugar en el medio. Me llevé las manos a la cabeza, totalmente impotente y en completo shock.

-Pero... -habló una voz dirigida hacia mí- ese... ¿no es tu amigo?

Volví la cabeza hacia esa voz, encontrándome el confuso rostro de Donghyun. La ansiedad me atacó repentinamente antes de que pudiera balbucear una respuesta, y no pude más.
Alcé el brazo y empujé hacia un lado con toda la fuerza posible el cuerpo de Jisung, que me bloqueaba el camino.

Sungwoon se encontraba encima de Wooyoung, agarrándolo por el cuello de su blanca camiseta, algo que una persona como yo no pudo tolerar. Era mi amigo o él, y en vez de perder el tiempo pensándolo, dejé que mi cuerpo actuara por sí solo.
Por un segundo que pareció transcurrir a cámara lenta, mis ojos se encontraron con los de Wooyoung fugazmente, dejándome una preciada vista de la dureza de su mirada.

Cuando levanté a Sungwoon del suelo agarrándolo por la nuca, la gente aumentó sus gritos. Ni siquiera el réferi se pronunció; allí todos disfrutaban del espectáculo. Mi amigo se sorprendió tanto, que se quedó inmóvil frente a mis inexpresivos ojos y mi fiero agarre.

-¿Qué... coño... haces... San? -habló, enseñando los dientes como si fuera un puto animal.

Noté movimiento detrás de mí y supe que Wooyoung se había puesto en pie. Me di el permiso de ladear la cabeza para mirarlo sin soltar a su contrincante.

-Suéltale -sonó imperativo- Y fuera de aquí.

Se pasó el dorso de la mano por la boca para limpiarse el reguero de sangre que se escurría por sus gorditos labios.
Tras esto, Sungwoon pareció reaccionar y me empujó cuando yo estaba demasiado ensimismado en el chico. Fue entonces cuando el caos se hizo inevitable.