|Capítulo 4|

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Bella se encontraba en su habitación hablando con su madre sobre su primer día de clases, Bella le había hablado a su madre de mí y hace unos días antes hable con ella y nos llevamos muy bien así que ahora somos como amigas. Cuando estaba por terminar mi tarea escuchó el grito de Bella así que tomó a Adela en mis brazos y entró a la habitación, puedo ver que estaba lleno de libros y cuadernos, me siento en su cama y puedo mirar que es una video llamada. Ella al verme me saluda

— Mamá ¿y tu celular? — preguntó Bella.

Okay no te rías, no perdí mi cargador se fue corriendo, literalmente aborrezco la tecnología —dijo René riéndose

— No creo que odie a la tecnología, además es muy útil — mencione mientras mecía a la bebé

—Te extraño mamá—dijo Bella

— Te echo de menos Bella y quisiera conocerte en persona Diana— mencionó —Ay mi hija, yo también las extraño pero cuéntame de tu escuela, qué tal los chicos ¿son guapos? —Preguntó René— ¿Son buenos con ustedes?

— Han sido amables... —respondió bella de manera lenta.

—Tengo que admitir que son guapos... algunos pero no me interesa ninguno —mencioné de manera rápida pero segura.

Ouh... eso no suena bien ¿Cuéntame que paso Bella?.

— Eso no importa —dijo Bella tirando su cuaderno hacia el frente que por no me golpeo a mí —tengo mucha tarea, hablamos luego.

Las quiero mucho, a los dos por qué estoy segura de que Diana encontrara a su amor verdadero

— Gracias por el comentario René —dije para después mirar a Bella con una pequeña sonrisa — ¿Qué pasó Bella? Te noto algo enojada

— No lo sé... ese chico Edward se comportó extraño cuando estaba sentada a su lado —explicó Bella mirando a Adela y rascándose la cabeza en señal de molestia

— Si lo sé, lo observe desde mi lugar — dije— tal vez se sentía mal o estaba pasando por un mal momento

— ¿Tú crees?

— No en realidad, habla con él mañana y pregúntale cuál es su problema y listo pero si no te responde iré yo misma a enfrentarme a él y no terminará lindo —ella no sabía cómo me podía cuando me enojaba así que es mejor que no lo sepa

— Si... eso haré —dijo Bella asintiendo con la cabeza convencida.

— Bien, me gusta hablar contigo Bella pero tengo que ir a hacer la tarea de Biología además de que a Klaus no le gusta estar solo por qué se pone a llorar—mencioné sonriendo mientras me paraba y acomodaba a Adela

— A mi igual —contestó Bella sonriendo levemente— Ya, ve a tu habitación por qué sino Klaus empezara a llorar

— Bueno, iré a terminar mi tarea y cuidar de mi hijo. Nos vemos


(...)


Pasaron los días y Edward no apareció en ninguno de ellos, solo su familia. Bella se enfadó por eso y a mí me causaba algo de gracia pero no le moleste, estaba más preocupada en mí ya que en estos últimos días sentí que algo iba a pasar pero no sabía si era bueno o malo.

En estos días me la pasaba mucho tiempo con Alice y Jasper, con él nos empezamos llevar bien aunque era algo raro pero eso no me importaba ya que yo también era rara.

En aquella semana las cosas se ponían extrañas, estaban ocurriendo ataques de animales en el condado de Mason, lo cual para mí sonaba algo extraño ya que según me enteré no pasaban estas cosas antes así que me pone algo nerviosa, tengo miedo de que les pase algo a mis hijos o a mí. Tengo miedo de que me estén buscando.

Intente que Rosalie hablara conmigo pero ella siempre me mira raro y se aleja de mí al igual que Edward, intentó hablar con él sobre el tema de Bella pero siempre me mira mal, no sé si es por qué no siente que soy diferente o algo anda mal en mí. Además estos últimos días los bebés han demostrado muestra de magia al igual que yo, siento que hay muchas cosas que no sé sobre mis poderes pero en algún momento lo averiguare.

Pero hoy era un día diferente ya que tenía que ir a la escuela como de costumbre pero Bella estaba enferma así que tendría que ir sola pero lo bueno es que Bella cuidaría a mis hijos. Y como la misma rutina desayune algo y me fui a la escuela

Al llegar a la escuela, estacione la camioneta en el lugar habitual y bajó de ella, saludó a mis compañeros de clase y fue hacía el establecimiento pero justo antes de entrar se interpuso Alice.

— Hola Diana, ¿Cómo estás?—saludó Alice con una sonrisa y de paso me abrazo

— Hola Alice, estoy bien como siempre, ¿Qué tal tú? —dijo Diana amablemente.

— De maravilla, ¿Te sientas con nosotros en el almuerzo? —le preguntó Alice. Eso me pareció algo raro

— ¿Estás segura?, ¿No molestaré? Digo porque veo a dos de tus hermanos no les agrado —dije algo insegura

— Para nada, quiero que conozcas a mis hermanos, estoy segura que les caerás bien—sonrió Alice. Lo pensé por un momento y en mi mente me vino la cara de Rosalie y Edward, ellos me odian pero tengo que ver cuál es su problema conmigo, miro a Alice y le sonrió para finalmente decir:

— Bien, lo haré. Te veré allí.

Las clases llegaron como bomba, tareas por doquier y proyectos. Iba corriendo para llegar a clase de matemática pero en ese momento tropezó con un chico.

— Lo siento mucho, no era mi intención —dije rápidamente pero me quedé tranquila al ver que eran Alice y Jasper

— No pasa nada —me dijo con una media sonrisa— eres Diana Bennett, ¿Verdad?

— Sí, soy ella creo que ya nos presentamos antes —respondí nervios y miré como asentía— pero si quieres me presentare de nuevo Soy Diana, ¿Tú eres?

— Jasper Cullen, señorita —inclinó levemente su cabeza para presentarse— he oído mucho de ti.

— Eso ya es normal en estos días, a cada lugar que voy siempre hablan de mí y es algo incómodo —respondí con una sonrisa nerviosa pero mis nerviosismos desaparecieron rápidamente haciendo que una ola de tranquilidad pasara.

— ¿Te diriges a la clase de matemáticas? —preguntó él.

— Sí —contesté de manera sencilla.

— En ese caso, vamos juntos —le dijo Jasper con una media sonrisa

Asentí y nos dirigimos los tres juntos a la clase de matemáticas. Que aburrido son las matemáticas. 

La Bruja OriginalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora