Capitulo 3

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Unos días después del evento la vida de Alice era tan rutinaria como la de cualquier estudiante. Aquel día en especial, estaba en la biblioteca poniéndose al día con una de las asignaturas hasta que se hiciera la hora de ir al café a cumplir con otra jornada de trabajo.

En un momento se sintió observada y al mirar a la izquierda, un chico en la punta opuesta de la mesa la estaba mirando. Cuando sus miradas se encontraron él sonrió y ella imitó el gesto, parecía un buen chico y los libros frente a él más sus lentes para leer lo hacían ver como un hipster bastante guapo.

Bajó la mirada un instante y al regresarla hacia el chico este la seguía mirando, solo que ahora estaba dispuesto a acercarse hablar con ella. Pero algo más llamó su atención y lo hice volver a su asiento con la cabeza gacha. Alice miró a la derecha y entendió la razón. Paradas junto a ella había tres chicas, la del medio destacaba y cómo no hacerlo si era una de las más conocidas en el campus.

-¿Cómo estás, Alice?- preguntó la castaña con una sonrisa falsa.

-¿Qué quieres, Stacy?- repreguntó fastidiada, nunca habían hablado, sin embargo la una sabía de la otra porque así era en Columbia.

-¿Por qué supones que no puedo acercarme a charlar simplemente?

Alice la escaneó de arriba abajo al igual que a las dos chicas detrás de ella como si fueran sus custodias, vestidas con los mismos colores que Stacy.

-Porque dudo que tengamos un tema en común teniendo en cuenta tu cuadrada cabecita.- contestó volviendo a poner su atención en el libro de texto.

-En eso estamos de acuerdo. Hasta hoy no pensé tener interés por lo que hacían los yonkis de comunicación pero heme aquí hablando contigo.

Volvió a mirarla, ahora molesta por lo que estaba diciendo. Estaba harta de escuchar a los estudiantes de ingeniería hablar mal de quienes elegían las ciencias sociales.

-Ve al punto. Por si no lo notaste estoy ocupada- señaló el libro sobre la mesa y las hojas alrededor.

-Escuché que fuiste al evento de beneficencia de los Waldorf hace unos días.- el rostro de Alice se mantuvo inmutable. –Del brazo de Nate. ¿Cómo es posible?

Sus labios se estiraron ante la pregunta, hasta formar una encantadora sonrisa de superioridad. Claro que Stacy conocía a los Waldorf, pensó al ver su expresión de intriga. Ella era una ricachona del Lado Este, solo no entendía sus intenciones.

-¿Te sorprende que pueda andar con las personas que frecuentan tu mundo?- Stacy asintió. –Pues sorpresa. Nate me invitó luego de conocernos en el cumpleaños de mi tía. Ella y su padre son buenos amigos.

-¿De verdad?- preguntó fascinada una de las custodias de Stacy.

-Sí. Y es realmente encantador, las cosas que dicen de él ni se le acercan al maravilloso hombre que es. Pasamos una... gran noche- y se abanicó con la mano el rostro. –Fue divertido estar con él, tenemos mucho en común.

El rostro de Stacy estaba rojo de enojo y por dentro verde de envidia.

-¿Te acostaste con el luego de la fiesta?- Alice levantó un poco más el mentón. –Eso es bajo incluso para ti, así no te volverá a llamar.

-¿Crees que me importa? Él tuvo una buena compañía y yo conseguí una noche de champaña y buen sexo. No necesito verlo de nuevo. Deberías entender que no todas tenemos tu sueño de princesa púber, Stacy. Esto es la universidad, aquí se disfruta el momento.

Las custodias de la castaña miraban a Alice como si hubiera cavado su propia tumba y metido dentro. Stacy, por su parte, masticaba todo el enojo mientras pensaba alguna frase inteligente para salir victoriosa pero tenía la idea de golpearla entre ceja y ceja.

Strawberry Lipstick [YUNGBLUD] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora