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Los recuerdos de esa noche aun estaban en su mente, pero eso  no la ayudaba ahora, hacia dos semanas desde las celebraciones de año nuevo, Jun Pyo había regresado a Estados Unidos, Jan Di había estado triste pero Yi Jeong la había alentado para que siguiera adelante, según supo por Ga Eul, y la misma Jan Di después de unos días, el alfarero deseaba que la pelinegra realizara terapias como las suyas para poder volver a nadar, y al parecer el pronostico medico era prometedor, no podría realizar una carrera en la natación, pero al menos podría nadar cada que lo deseara, a diferencia de en el presente, ella conocía gran parte de las historias detrás de las chicas, y uno que otro detalle de las historias de los chicos, sabia de la lesión de Yi Jeong, también de los negocios de Woo Bin, la madre Jun Pyo no quedo olvidada y el como el abuelo de Ji Hoo regreso a su vida específicamente cuando Madam Kang era un verdadero problema, suspiro por… que decima vez? No estaba segura, solo sabia que necesitaba despejar su mente, los libros no la estaban ayudando y la falta de su amiga menos, ahora ella debería estar…. Donde dijo? China? Quizás… ella no lo recordaba claramente, su padre aun no regresaba, había resultado que en Inglaterra había demasiado para hacer, el viaje duraría quizás un mes. Otro suspiro abandono sus labios cuando decidida tomo su bolso y luego sus llaves, el bullicio la ayudaría a olvidar sus pesares.
 
 
La librería estaba casi desierta a esa hora, los domingos no todos se levantan temprano, sus ojos corrían por todos los libros de arquitectura,  algún día ella seria parte de eso, crearía proyectos increíbles, seria una de las mejores en el país, solo necesitaba tiempo, sin notarlo termino en el área infantil y un cuento estaba en sus manos. “la sirenita” ella conocía ese cuento de hadas, claro que si, su madre se lo leía una vez a la semana, si no recordaba mal era los miércoles, justo después de que su padre le entregara su hermoso ramo de rosas blancas, sonrió sin poder evitarlo,  dio un pequeño brinco cuando alguien toco su hombro, al voltear encontró la brillante sonrisa del príncipe blanco.
 
-          Ji Hoo – dijo sorprendida – me asustaste, como estas?

-          No era mi intención, lo lamento – se disculpo, aunque ella no vio desaparecer esa sonrisa divertida en ningún momento – que haces por aquí? Y a esta hora – añadió fingiendo sorpresa al mirar su reloj

-          Cállate – susurro ella golpeando levemente su hombro, y soltó un suspiro – ha sucedido tanto últimamente, mi mente esta trabajando muy rápido, necesitaba distraerme y de alguna manera termine aquí – comento

-          Y crees que un cuento te ayudara con tus problemas? – pregunto divertido

-          No – sonrió ella – pero al menos se que esto – dijo alzando el libro en sus manos – es una completa mentira – añadió devolviéndolo a su lugar – creo que hoy en día me gusta mas la versión cruel y despiadada – murmuro – me ayuda a recordar que ahí cosas que no debemos hacer  por nadie – términos sin alzar la vista

-          No siempre es así – contradijo el Yoon -  solo debemos encontrar a la persona correcta – añadió mientras sujetaba la barbilla de la castaña y hacia que lo observara – y con esa persona podemos escribir el mejor cuento de Hadas que jamás se a escrito – termino sonriéndole tierno y jalándola fuera de la tienda
 

 
Yoon Hae Ra estaba a solo unos segundos de lanzarse sobre Baek Seung Jo, hacia aproximadamente una hora habían llegado al hotel Marriot, China. A su lado Song Woo Bin miraba sonriente al matrimonio,  la puerta se abrió, dejando ver a una delgada mujer de negro y corto cabello, la sonrisa del mafioso desapareció y su expresión paso a ser una seria y fría. La joven que acababa de entrar le dedico una mirada de indiferencia que fue captada por todos los presentes y el vio que Mei Lian sonrío satisfecha.
 

-          Nos honra infinitamente la intención que constructoras Sim tiene de invertir en nuestra cadena de hoteles – dijo con falsa modestia la esposa de Baek  - pero el grupo JW ya nos había realizado una propuesta, además sinceramente no tenemos intenciones de  construir mas sedes en este momento.- Yang Mei  Lian golpeo el pie de su esposo

-          Espero que tengan buen regreso – dijo frio sin apartar la vista de la castaña, no dijeron nada mas, simplemente se levantaron y se fueron.
 

El restaurante estaba casi vacío, aun así agradecía haber pedido un comedor privado, sino, ya los hubieran hecho por las quejas de la Yoon. Hae Ra lo miraba furiosa y el solo estaba ahí tranquilo como si nada sucediera, había perdido la estupenda oportunidad de decirle sus verdades al poco hombre ese porque el Song no la había dejado

 
-          Por que no me dejaste golpearlo! – reclamo nuevamente – ni siquiera me dejaste hablar!, además cual era tu plan? Ser inversionista? No resulto! – se quejo sin saber como volvería a acercarse al idiota de Seung Jo  

-          Primero tranquilízate – dijo el Song – todo salió tal como esperaba – dijo sonriendo

-          De que hablas? – pregunto

-          Era muy obvio que esa mujer iba tener vigilada a Oh Ha Ni, y por ende concia nuestra relación con ustedes – aclaro – lo que nos lleva a que aun si le ofreciéramos el triple de lo que tiene…

-          Diría que no – termino ella y lo vio asentir – pero esa mujer, la inversionista – aclaro – te miro de una manera muy fría – susurro un poco desconfiada

-          Es alguien que “no tiene buena relación con el F4” – dijo haciendo las comillas con sus dedos

-          Quien…  - fue interrumpida cuando abrieron abruptamente la puerta

-          Me debes una buena explicación Song – dijo seria la mujer que horas antes había estado en las misma sala que ellos – y agrégale unas copas de vino – añadió  con una enorme sonrisa en el rostro

-          Eres una excelente actriz – dijo el mafioso levantándose de su lugar y dándole un fuerte abrazo -  ella es Yoon Hae Ra- presento el chico y la menor hizo una reverencia aun confundida – mi querida Hae Ra – llamo el mafioso – ella es la Mono – presento divertido – fundadora y gerente de las compañías JW

-          Se te olvido decir mejor amiga de los F4 – soltó feliz – ahí esta lo que necesitabas – añadió lanzando una carpeta sobre la mesa
 

 
Ese día había resultado perfecto, Yang Mei Lian no era una mujer muy astuta, al parecer, ella creía en todos los chismes de las revistas, y por eso desconocía la verdadera relación entre los F4 y Ha Jae Kyung, la prensa solo distorsiono su historia y la vendió como la relación mas conflictiva en el mundo de los conglomerados, por eso cuando el presento  su propuesta,  sabia que la rechazaría, ellos eran cercanos a la Oh, pero por la “mala” relación entre JW y Shinwa no dudo en acetar a Ha Jae Kyung entre sus inversionistas, sin notar que al vender esas acciones ella estaba entrado por su propio pie a lo que seria el infierno!

Eres TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora