- 31 -

971 110 11
                                    

Oh Ha Ni y Yoon Hae Ra ingresaban a un restaurante poco concurrido pero acogedor, en el interior Yoon Young Soo las esperaba para tener una seria conversación con ambas, había cosas que no quedaban ocultas para el, y necesitaba explicaciones antes de actuar. 

-Buenas tardes abuelo – saludaron ambas 

-Mis niñas, las estaba esperando – sonrió el mayor

- Siento el retraso, pero cierta señorita nunca se decide por que ropa debe usar – reprocho Ha Ni 

-Oye! – se quejo la Yoon  -debía verme espectacular para mi abuelo – se defendió 

-Lo importante es que ya están aquí – intervino el mayor – tomen asiento, ya pedí por ustedes, espero les guste – sonrió 

-Gracias abuelito – respondió Hae RA mientras ambas se sentaban frente a el. – dinos, que es eso que nos querías decir? 

-Chicas, ustedes siempre contaran conmigo, lo saben – ambas asintieron – pero si no me cuentan las cosas como puedo ayudarlas? – se quejo el mayor 

-De que hablas abuelo? – pregunto la Oh 

-Cariño, porque no me contaste que Seung Jo te abandono dejándote embarazada? – el rostro de Ha Ni perdió el color y la Yoon simplemente la tomo de la mano sin saber que responder. 

-Abuelo… - Ha Ni sintió como la voz se le quebraba – yo lo siento 

-Ha Ni, esto lo sabe Gi Dong? – ella negó sin atreverse a hablar – porque? 

-No quiero causarle vergüenza – murmuro ella mientras las primeras lagrimas corrían por sus mejillas 

-Como puedes pensar eso – dijo el mayor 

-Abuelo,  lo que vivió Ha Ni fue un proceso muy doloroso, tiene miedo de que el tío Oh la rechace – explico despacio la Yoon 

-Mi niña, siempre las apoyare en todo – dijo mientras las tomaba de las manos – no estoy aquí para regañarlas por lo que paso – aclaro – las quiero regañar por no habérmelo dicho en el momento, si yo lo hubiera sabido ese tipo ya estaría muerto – añadió con voz sombría 

-Abuelo! – se quejo la Yoon 

-Nadie puede lastimar a mis bebes de esa manera y largarse, yo lo hare pagar! – sentencio 

-No te preocupes, ya estamos en eso – aviso la Yoon 

Después de un rato, al fin las cosas se calmaron, el abuelo Yoon no estaba molesto o desilusionado de alguna de ellas, el simplemente estaba dolido por no haber podido actuar a tiempo, quería que Seung Jo pagara, no podía lastimar a una de sus pequeñas y salir ileso de todo, pero lo mas importante el deseaba que Gi Dong supiera todo, siempre y cuando la menor estuviera preparada, después de su almuerzo y una agradable platica los Yoon se fueron juntos, tenían negocios que atender, mientras la castaña se decidió a caminar para despejar su mente y aclarar sus ideas, después de un par de horas se decidió a llamar a su padre, lo sito en su departamento y opto por  contarle todo. 

Las lagrimas de Gi Dong eran silenciosas, su cara dejaba notar el dolor que sentía al escuchar la historia de su hija y la cara de vergüenza de la castaña le dolía aun mas, porque ella debia sentir vergüenza? Porque ella lo miraba como pidiendo una disculpa, ella no había cometido ningún delito, ella solo se había enamorado.  Después de unos largos minutos, el la abrazo. 

-Lo siento papa – susurro – yo no quería decepcionarte 

-Mi niña – dijo mientras le acariciaba el cabello – tu nunca me has decepcionado – aclaro – me duele el no haber estado ahí, el no haber podido consolarte y el que hayas pasado tanto tiempo sufriendo esto sin decirlo – la separo un poco para mirarla a los ojos – tu eres mi orgullo, nunca lo dudes, comprendo que estuvieras asustada, pero no tengas miedo de decirme las cosas, no estoy decepcionado o avergonzado de nada – añadió mientras volvía a tomarla en un abrazo – eres lo mas valioso que tengo y no me gusta verte sufrir, desde hoy en adelante me contaras tus penas, quiero ayudarte a superar cada tropiezo, tal como lo hacíamos antes – termino depositando un beso en su frente 

Es tarde ambos disfrutaron de su compañía, Ha Ni sentía que se había sacado un peso de encima, ahora no tenia miedo, su padre conocía todo lo que vivió con Seung Jo antes de empezar una relación y ahora sabia también como y porque HA Ni había cambiado tanto en el ultimo tiempo; ambos acordaron visitar su lugar especial y así el también se vincularía con la pequeña estrellita de su hija.

-Entonces no te regaño? – pregunto Jan Di 

-No, papa siempre me apoya – sonrió con cariño Ha Ni 

-Ha Ni – llamo Ga Eul captando su atención – que pasa con Seung Jo?  Sigues enamorada?– un suspiro abandono sus labios. 

-Seung Jo es parte de mi pasado ahora, no estoy interesada en saber nada de él, siempre será mi primer amor, pero me di cuenta que desde hace un tiempo ya no es lo mismo 

-Pero aun lo quieres? – insistió Jan Di 

- No, no lo quiero, le tengo estima, ahora se que paso realmente y aunque dolió me ayudo a superarlo – contesto segura la castaña – siento que todo esto me ayudo a ser una mejor persona y también me enseño que debo pensar más en mí.  – las chicas se conmovieron y la abrazaron.

Las cosas desde hacia un tiempo marchaban muy bien para el F4 y sus amistades, Woo Bin tenia grandes proyectos en la empresa, Yi Jeong estaba por terminar su segunda exposición internacional, mientras que Jun Pyo estaba a unos meses de terminar sus estudios y mientras eso ocurría Shinwa volvía a abrirse camino en el mundo empresarial como una gran empresa, Ji Hoo manejaba muy bien las cosas, el titulo de medicina estaba  a la vuelta de la esquina, la fundación se mantenía organizada y la clínica de su abuelo se mantenía en funcionamiento, Jae Kyung se encontraba de momento fuera de Corea, los negocios requerían su atención en Japón, la cadena de hoteles de JW marchaban muy bien, y mientras eso pasaba iba dejando en el olvido al hotel MARRIOT,  dejando a sus colaboradores desesperados, aun cuando ignoraba sus llamadas ellos no dejaban de insistir; por su parte Hae Ra estaba fascinada con su carrera, las practicas en el bufete de su abuelo la habían enamorado aún mas de su profesión, aun cuando ya no era lo único que mantenía su mente ocupada.  Jan Di estaba totalmente absorta en sus prácticas, daba las gracias a que solo faltara 1 semana para terminar; Ga Eul por su parte parecía una verdadera mujer maravilla, se dividía entre sus prácticas en un jardín infantil, sus clases de alfarería, su voluntariado (el cual compartía con Ha Ni) en una casa de reposo y sobre todo eso se las arreglaba para las citas que Yi Jeong le pedía; Ha Ni era un tema aparte, las clases para ella eran sencillas ahora que estaba en la  constructora,  sus colegas le estaban proporcionando conocimientos importantes en la arquitectura, además compatibilizaba todo muy bien, ya que mientras se desempeñaba como asistente también podía realizar los diversos trabajos e informes que le eran solicitados en la universidad. Todos los días cuando daban las 7 de la tarde HA Ni reunía sus cosas e inconscientemente una sonrisa se adueñaba de su rostro, sabia que al bajar al primer piso, justo frente al edificio estaría esperando por ella el hombre que tan especial la hacía sentir, ese que no se limitaba para abrazarla cuando lo necesitaba o que la hacia reír después de un cansado día aun cuando el suyo había sido peor, ese que la llevaba por un helado o un café, ese que estuvo con ella cuando lloro por ultima vez por Seung Jo, ese que la estaba haciendo florecer. El mismo que se estaba ganando su corazón. 

Eres TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora