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Caminando por los infinitos pasillos del colegio, dandole una pequeña y rapida mirada a las aulas, Eun-oh apuraba el paso para no encontrarse con el grupo matón de su salón.. simplemente imposible.

Sintió pasos tras suyo, oh..

-¿Adonde vas?- dijo Yongmin tomandolo por la capucha, las risas de sus amigos se colaban por sus oidos, estando atrás del muchacho. Era rutina; interseptaban a un alumno en el pasillo, se lo llevaban a la cabina del conserje y golpeaban al alumno que pasase por el solitario pasillo.

Los profesores no aportaban nada de ayuda con el tema Bulliyng en el colegio.

El dia no comenzaba bien para Eun-ho.

-Debo entrar a clases- Habló bajito, sintiendo sus piernas flajear, el siempre habia sido uno de los principales blancos del grupo.

-Sabes que hoy no es tu dia.. no te escaparas como la última vez- sus amigos se acercaron para agarrarlo y llevarlo a la cabina del conserje. Una voz detuvo todo movimiento.

-¡Oigan!- El celador se acercó- ¿Que creen que hacen? -le dio un pequeño golpe con el escobillón a la cabeza a Yongmin.-Vayan a clases, ahora.- Esperó a que el grupo de niños se fuera, miró de reojo al pequeño que seguia ahí. -Tu también- hablo con una voz mas dulce, mostrandole una pequeña sonrisa.

Un poco más tranquilo, comenzó a caminar rumbo a su aula, iria al baño en otro momento.. podia aguantarse, si.. podia.

Entró con la cabeza gacha, evitando las miradas de sus compañeros, esas que siempre estaban cuando alguien entraba al curso.

Se sentó en su banco, notando que su compañero estaba, nuevamente, dormido.

-Minho.. despierta- sacudia su brazo-¡despierta niño!- más fuerte el sacudón.

-¿Qué?- somniolento, lo miró.

-Estamos en clase, despierta.

-Pero todavia puedo dormir- susurraba mientras apoyaba su cabeza en sus brazos cruzados. Dejandose caer en el banco.

-No, porque si la profesora te llega a ver dormido, te mandarán otra vez a la dirección- hablaba de la misma forma- Además de que me canso de pasarte las tareas y cubrirte en-..

El grito de la profesora eliminó todo rastro de sueño en Minho, logrando que se enderece en el asiento.

-¡¿Otra vez durmiendo?!- apoyó fuertemente en el escritorio los libros que tenia en mano.

-N-no profesora..

La mala mirada de la profesora hacia su ser, le confirmó que no fue mandado a dirección por dos pelos.

-Entonces copie los ejercicios, por favor.

-Si, profe.

Se dió vuelta y siguió explicando la clase, Minho se giró a su izquierda para observar a Eun-ho.

Un 'te dije' se formó de forma muda en sus labios, rodó los ojos.
El resto de la hora se dedicaron a escribir y resolver los ejercicios.

ᶠⁱʳˢᵗ ˡᵒᵛᵉ

- No se olviden de organizarse con algún compañero para ensayo grupal que me tienen que traer. Tienen hasta cinco semanas para entregarlo, y no olviden el partido de hoy- Dicho todo, la profesora recogió sus cosas y abrió las puertas del salón, para ser seguida por sus alumnos y salir del lugar.

Las quejas de los alumnos empezaron a resonar en el salón, y no por el partido, no. Eso es lo que emocionaba a todos. . . A casi todos.

Asistir a estos partidos era obligatorio en el colegio, porque en parte representaban a la escuela en el lado depirtivo.

Eun-oh y Minho tomaron sus cosas y salieron del aula. Ambos al kiosco del colegio, pues, el partido era algo largo y ambos necesitaban comer algo.

Una sprite con papas fritas para Minho.

Un agua saborizada y dos alfajores para Eun-ho.

Esos bocadillos podrian mantenerlos entretenidos un rato, finjir que ven el partido y hablar entre ellos.

- Yo creo que deberiamos ir por este pasillo- Apuntó Minho, con un puñado de papas en la boca.- Es el que en estos momentos esta más vacio y liberado, en los otros seguro estan los jugadores y las estupidas niñacas que gustan del olor a chivo..- Hacia gestos con las manos.

Eso hizo reir a Eun-ho.. 'olor a chivo'. Debe lograr que su amigo deje de mirar esas novelas mexicanas y se ponga a estudiar.

Dieron media vuelta y fueron por el pasillo que sugirió Minho, jugando y riendo.

Faltaban al rededor de nueve mintuos para el partido, Minho tuvo la maravillosa idea de...

-¡MANCHA!

-¡Oye!

Empezaron a correr por el pasillo, riendo y tropesandose contra las paredes.

-¡Te toca!- dijo Eun-ho mientras su mano se posaba en la espalda de su amigo. Empezó a correr para no ser atrapado, pero chocó con algo. . . Mas bien con alguien.

 Mas bien con alguien

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762 palabras.

First LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora