El hombre tras la máscara

Capítulo 10

Por fin llegó el día del cumpleaños, Mady se estaba preparando para ésta noche. Le encantaba el vestido que le había comprado Owen, era tan bonito...

Los días habían pasado y Owen y Mady cada vez estaban mas juntos, todos los días comían juntos, iban de paseo y siempre se abrazaban, besaban e iban agarrados de las manos.

Mady se acuerda de un día en el que Owen le había confesado algo.

— Preciosa, tengo que confesarte una cosa —le había dicho Owen.

— ¿Que es? —respondió ella.

— Estoy enamorado de ti, Mady —dijo plantándole un dulce beso— ¿No dices nada? —Owen temió que ella lo rechazara.

— Yo... también te quiero Owen —dijo Mady avalanzándose a los brazos de él.

— Mi vida, eres lo mejor que pude conocer en la vida.

Y así era como Owen y ella se habían hecho novios, y por eso estaba preparándose para cuando la limusina que le iba mandar Owen la recogiera para ir a esa gran fiesta de esta noche tan especial.

La limusina la dejó justo en frente del hotel donde iba a celebrarse la fiesta, salió de ella y se dirigió hacía la puerta.

Iba con su precioso vestido y un antifaz a juego.

Buscaba a Owen por todos lados pero no lo veía, «dónde se habrá metido» pensó Mady. Estaba dándose la vuelta cuando lo vio, y no, no era Owen. ¡EL ENMASCARADO!

No se lo podía creer, allí, justo en el cumpleaños de su novio. Mady no quería admitirlo, pero verlo otra vez le había afectado, había sentido exactamente lo mismo que siente con Owen, «eso no está bien» pensó ella «estoy enamorada de Owen, no de un hombre que no conozco ni su cara».

El enmascarado se dirigía hacia ella, como el día de la fiesta de disfraces, «¿pero, como la reconocía si llevaba un antifaz?» «quizás, sólo era casualidad».

Ya estaba delante de ella, acercó su boca al oído de ella y le susurro en el.

— Estás preciosa Mady.

— Yo... no te me acerques por favor — pidió Mady.

— ¿Por qué? —él la miró detenidamente.

— Tengo pareja.

— ¿De verdad?

— ¡Si!, te agradecería que no me molestaras, podría vernos y mal interpretar las cosas.

— Estoy seguro que no se pondrá celoso.

— Tu no lo conoces.

— Ven, te quiero presentar a mi hermano —le pidió él.

— No tengo porque conocer a su hermano —respondió Mady enfadada.

— Está bien , entonces lo llamaré yo —Mady vio cómo el enmascarado buscaba con la mirada a alguien— ¡JAKE! ¡VEN!

Mady vio como se acercaba un chico parecido al enmascarado, pero mas bajo y con el pelo mas claro. Cuándo estuvo delante de ellos, en ese momento se quitó el antifaz, y Mady pudo ver que era Jake, el chico que había conocido un día y con el que no salió por culpa de Owen.

— Jake, hace tiempo que no sé nada de ti —dijo Mady quitándose el antifaz— Soy yo, Mady.

— Mady, caray que hermosa estás, ¿cómo te va?

— Pues bien, tengo novio, es el que esta de cumpleaños, aunque no sé dónde se a metido que no lo encuentro —dijo ella buscando con la mirada a Owen.

— ¿Owen dices? —preguntó Jake.

— Si, ¿lo conoces? —Mady miró a Jake— Dime por dónde anda por favor.

— Yo creo..

— ¿Cómo que dónde está?  —Jake soltó una carcajada— Está aquí a nuestro lado  —dijo dándole una palmada en el hombro al enmascarado.

— ¡¿CÓMO?!  —Mady no podía creer lo qué acababa de escuchar— ¿tú eres Owen? - dijo dirigiéndose al hermano de Jake.

— Mady yo... te lo quería decir antes pero no sabía cómo —el hombre se quitó el antifaz enseñando quien era realmente, Owen.

— Eres un mentiroso de mierda — Owen intentó tocarla— ¡NO ME TOQUES! —ella salió corriendo.

— ¡MADY! —Owen intentó ir detrás suya pero Jake se lo impidió.

— Dejala, te mereces lo que te está pasando, era una mentira muy grande Owen.

— Lo sé...

Mady corrió con lágrimas en los ojos hasta su casa, allí la esperaba su amiga Carol.

— ¿Qué te pasa? ¿por qué vienes en ése estado? —preguntó Carol asustada.

— Es un mentiroso, un maldito mentiroso —decía entre lágrimas.

— ¿Quien? —preguntó su amiga confundida.

— Owen, él es el enmascarado, me ha mentido todo éste tiempo.

— ¿Estás segura?

— Si, me tengo que ir de aquí, no quiero que me encuentre.

— ¿Pero, a dónde vas? No te vayas por su culpa.

— Me voy, y no tengo nada más que pensar —Mady andaba de un lado a otro de su habitación guardando su ropa en una maleta— No quiero que le digas a dónde voy, mejor no te lo digo ni a ti así va ser mejor.

— ¿De verdad te vas? —Carol no paraba de llorar por la partida de su amiga.

— Si, te quiero mucho Carol, sabes que eres como mi hermana, cuídate —cogió su maleta y salió de ésa casa sin mirar atrás.

Aún no sabía a dónde iría, pero estaba segura que no se quedaría a esperar que Owen la encontrara. Estaba muy dolida con él, «por dios, Owen era el enmascarado, era el padre de su hijo, y él lo había sabido desde el principio» pensó Mady mientras le echaba un último vistazo a la que había sido su calle.

Aquí os dejo el antifaz de Mady. Un saludo.