Atendiendo al amor (Itachi Uchiha y tú)

Capítulo 23: Amor

- Itachi, tenemos que hablar, así que por favor, ayúdame a entender esto tan complicado para mí también-

-Te ayudaré y apoyaré siempre, pero esta vez, también necesito tu ayuda-

Me sentía algo nerviosa, no sabía por dónde empezar... No, si lo sabía y debo hacerlo.

-Perdón-ambos dijimos al unísono aquella palabra, lo miré algo sorprendida, seguido comenzamos a reír.

-Supongo que es así-dije soltando un suspiro, me sentía más relajada pero aún tenía que hablar-, Itachi, perdón por lo que dije, no era cierto, si tengo dudas, pero... También tengo...-me puse nerviosa, no sabía si decirlo, me avergonzaba decir algo tan indiscreto.

-Si no quieres decirlo, no lo digas-sugirió Itachi agarrándome las manos suavemente.

-Tengo deseos, deseos que no sé si avergonzarme o no-dije de manera rápida, no pude mirar a Itachi, la vergüenza me comía.

-Perdón por no comprender tus peticiones, pero realmente tengo miedo de que te alejes o de lastimarte de alguna manera, pero realmente quiero poder acercarme a ti y ser feliz contigo, pero creo que no lo hago bien-hablo algo triste.

-¿Es por tu secreto?...¿Tu vida pasada?-pregunte.

-Asi es-afirmo, era obvio que le afectaba, pero no sabía qué hacer muy bien con aquello.

-Itachi, te quiero y aunque tenga que decirlo cada segundo lo diré, quiero estar contigo y... Cuando realmente te sientas preparado para hablarlo, hazlo, pero si no quieres hacerlo nunca, también lo aceptaré, porque es tú decisión y sea cual sea, aquí estaré para ti-sentia mis mejillas y orejas arder, el nudo ligero en mi garganta, el revoltijo en mi estómago. Sentí su mano en mi mejilla, la acariciaba suavemente, dándome tranquilidad.

-Quiero ser parte de tu vida, gracias por ser tan amable... Definitivamente te necesito más de lo debido-declaro con una voz gentil y suave. Lo miré, sus ojos me mostraban su gentileza como siempre-. Te quiero-

Ambos nos acercamos. Comencé a sentir su aliento más de cerca, sus latidos, los cuales eran tan acelerados como los míos, sentía esa cercanía, que de alguna forma me hacía sentir algo tímida, pero con grandes deseos de acercarme; se sentía como si nada fuera suficiente, pero a la vez era todo lo que necesitaba. Comencé a sentir su respiración en mis labios, era cálido, una sensación inolvidables, aquellas que te llevan al cielo, que simplemente te hacen sentir que la mejor parte de tu vida, aquella que es una eternidad, pero a la vez no dura ni un segundo, simplemente lo era todo.
Este beso lo era todo y más.

Pasamos la tarde juntos, hablamos de cosas triviales, se sentía tranquilo, era un sentimiento realmente increíble, sentía como mi pecho explotaría en cualquier momento.

-Bueno, me tengo que ir-dijo Itachi tomándome de las manos.

-Claro... Gracias por venir-dije sonriendo.

-Gracias por recibirme-respondio. Me dio un beso en la frente.

Itachi dio la media vuelta, para irse, pero definitivamente hoy no quiero que se vaya.

-¡Itachi!-llame, él volteó a verme-, ¿Quieres quedarte esta noche?... Solo si puedes, no es...-

-Si quiero-respondio, yo sonreí en grande al escuchar su respuesta.

Ambos caminamos a casa. Ya era tarde, así que me dediqué a preparar la cena.

-Te ayudo-dijo Itachi quitándose su abrigo.

-De acuerdo, ¿Que se te da bien?-pregunte.

-Puedo hacer cualquiera, tu solo dime-respondio.

-Pues... Puedes picar las verduras-dije pasándole las verduras, una tabla y un cuchillo.