Carmesí [#1]

🥀40🥀 Luna

LUNA

Los primeros días de enero estaban presentes, la isla estaba abarrotada de turistas los cuales pasaban a cada rato frente al colegio, tomando fotos del lugar y de ellos mismos en él. Sí solo supieran la realidad que esconde ese gran edificio.

La estatua de lobo en la entrada del edificio con la inscripción "Una cazadora y un lobo viven su amor en la cima del acantilado, unidos con la luna llena", estaba abarrotada de gente con ansias de querer una foto.

Estaba recargada en el balcón principal, veía a aquellas personas tomarse fotos y a los niños mirar con entusiasmo aquella estatua, pareciera que estuvieran hipnotizados.

―La lluvia caía lentamente, la luna alumbraba las suaves gotas. Aquel hombre con su mujer muerta en brazos, lloraba desconsoladamente con la cabeza sumergida en el cuello de su amada. Tiempo después acepto su destino, nunca volvió a cambiar a su forma humana... ―hablo Mason a mi lado.

―Se la leyenda ―lo interrumpí.

―Bien ―dijo de mala gana, dio media vuelta y empezó a caminar.

―¿Es enserio? Regresaste hace dos días... ¿Qué te hice? ¿Por qué estas molesto?

Se detuvo y regreso hasta mí.

―Puedo apoyar que tengas problemas con quien quieras, incluso que por un extraño motivo seas amiga de Tamara, sobre todo después que casi le rompes la nariz y que la enterarás viva, lo que no puedo aceptar es que hayas perdonado a Stev, que lo hayas hecho tu socio y que por lo visto hayas olvidado todo lo que te dijo y sus amenazas, no puedo tolerar que tú ―me señalo― siendo como eres, tengas una amistad o lo que tengas con él, ese es mi problema... así que si quieres que conserve el grado de respeto que tengo por ti, dame un tiempo para procesarlo.

―¡Por Dios, Mason! ¿Cuándo me has apoyado? Apoyar es estar conmigo siempre, sin cuestionarme. Tú nunca has hecho eso ―su mandíbula se tensó―. ¿Sabes por qué dude en intentar ser tu amiga cuando nos reencontramos? Fue por esto, te la vives cuestionándome, siempre fue así. Y los dos sabemos que tu y yo nunca podremos ser amigos... si dices conocerme sabes que tengo una razón para todo. Muchas veces he confiado en ti sin necesidad de que me enseñes pruebas ¿Por qué no puedes hacer lo mismo?

―Esperé comprensión, que pudieras entenderme. Los hermanos se apoyan, ¿O no? ―evadió todo lo que le dije.

―No lo sé, tú nunca has sido uno, los hermanos entenderían las decisiones de los otros, aunque no estén de acuerdo... y tú y yo hemos cruzado las lineas de hermanos demasiadas veces.

―Perdonaste al tipo que te amenazo, que te insulto y que enveneno a tu mejor amigo, lo mando al hospital. León casi muere y tú se lo compensas haciéndolo tu socio y metiéndolo en tu círculo de amigos y de un día a otro me pides que te entienda.

Mis ojos comenzaron a arder. Sabía que tenía razón, pero no lo hacía por él, lo hacía por ella porque si a Stev le pasa algo Clara sufrirá, no dejare que su bebé salga perjudicado. No podría vivir con más culpas.

―León es mi mejor amigo pero está muy grandecito como para saber lo que está bien y lo que está mal. Además ya platique con él sobre eso.

―La Lía que yo conozco, con la que he vivido más de diez años no haría algo como eso... no tengo idea de que te hizo o como le hizo para convencerte y siendo sincero estoy cansado de esto.