✐ Seguramente todos conocen la famosa historia del hilo rojo. Al parecer, a Son, le fue concedido el poder de ver el dichoso hilo, pero, algo llamará la atención de Chaeyoung, el hermoso hilo dorado de Myoui Mina.
➣ Saga: Colores.
➣ Historia totalme...
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Cuando me levanté, estaba en un tipo de jardín lleno de nubes y una niña estaba apretando mi mejilla con su dedo. Abrí mis ojos y la vi, era muy linda y mucho más baja que yo, era pequeña.
— Soy Yuna...— dijo con una amable y adorable sonrisa. Le ponía unos siete años. Claramente sabiendo que murió a los 6.
— Soy Chaeyoung.— dije mientras me levantaba. — ¿Eres la hermanita de Tzuyu? — ella asintió con emoción.
— ¡Mi hermanita! ¿La conoces? — repuso aplaudiendo y con un notorio tono agudo.
— S-Sí... Aunque yo no debería estar aquí.— respondí mientras pasaba las manos por mi cuello.
— Sí vuelves... ¡Mándale saludos! Extraño mucho a Tzuyu-chan, a mis Papitos y a manchitas...— dijo la niña mientras se sentaba en el tipo de jardín.
— ¿Manchitas? — interrogué con una ceja enmarcada en mi rostro. La menor hizo un ademán en confirmación.
— Mi peluche de osito, sí... Él.— tomó unas dos flores. — No importa, sé que Tzuyu lo cuida, lo tiene en su habitación y duele abrazarlo seguido, no lo suelta y eso me hace saber que cuida a mi manchitas.— Yo logré sentir un punzón en su alma.
Tan inocente su ser... ¿Acaso son así todos al morir? Siempre se ven así, tan impolutos... Tan inmaculados e ingenuos, como niños, todos, las edades que sean, hasta en Hoon pude sentir una sentimiento tan ajeno a la malicia.
Luego de jugar un rato, le prometí a la dulce hermanita de Tzuyu que la saludaría, claro que sí, aún no sabía ni como salir de esto pero..., Lucharía por cumplir mi promesa y con volver con Mina.
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Mina.
— ¿Estás lista? — inquisitivamente miré a Nayeon y ella me dio unas palmaditas. — Al parecer el ángel de la muerte al cual acompañarás se llama... Bangchan.
— Bien, estoy lista... ¿Qué pasa si fallo? — Interrogué yo. En ése momento interrumpió Solji.
— Vuelves a tú realidad y Chaeyoung terminará su proceso de muerte para ir al cielo.— respiró profundamente para verme. — Y ése es el fin, ella no puede hacer nada aún si quisiera.
