Te deseo con cada célula (OMEGAVERSE)

capítulo 11

"Eres una decepción"

P.O.V Ethan

Podía escuchar las voces de mis padres desde dentro de la casa, dudaba si insertar la llave para abrir la puerta principal, hace mucho no los veía, y el olor a enfado de mi padre se percibía hasta aquí. Extrañaba demasiado a mi madre, pero no puedo decir lo mismo de mi padre, cuando se entere de lo que he estado haciendo últimamente me matará, siempre le he tenido miedo a sus reacciones tan explosivas, desearía que su regreso se hubiera retrasado unos días más. Una mano en mi hombro me devolvió al mundo real, cuando volteé el rostro vi a Brandon brindarme una mirada tranquilizadora.

-Estoy contigo, podría explicarles...- Al no encontrar las palabras correctas se quedó en silencio.

Acaricie su mano sobre mi hombro con delicadeza, pensando en lo que me esperaba tras la puerta, él no merece ser el objetivo del odio de mi padre.

-Ve a casa... lleva mi bicicleta, tengo cosas que hablar con mis padre. No quiero que te metas en esto conmigo- Susurre mirando como su expresión cambia a una de tristeza, entonces, tome su cara entre mis manos. -No me volveré a alejar, solo quiero que no veas el desastre que es mi familia, ni te quiero aquí cuando se salga de control...-

-Esta bien... te veo en el instituto- Se alejó de mi agarre y se fue montando mi bicicleta.

Me quedé unos segundos viendo su espalda y oliendo su esencia para relajarme, lo veía alejarse de mi, extrañando su presencia, y si fuera por mi iría detrás de él para quedarme entre sus brazos eternamente, sin tener que enfrentar mis problemas y temores. Suspirando abrí la puerta principal y de inmediato dos pares de ojos se posaron en mi.

-Hola- Salude bajando la mirada a mis zapatillas, quería correr fuera de allí, sus miradas me producían mucho dolor.

-Ethan, bebé... los padres de Mary nos dijeron que te estabas perdiendo, por eso adelantamos nuestro regreso- Dijo mi madre abrazandome, pude sentir todo el afecto a través de esa acción. Por milésimas de segundos pude sentir aquella calma de cuando era pequeño, esa cálida atmosfera que hacia desaparecer los malos momentos.

-Ya... ya lo solucioné todo mamá- Fue lo único que pude articular antes que mi voz se quebrase y lágrimas comenzarán a caer por mis mejillas.

-Cariño, está bien, solo estaba preocupada- Respondió mi madre acariciando mi espalda, ella sabía como reconfortarme siempre.

Nos quedamos un rato abrazados mientras yo lloraba, no quería que eso se acabara, porque sabía que en cuanto nos alejásemos mi padre iba a hablar. Sin embargo, al romper el abrazo observé por encima del hombro de mamá, mi padre solo miraba la escena con los brazos cruzados y ojos centelleantes de como escarlata.

-Ve a tu habitación, yo hablaré de esto con tu padre, lo haré entender- Me susurro mi progenitora.

Yo solo asentí, y cuando iba pasando por al lado de mi padre para subir las escaleras hacia mi habitación, la mano de él me detuvo con rudeza, tomándome del brazo.

-¿Donde crees que vas? ¿Piensas que no supe lo de las drogas, tus calificaciones y el Lacrosse?- Pregunto mirándome con furia.

-Yo... ya le dije a mamá que lo solucioné, no volverá a suceder- Contesté mirando la mano sobre mi brazo.

-Muy bien, eso espero- Me soltó y comencé a subir lentamente las escaleras -¡Ah! Una cosa más ¿Cómo crees que nuestra reputación quedó después de tu puto berrinche de niño pequeño?-

-No... no lo sé- Murmure sin voltearme, no quería ver su expresión de nuevo, en secreto siempre le temí a mi padre. Aunque yo también fuera un alfa, el tenia cierta aura oscura que me atemorizaba.